domingo, 29 de enero de 2023

PATRÓN DE GRANADA

 PATRÓN DE GRANADA




Tito Ortiz.-


Aunque toda su historia está cuestionada, incluso por sesudos teólogos, ya sea la leyenda o lo que fuere, se dice que el uno de febrero del año cincuenta y cinco de la era cristiana, San Cecilio sufrió martirio hasta la muerte en la hoguera, arriba en nuestro Sacromonte, donde se veneran sus reliquias. Según una tradición cristiana medieval recogida en la leyenda de los siete varones apostólicos y el Códice Emilianense,​ documentos del siglo X basados en textos más antiguos, fue uno de los siete varones apostólicos, discípulos del apóstol Santiago, enviados a evangelizar a Hispania por san Pedro y san Pablo. Es considerado primer obispo de, Ilíberis y desde finales del siglo XVI venerado como patrono de Granada y su archidiócesis.

Así las cosas, los granadinos cristianos lo tenemos como tal, le rendimos culto, y aunque su día no sea fiesta local como en otros tiempos, la festividad se pasa al domingo siguiente, para darnos la oportunidad de subir las siete cuestas, visitar las catacumbas, y si el tiempo acompaña, echar un día de alegría y regocijo, recuperando tradiciones gastronómicas como las de saborear unas buenas “salaiyas”, habas verdes y tiernas de nuestra vega, y una raspita de bacalao, para aquellos que gustan de las emociones fuertes. Del control de avituallamiento se encarga la casa consistorial, con el reparto gratuito del condumio, y aquí recuerdo con emoción y cariño, aquellos años en los que mi inolvidable, Manolo Ocón, ayudado por una patrulla de funcionarios municipales, entusiastas de nuestras tradiciones, se encargaba de estas cosas, para que los granadinos pasaran un buen día, junto a la Abadía sacromontana. En aquel grupo de colaboradores desinteresados, siempre contábamos con la colaboración de Pepito el de “Los Diamantes” de la calle Navas, que se tiraba todo el día haciendo cientos de tortillas “Sacromonte”, como plato imprescindible por la festividad y el lugar, con la ayuda de voluntarios como, Jesús Luque, Antonio Valdivia, los hermanos Ortiz y José Carranza, “Wily”.

LITURGIA Y MÚSICA

En aquellos años de la transición política, cuando los socialistas llegaron al poder en la plaza del Carmen, capitaneados por, Antonio Jara, no fueron pocas las voces agoreras, que fueron publicando por los mentideros, que “estos” rojos, acabarían con la subvención municipal a la semana santa, y que no aparecerían en ningún acto religioso. Y nada más lejos de la realidad. En aquel ayuntamiento estaba como responsable de muchas cosas, el comunista, José Miguel Castillo Higueras, que una de las primeras decisiones que tomó con la anuencia de la nueva corporación, fue la de triplicar la asignación económica que hasta entonces recibían las hermandades, y la asistencia de la corporación, a cuantos actos religiosos tuvieran lugar como, San Cecilio, La Virgen de Las Angustias o El Corpus. Incluyendo como colaboración de la casa consistorial, la presencia de la Banda Municipal, donde destacaba la presencia de Carlos Atienza, como joven percusionista, y que hace pocos días se nos ha ido prematuramente, dejando un hueco imposible de llenar, en los corazones de quienes tuvimos la fortuna de gozar de su amistad. El ayuntamiento también incluía las actuaciones del Grupo Municipal de Coros y Danzas, que nos ofrecía la oportunidad de recordar todo nuestro folklore autóctono, incluido nuestro imprescindible, baile de “La Reja.” Y por supuesto, como dejan testimonio de la época, las fotos de ORFER, la corporación bajo mazas, asistía a los oficios religiosos en la Abadía, con gran protocolo y total solemnidad.

OTROS PATRONOS

Hay quién mantiene, que antes de san Cecilio, nuestro Patrón fue, San Gregorio Bético, Obispo de Elvira, en la provincia de Baética,  de donde deriva su sobrenombre; murió alrededor del año 392. Primero vemos a Gregorio como obispo de Elvira (Iliberis) en 375; Lucifer de Cagliari lo menciona en su “Libellus precum ad Imperatores” (Migne P.L., XIII, 89 ss.) como el defensor del Credo Niceno. Demostró ser de todos modos, un ardiente oponente del arrianismo, defendió el Credo Niceno en el Concilio de Rimini, y se negó a entrar en ningún trato eclesiástico con los obispos arrianos Ursacio y Valente. De hecho, tomó la opinión extrema, junto con el obispo Lucifer, que era ilegal hacer avances a los obispos y sacerdotes que alguna vez se habían manchado con la herejía arriana, o mantener ninguna comunión religiosa con ellos. Todo apunta que fue un hombre de carácter, y que en algún momento ejerció nuestro patronazgo, antes de que se decidieran por san Cecilio. También hay nómina de “copatronos”. No son pocos los que adjudican este cargo de honor a, nuestro venerado San Juan de Dios.  Cercana la Navidad de 1533, Juan llegó a Granada. Era un lugar bullicioso, hervidero de razas, encrucijada de culturas y creencias, paso obligado de los comerciantes, aventureros y pillos que deseaban partir hacia las lejanas tierras descubiertas por Colón.

Puso tienda en la Puerta Elvira, donde estuvo ejercitando su oficio de librero. Juan cambió de vida, y así, el 20 de enero de 1534, Granada hacía una fiesta en la ermita de los Mártires, en lo alto de la ciudad, frente a la Alhambra, en honor de san Sebastián. Predicaba un excelente varón, maestro en Teología, llamado el maestro Juan de Ávila. Sabía transmitir la palabra de Dios, certera y penetrante. Fue a escucharle mucha gente y, entre ellos, Juan. Salió de allí, transformado y decidido a emprender nuevo estado, dando voces, pidiendo a Dios misericordia, arrojándose por el suelo, lastimándose y haciendo duras penitencias. Los muchachos corrían detrás de él dándole gritos: “¡Al loco, al loco!”. Y a partir de ese momento, Granada fue su destino y su cruz.

domingo, 22 de enero de 2023

LOS ILIBERITANOS

 LOS ILIBERITANOS



Tito Ortiz.-


El pasado mes de diciembre, se cumplieron 44 años de aquella inolvidable exposición celebrada en el centro Manuel de Falla, que reunió, una vez más, aquella panoja de artistas granadinos, que en 1954, decidieron reunirse como grupo artístico de la tierra, para mostrar al mundo lo mejor de su arte. Eran alumnos de la Escuela de Artes y Oficios de Granada, donde recibían clases del profesor de Historia del Arte, Marino Antequera, entre los que se encontraban Alfonso Domínguez, José Hernández Quero, José Galán Polaino, Antonio Moleón España, Miguel Moreno, Luis Soriano Quirós y José María Ysmér. En casa de éste último, tuvieron lugar muchas de las reuniones del grupo. Aunque palentino de nacimiento, Ysmér se formó en Granada y junto a otras actividades, destacó como acuarelista de prestigio internacional. Otro lugar de encuentro fue, el estudio de Miguel Moreno en la cuesta de Gomérez, sin olvidar las múltiples reuniones llevadas a cabo en el desaparecido, Café Suizo, de Puerta Real, esquina a Poeta Zorrilla.

Pronto se cumplirán siete años de la exposición que los supervivientes, celebraron en la galería Milenyum de la calle Puentezuelas, con la mirada nostálgica puesta en aquella primera muestra que, protagonizaron como grupo artístico, auspiciada también por Marino Antequera, en 1954, cuando el Centro Artístico Literario y Científico de Granada, se convirtió en la plataforma para dar a conocer al mundo, a los distinguidos integrantes del recién nacido grupo “Los Iliberitanos”.

DIVERSOS LENGUAJES ESTÉTICOS

Pese a tener casi idéntica formación académica, lo que hizo del grupo su mayor atractivo, fue la diversidad técnica y estética de su mensaje en las artes plásticas. En aquella mitad del siglo XX, Miguel Moreno – el benjamín del grupo –  el único escultor entre los convocados, ya despuntaba con una dicción plástica de los volúmenes, avanzada a su tiempo, sin rompimientos con lo académicamente correcto, pero con la frescura de un estilo artístico avanzado, con el que años después ha conseguido el reconocimiento internacional de su obra. Por cierto, que sigo sin ver su estatua de Gallego Burín por las calles de Granada, y creo que ya va siendo hora. 

José Hernández Quero, recibió las primeras enseñanzas artísticas de su vecino, Antonio Moleón, que lo llevó a la escuela de Artes y Oficios de Granada, y ya desde ahí, se proyectó al mundo, habiendo realizado su primera exposición individual, en el desaparecido Liceo de Granada, allá por 1957. En cuanto a Antonio, hay que destacar que ya en 1949, había expuesto en el Centro Artístico, en una muestra homenaje al paisaje granadino, y que su formación técnica le permitía abarcar diversas texturas plásticas, como lo demostró en las pinturas que en su interior, conserva el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Granada.

Cada uno de ellos tiene una brillante trayectoria en su historial, que los granadinos debemos tener muy presente, para no olvidar el reconocimiento debido a nuestros artistas. Pese a que el grupo se disgregó, como tal, en 1959, por razones de responsabilidades profesionales en otras provincias, nunca perdieron el contacto, y los que por razones de edad, ya no están con nosotros, sirven de nexo de unión con los que afortunadamente, aún viven, para recordarnos la brillante trayectoria de nuestros artistas.

LOS CEMENTERIOS FLOTANTES

Con tan sugestivo título, ha salido de la imprenta en ediciones Carena, la última poesía de mi hermano, Antonio Enrique, que desde su atalaya accitana, conmueve y convulsiona el alma de los sensibles a tan contundente mensaje. Obra de madurez compositiva, con las licencia que le permiten las anteriores, sin renunciar al mensaje eterno de la palabra directa al corazón y la mente, la obra encuadernada en el interior de, “Los Cementerios Flotantes”, requiere del lector una complicidad sin límites para ser entendida, y posteriormente degustada. Obra fresca y contemporánea, que abarca el total de los sentidos, necesariamente abiertos a una nueva dicción y una moderna estética, consecuente con lo que se espera de un autor formado para el siglo XXI. Dispóngase el lector pausadamente, a disfrutar de lo impreso, que a partir de ser leído, se convierte en inquilino perpetuo del alma receptora de tan contundente mensaje, solo apto para paladares finos y muy versados. Absténganse los amantes de los ripios y las rimas. El que avisa no es traidor.

EL PATITO FEO

Me conmueve comprobar como decenas de años después, la herencia del gran Hermenegildo Lanz, colaborador tantas veces de Federico García Lorca y Manuel de Falla, sigue intacta y en progresión constante. En días de belenes, me invitaron mis nietos a ver en el Centro Lorca, “El Patito Feo”, de la compañía Etecétera, y fue todo un disfrute y divertimento. Esta compañía cuarentona, sigue creando fantasías artísticas de un nivel que, traspasa nuestras fronteras, y que hace del teatro de títeres, un espectáculo multicultural, que abarca al gran público, poniéndolo a nuestra disposición con una generosidad artística, envidiable. Con el protagonismo de las marionetas –cristobicas que diríamos por aquí- son ensambladas perfectamente, una brillante narración en escena, y una partitura musical de primer orden, junto al oportuno atrezzo y el manejo acertado de las luces, hacen de este clásico, una versión fresca y moderna, envuelta en el celofán de la justa medida y el buen gusto, que llevan a cabo una docena de profesionales, avalados por la experiencia y el acierto. La horquilla de edad en el patio de butacas era enorme, y a la salida, todos opinaban igual, desde los abuelos a los nietos, pasando por los padres. La satisfacción por lo representado era total, y ese sí que es el mejor aplauso que se le puede dar la compañía Etecétera. Mis nietos han prometido que si me porto bien, me volverán a llevar.

domingo, 15 de enero de 2023

AÑO MANJONIANO

 AÑO MANJONIANO


Tito Ortiz.-


Con el deseo de que el proceso de beatificación de don Andrés Manjón siga su curso, finalizaba la intervención del presidente de su fundación, en el acto con el que se daba la salida oficial, para conmemorar el Centenario del fallecimiento del fundador de las escuelas del ave maría, en el paraninfo de la facultad de derecho, donde el presbítero sigue siendo una referencia, a cuya entrada,  una placa recuerda su paso con huella indeleble por la Universidad de Granada. Una ciudad en permanente deuda con el hacer de quién, ostentando por derecho propio, las más altas responsabilidades académicas y pedagógicas de la época, no descuidó en absoluto a los más desfavorecidos, aquellos a los que diariamente veía cuando bajaba del Sacromonte a la Facultad de derecho, y lo llevó a a fundación de las “Escuelas del Ave-María”. Movido por la pobreza y la incultura de los numerosos niños y espoleado por el ejemplo de una semianalfabeta “maestra de migas” que enseñaba canturreando el catecismo a un grupito de párvulos en una cueva, el 1 de octubre de 1889 fundó una escuela para niñas indigentes en el camino del Sacromonte y cumplió así un viejo sueño. Desde el principio, se trazó como meta “enseñar a quien no pudiera pagarlo”, y a ese fin dedicó íntegramente sus ingresos de la canonjía y se lanzó a recolectar donativos y limosnas de numerosos benefactores. Coronada por el éxito su experiencia del Sacromonte, progresivamente fue tejiendo una red escolar por España y América que vertebró un poderoso movimiento de educación católica popular. Para reforzar su acción educativa fue publicando periódicamente las Hojas del Ave-María, artículos ágiles y breves destinados a informar sobre el desarrollo de la institución avemariana, a proporcionar una orientación catequístico-didáctica y a examinar problemas específicamente pedagógicos, y en 1905 fundó un seminario de maestros acorde con sus planteamientos.

EL ACTO

En un discurso brillante –como siempre- del profesor, José Luís Pérez-Serrabona González, el auditorio tuvo conocimiento de la pormenorizada historia de don Andrés, a su paso por las aulas universitarias granadinas, y sin dejar de ensalzar esa actividad docente, el alcalde de Granada, Francisco Cuenca, valoró la trascendencia social hasta hoy, de la obra manjoniana, junto a su personalidad carente de ambición en cuanto a cargos y reconocimientos.

El Coro de Amigos del Instituto Padre Manjón, dirigido por María Eugenia Alvar Milinero, con Juan José Arnedo al piano, ofrecieron media docena de partituras, finalizando con el himno marcha de las escuelas del Ave María, procediéndose a continuación, al descubrimiento de una placa conmemorativa, en la que se deja patente para la historia, la importancia que tuvo su paso por Granada de, Manjón y Manjón, su legado y la vigencia de este burgalés, que ya es un granadino ilustre más para la historia. Una diversidad de actos a lo largo de 2023, nos recordarán permanentemente, la vida y la obra de quién tanto hizo por la docencia académica, desde la base hasta la Universidad.

INTELIGENCIA ARTIFICIAL

Oídos los interlocutores que tengo habitualmente en mi banco de la Acera del Casino, encaminé mis pasos al Parque de Las Ciencias, buscando un nuevo horizonte sobre mis inquietudes y el futuro que nos ofrece ya, a día de hoy, la inteligencia artificial. Allí me encontré -y estará hasta el mes de septiembre - un joven sin pelo y pajizo como la sábana de un hospital, que gracias a una pantalla moderna, me resolvió todas las duda que yo tenía a cerca de esta nueva ciencia, que ha venido para quedarse. “Inteligencia Artificial. Una exposición sobre las personas, los datos y el control” es una exposición que presenta, de una manera reflexiva e interactiva, el papel de la Inteligencia Artificial  en el mundo digital en el que vivimos. La muestra se estructura en diez áreas temáticas que abordan desde el aprendizaje autónomo de las máquinas, a la Inteligencia Artificial en el hogar y el trabajo, las ciudades inteligentes y su repercusión social. Ante este panorama yo le pregunté a mi interlocutor para que sirve todo esto, y el me contestó que, las Inteligencias Artificiales se diseñan con fines específicos, normalmente para ayudar a muchas personas a mejorar su calidad de vida en ámbitos tan variados como la medicina o la ingeniería.

Un asunto más que sugerente, si tenemos en cuenta que normalmente la información que nos llega a pie de calle, suele reducirse a una tal "Elsa" que a través de un cubículo en la mesa, te dice el tiempo que hace en el exterior antes de salir a la calle, te pone la música de tu gusto y te enciende las luces de casa o baja las persianas, en cuanto se lo pidas de viva voz o desde tu móvil. La cosa tiene su miga, pero nos falta información. La que podemos obtener si visitamos esta muestra, Los sistemas que nos rodean funcionan de una forma inteligente; saben qué es lo mejor para nosotros y responden a necesidades diversas, como: disminuir el consumo energético para ser más sostenibles o mejorar la seguridad en nuestro hogar. Son muchos los alicientes que la Inteligencia Artificial nos brinda, pero, ¿a qué precio? Tus datos son la respuesta. 

Durante las primeras décadas de la informática el ajedrez estaba entre los temas predilectos de los pioneros de la Inteligencia Artificial  porque la comunidad científica lo veía como un campo ideal para probar nuevos algoritmos. La primera partida de ajedrez contra una computadora fue jugada en 1952 por Alan Turing, el padre de la Inteligencia Artificial, ¡utilizando una hoja de papel para efectuar el algoritmo porque no había máquinas suficientemente potentes para realizarlo! En 1997,  Deep Blue ganó a Kasparov, el campeón del mundo del momento, y en 2007 el programa informático AlphaZero fue capaz de aprender a jugar en pocas horas y ser el mejor motor de ajedrez de la historia. 

Me despido de mi amigo alopécico y blanquecino, del que tanto he aprendido, prometiéndole que pronto volveré a estar con el, porque una sola visita a esta exposición no basta para ponerme al día. Sospecho que cuando vuelva a verlo, mis conocimientos ya habrán quedado antiguos, porque este nuevo mundo, requiere una puesta al día constante, de lo contrario, camarón que se duerme, la corriente se lo lleva.

domingo, 8 de enero de 2023

CORTESÍA Y BUENAS MANERAS

 CORTESÍA Y BUENAS MANERAS


Tito Ortiz.-


Los innecesarios enfrentamientos que se producen en la Plaza del Carmen cada dos de enero, albergan mayor virulencia –curiosamente – que la toma real de Granada aquel año de 1492 en el que, algunos historiadores coinciden señalando, que acababa la Edad Media y comenzaba La Moderna, acentuada por el posterior descubrimiento de América. Mí colega, Andrés Bernaldez dice de aquel día:

“ E el Rey e la Reina, vista la carta e enbaxada del Rey Babdili, adereçaron de ir a tomar el Alhanbra; e partieron del real, lunes, dos días de henero, con grand hueste, muy ordenadas sus batallas: E llegando a cerca del Alhanbra, salió el Rey moro Muley Babadili, aconpañado de muchos cavalleros moros, con las llaves en las manos, encima de un cavallo. E quísose apear a besar la mano del Rey, e el Rey no ge lo consentió descavalgar del cavallo ni le quiso dar la mano. E el Rey moro le besó en el braço e le dio las llaves e dixo:


–Tomá, señor, las llaves de tu çibdat, que yo e los que estamos dentro somos tuyos.


E el Rey Don Fernando recebió las llaves e diólas a la Reina, e la Reina las dio al Príncipe, e el Príncipe las dio al conde de Tendilla, el cual, con el duque de Escalona, marqués de Villena, e con otros muchos cavalleros, con tres mil de a cavallo e dos mil espingarderos enbió entrar en el Alhanbra e se apoderar de ella. E fueron e entraron e la tomaron, e se apoderaron de lo alto e baxo della, e mostraron en la mayor altura della e más alta torre, primeramente el estandarte de Jesucristo, que fue la Santa Cruz, que el Rey traía sienpre en la santa conquista consigo. E el Rey e la Reina e el Príncipe e toda la hueste se umillaron a la Santa Cruz, e dieron muchas gracias e loores a Nuestro Señor, e los arçobispos e clerezía dixeron TE DEUM LAUDAMUS.”

Quiere esto decir, que la entrega de la ciudad se produjo dentro de la más exquisita educación, e incluso se evitaron humillaciones innecesarias a los vencidos. Todo se había previsto sin prisa pero sin pausa, desde el 25 de noviembre de 1491, fecha en la que se firman las capitulaciones de Granada en el campamento de Santa Fe, dándole a los moradores alhambreños setenta días para que abandonen la ciudad, un plazo que se acorta a tenor de las revueltas que se suceden, por aquellos que no están conformes con la rendición.

De ahí que, tal día como hoy de 1492, Alfonso de Palencia, escribe una carta en latín a don Juan Ruiz de Medina, obispo de Astorga, contándole los pormenores de la entrega de Granada: 

“El 1 de enero por la tarde Boabdil recibe en la Alhambra a un grupo de soldados cristianos que vienen con la intención de tomar los lugares estratégicos de Granada y de la Alhambra. Tomaron 500 rehenes para garantizarse la buena voluntad de los granadinos. Al día siguiente, después de mediodía sale de Santa Fe la real comitiva para tomar Granada. Van los Reyes, el Príncipe don Juan, la Infanta doña Juana, el Cardenal de España, el maestre de Santiago, numerosos prelados y el clero. Van escoltados por lo mejor de la caballería y del ejército castellano.


Boabdil salió al encuentro de los Reyes. Iba rodeado por cincuenta jinetes. Su rostro reflejaba súplica, arrepentimiento y pesar. Se dirigió a besar la mano de Fernando que iba delante. Fernando impidió aquella humillación del vencido. Por medio de intérpretes Fernando y Boabdil hablaron durante unos momentos. Luego el Rey Chico se dirigió a Isabel con los mismos sentimientos de humillación y arrepentimiento, que fueron correspondidos por la Reina con palabras corteses. A continuación se acercó a las murallas de Granada el obispo de Ávila, futuro arzobispo de Granada, fray Hernando de Talavera. Portaba el estandarte con la Santa Cruz. Subió a la parte más alta de la Alhambra, seguramente a la Torre de la Vela, y mostró la Cruz para que todos la vieran.”

PAPEL MOJADO

A partir de este protocolo modélico, lo que sucede en Granada no tiene nada que ver con lo acordado en la vega. Se destruyó la judería entera, se convirtieron las sinagogas y las mezquitas en iglesias y las casas las repoblaron con cristianos. Los moros que se quedaron como mudéjares o conversos iban pronto a comprobar lo difícil de su situación. Granada ya es otra. Setecientos ochenta años después, Granada es cristiana de nuevo. 

Los primeros en tener que abandonar Granada son los judíos. Se abrió un plazo hasta el 31 de julio de 1492, para consumar el destierro –aunque finalmente se prorrogaría hasta comienzos de agosto–, sancionándose con pena de muerte y confiscación de bienes a los judíos infractores. Del mismo modo, se fijaron castigos para los súbditos del reino que asilaran y ampararan a quienes debían marcharse. A lo largo de los cuatro meses en que había de hacerse efectiva la orden, los monarcas garantizaban a los expulsados protección frente a ataques y también la íntegra disposición de sus bienes muebles e inmuebles. Por ello se dispuso por prescripción regia que, se liquidaran todas las deudas con judíos y que estos pudieran vender sus pertenencias y finiquitar sus transacciones con equidad. Sin embargo, ante el poco tiempo previsto, se cometieron abusos y fueron frecuentes los casos de propiedades malvendidas a un precio muy por debajo del correspondiente o de negocios abandonados en manos de representantes cristianos. Después, les seguirían los moriscos. Y así se escribe la historia.