martes, 28 de enero de 2020

NOS ENGAÑAN

NOS ENGAÑAN

Tito Ortiz.-

Los políticos nos engañan, eso es algo palmario, pero es que además, se engañan unos a otros. Ahora el trabajo de un caballero veinticuatro, es una suerte de trilero, para engañar, no solo a la oposición, sino incluso a los compañeros de pacto gubernamental, que ya es decir. No hay nada más desternillante que, la presentación para su aprobación, de unos presupuestos correspondientes a un ayuntamiento en banca rota, y que más de la mitad del gasto se vaya en nóminas y amortización de deudas, con lo cual, no hay que ser un genio para advertir, que cualquier atisbo de creatividad social en pro de los ciudadanos y sus necesidades vitales, está fuera del alcance de quienes se empeñan en engañarnos, haciéndonos pensar que tenemos un futuro en la administración municipal. Máxime si tenemos en cuenta, que en el utópico capítulo de ingresos, se ponen cifras que todos saben, no se van a alcanzar ni de coña, pero como el papel lo aguanta todo, pues venga, ancha es Castilla, vamos a cumplir el trámite de aprobar los presupuestos, y del déficit crónico que alcanza una deuda apabullante, ya se encargará la próxima corporación en aumentarlo, porque aquí a los malos administradores municipales, históricamente, nadie les pide cuentas. No hay nada mejor que jugar con un dinero que no es tuyo y del que nadie te pide cuentas. Otro gallo les cantara a estos irresponsables, si al no cumplir con los presupuestos presentados, tuvieran que responder ante la ciudadanía con su patrimonio, como castigo a su mala gestión. Pero como aquí nunca pasa nada, pues a seguir engrosando la deuda, y el que venga detrás que arree. Ya del pago a proveedores y su descomunal retraso ni hablamos, porque si lo hacemos, nos puede dar un ataque de risa tal, que terminemos convulsionando.

La irresponsabilidad de un político manejando un presupuesto público es tan dantesca, que osan acometer las mayores felonías, bajo el manto protector de sus partidos, de la oposición, y del sistema legislativo que se han dado asimismos, para no terminar en prisión, y hacer de su capa un sayo con total impunidad. Un político mal gestor en la actualidad, pasa inadvertido para la fiscalía, a no ser que prevarique o, se lo lleve calentito. Cualquier otro ciudadano que dilapide un patrimonio empresarial o particular, es sentado en el banquillo para rendir cuentas. Un político que hace lo mismo en el ejercicio de sus atribuciones, se va de rositas por el simple hecho de serlo. 
A mí no me parece serio, que el portal de transparencia no esté actualizado, y por lo tanto, cada día sea más opaco. ¿Quién decide lo que se cuelga o no en ese portal?  Los ciudadanos, deberíamos asistir a las conversaciones donde se fraguan los convenios con, La Empresa de Transportes Robert, con la de limpieza, la del agua y todas las que dependen de nuestro ayuntamiento, como es el caso de Emucesa, que al tratarse de los muertos como material de negocio, no debe extrañarnos que luego aparezcan fantasmas de contratados a dedo, que jamás pisaron sus instalaciones. Esta falta de inspección, de vigilancia ciudadana sobre nuestros políticos, nos ha llevado al caos que vive nuestra ciudad, que oye llover con la tragedia de los cortes de luz en la zona norte, o ha asistido impávida al corte por nieve de la A-92 durante dos días, algo que no ocurría desde que nuestros antepasados viajaban en diligencias. Por cierto, ya que el delegado del gobierno andaluz ha prohibido hablar a los técnicos con los medios de comunicación: ¿Tendrá él una explicación coherente? 

No hay comentarios:

Publicar un comentario