martes, 24 de septiembre de 2019

SI ME HICIERAIS CASO…

SI ME HICIERAIS CASO…

Tito Ortiz.-

Consciente de que vivo – siendo muy optimista – el último tercio de mi vida, y antes de comenzar a barbear las tablas, presa del Alzheimer, quiero dejar constancia escrita de ciertas verdades, ya avaladas por una apreciable experiencia, que me permite reconocer desde lejos, quién es un político vocacional con el propósito de servir a los ciudadanos, y quién con el rostro de cemento armado, se ha metido a esto para trincar lo que pueda, sin importarle ideología, deontología, honradez, formación o valía para desempeñar cargo público. Yo lo aviso: De los primeros quedan pocos, cada vez menos. Un político a la democracia española, es como el dedo pequeño del pie al cuerpo humano. Tengo la certeza refrendada por mis canas, que el sumo hacedor puso el dedo pequeño del pie, con la sola misión en la vida, de que éste tropezara eternamente con las patas de todo tipo de muebles, especialmente mesas bajas de salón, armarios esquineros, butacas irreflexivas y comodines de pecho paloma, de tal forma, que con tan sencillo gesto, tendría en sus manos la oportunidad de por vida, de castigarnos de manera inmisericorde, porque a nadie se le escapan las loas y alabanzas al altísimo que, todo ser humano suele soltar en cuanto tropieza con el dedo pequeño, sobre todo en verano cuando llevas chanclas. 
Heme aquí, que no tengo mejor ejemplo para explicar lo que es un político de esta nueva hornada de incompetentes, que luciendo acta de diputado en la solapa, llevan cinco meses comiendo del erario público, a costa de nuestros bolsillos. Y además han tenido los santos bemoles de irse de vacaciones pagadas, para volver sin propósito de enmienda. O sea, anteponiendo sus intereses personales y partidistas, a los de todos los españoles. ¿Cabe mayor desvergüenza? Me pregunto hasta cuando debemos seguir permitiendo a esta panda de indocumentados, que sigan comiendo de lujo a nuestra costa, llamándonos a las urnas cuando les parece, con un coste de 180 millones de euros cada vez que a sus señorías, no les cuadra ponerse de acuerdo para gobernar. Sobran las diputaciones, sobra el senado, sobran asesores y puestos de confianza a dedo, sobran dietas injustificables, también sobran las asignaciones a los partidos con representación parlamentaria, sobran las subvenciones a los sindicatos, y los liberados sindicales. Si alguien quiere representar a los compañeros, que lo haga desde su puesto de trabajo. Hay tanto desaprensivo chupando de la teta, que alguno se va a quedar con la ubre en la mano. La vaca no da para más y, el descontento de la población con millones de parados sigue en aumento. La ineptitud de la clase política y su desfachatez trincona, están propiciando la incubación de un mesías, que tarde o temprano aparecerá, y entonces nos echaremos las manos a la cabeza, al comprobar lo que hemos permitido en nombre de la democracia y sus resquicios sin honor. El sistema democrático necesita de ciudadanos que, velen y vigilen la trazabilidad de los comportamientos, para salvaguardar la protección y servicio a la ciudadanía. En los últimos cuarenta años, hemos sido muy ingenuos, permitiendo entrar en el juego político, a quienes solo vienen a servirse del sistema, y no tienen otra Patria ni otro dios que no sea su cuenta bancaria, en Andorra o Suiza, me da igual. En el mes de los santos volvemos a las urnas, como si fuéramos los ciudadanos los que hemos suspendido el curso. Que nadie nos engañe. Están metiendo la mano en el cajón con un nuevo gasto electoral. Luego pondrán el grito en el cielo cuando escuchen… ¡A las barricadas, a las…. 

martes, 17 de septiembre de 2019

“CANINOTANATOSALA”

“CANINOTANATOSALA”

Tito Ortiz.-

Esto de cuidar a las mascotas se nos ha ido de las manos. Cuando yo era niño, los perros comían las sobras de casa y algún mendrugo. Ayer en una gran superficie, buscando un abrelatas – porque cada vez que me voy de excursión, me acuerdo de todo el árbol genealógico del que, inventó el “abrefácil” en todas sus facetas y vertientes – dieron mis ojos con metros y metros de estanterías, repartidas en varios pasillos, donde se exponía la colección más variada de comida para perros. Desde piensos para distintas edades, a latitas de multitud de sabores, sin sal, light, total que echando un vistazo por encima, calculé que había más variedad de comida para perros, que para celiacos en tiendas especializadas, lo que me pareció una aberración, porque no es normal que haya humanos que tratan mejor a sus perros que a sus congéneres. 
He visto reportajes en la tele de, pasarelas de moda con vestidos de alta costura para perros, con collares de piedras preciosas. Hoteles para canes con suites de lujo, en las que se incluyen masajes por especialistas perrunos, preparación al hecho amatorio, noviazgo en sus dos variedades de lento tradicional, o flechazo. Y boda por todo lo alto, con dos opciones: Ordinaria estilo Belén Esteban, en la que se incluyen interrupciones a voces, pregonando el pescado, y la aristocrática, más en la línea de Sergio Ramos, que lleva de serie modelos horteras para ellos, que evidencien la escasez de educación, cultura y reglas de urbanidad en los contrayentes, familiares y amigos. 
Que hay humanos que quieren más a sus perros que a los de su raza, lo demuestran personas como, Pasquale Rizzo, que falleció en 2014, dejándole una fortuna a su perro Tor, de más de siete millones de euros. Había que ver la cara del chucho, sentado frente al notario cuando leyeron el testamento. Carlotta Liebenstein era una condesa alemana. La mujer,  decidió dejar toda su herencia de 80 millones de dólares a su perro Gunther. Quizás guiada por la experiencia de, Thomas Martínez  que vivía en la calle, en Santa Cruz (Bolivia). Un día, la policía decidió acercarse a Thomas mientras dormía en un banco, para decirle que su antigua esposa (de la cual se divorció unos años antes) le había dejado 6 millones de dólares. Thomas pensó que la policía le quería detener y huyó. Los periódicos se hicieron eco de la noticia y trataron de encontrar a Thomas. Pero lo más curioso es que el paradero del millonario sigue siendo aún desconocido. 
Ante humanos que huyen de las fortunas que les son concedidas, es lógico que la gente ahora opte por enriquecer a sus perros, porque entre otras cosas, no tienen oportunidad de huir. Y esto es un nicho de negocio que las funerarias perrunas han descubierto como agua de mayo. Ayer palmó el perro de mi compadre, y cuando avisó a los servicios del ayuntamiento, al instante se personaron en la casa, dos individuos embutidos en sendos trajes negros y chistera en mano, que le ofrecieron la oportunidad de tanatosala velatorio, maquillaje, caja de roble, o de cartón para incinerar – según gustos -  más la posibilidad de taxidermia, para inmortalizarlo en el salón junto a la chimenea. Panteón perruno en el cementerio canino, o bien incineración, con la posibilidad de convertir parte de sus cenizas, en un diamante para colgar del cuello o ensortijar. Nicho o columbario, con lápida de mármol labrada por los hermanos Romero, a lo que mi compadre ha dicho que, prefiere que lo envuelvan en plástico y, envasándolo al vació, se lo envíen  a su exmujer. Afín de cuentas, ella siempre dijo que quería más al perro.

martes, 10 de septiembre de 2019

NO ESTUVE SOLO

Patio de la redacción del Diario Patria en la Calle Oficios. Final de la década de los años setenta del siglo pasado. José Luís Navajas, actual capataz de La Virgen de La Aurora, es entrevistado por Tito Ortiz.-

NO ESTUVE SOLO

Tito Ortiz.-

Este sábado pasado, a la caída de la tarde, se echó La Aurora a la calle, porque sabido es que, como reina y señora del Albayzín, La virgen de La Aurora puede salir cuando quiera y, a contramano.  Salió de san Miguel y no encaró para san José, así que muchos dijeron: ¿pero dónde va?, ignorando que la reina y señora albaycinera, deseaba mirar su Granada, desde el pretil del Carmen de Fermín Garrido, el médico que se nos fue tan joven, y que además, quería darle la oportunidad al gran Pepe Cañas, el mejor pintor realista de la casa de La Lona, de que le hiciera un retrato de perfil, con el fondo del atardecer de Granada. Carril de la Lona abajo la llevaba Navajas, cuando antes de llegar a la Puerta de Monaita, esa de los aguerridos arqueros africanos, defensores de la medina a ultranza, las jarras del frontal se hicieron presentes, y hubo tiempo de echar una mirada al horizonte, incluso una parrafada, pues se me acercó Antonio Berbel Linares, aquel que en su casa de la curva de El Violón me invitaba a vino costa y alcaparras, para decirme emocionado que se sentía muy orgulloso de las manos en que había dejado su legado. El que en los años de las hambres había comenzado, porque el párroco de san José, Manuel Fernández Padial, haciendo reformas en su despacho tirara un tabique, y descubriera a la primera Aurora, oculta a los horrores de la guerra y sus desastres. Y mientras la Aurora ascendía a los cielos por la cuesta de la Alhacaba, Tamayo, el grande, el de la voz recia curtida en cuadrillas de profesionales, se me acercó al oído y me dijo: ¡Ya hubiera yo querido en mis tiempos, trabajar con estos chicos!

Llegó la virgen a Plaza Larga, y el mundo entero se concentró bajo su mirada. Gentes venidas de tierras lejanas, no daban crédito a lo que veían. Como trabajaban esos costaleros, como sonaba esa banda, la de San Isidro de Armilla, tras el manto acompasada, de tal forma que ya es impensable ver a La Aurora en la calle, sin los de Melchor Perelló acompañada. La noche caía sobre Granada cuando la virgen llegó a la iglesia del Salvador, ya con la Alhambra iluminada, y el comandante Marín, sentado en el aljibe de la esquina de la Placeta del Salvador, junto al balcón de las acacias de Benítez Carrasco, oró una vez más ante su Señora, sin dar crédito a lo que pasaba. Su Aurora por el barrio a contramano, por calles que hasta el sábado no había sido suyas, pero ya se sabe que cuando una es reina y madre del Albayzín, nadie cierra calles a tal dama, que la veteranía es un grado, y su parroquia una abierta Granada. En el Peso de La Harina y tras un relevo costalero, se unió al cortejo la zambra, para entrar en el Paseo de Los Tristes, donde a los pies de La Alcazaba, el Dauro pidió la venia para parar sus aguas, y desde La Casa de Las Chirmiás, se encendió candela y lumbre de fragua, cuando el bronce de Mario Maya cobró vida, bailando el Polo y La Caña a los pies de la Señora, que en esos momentos lo era del Albayzín y La Alhambra. Fue todo el pasado sábado, cuando tras la tormenta, la Andalucía cofrade se dio cita en Granada, para celebrar 75 años de La Señora de blanco del Albayzín coronada. Largo el cortejo, calles atiborradas, cuando llegaba el cortejo a San Pedro, se me acercó Talavera, auroro de la cantera, para decirme contento: Todo mereció la pena por Ella.

viernes, 6 de septiembre de 2019

SEGISMUNDO

SEGISMUNDO

Tito Ortiz.-

¡Ay mísero de mí! ¡Ay infelice! Apurar, cielos, pretendo ya que me tratáis así, ¿qué delito cometí contra vosotros, naciendo? Por qué tengo que aguantar la sinrazón de quienes, escondiéndose tras las siglas de sus partidos, ganan opíparos sueldos -algunos hasta "rebañan"- por no hacer nada, por no estar preparados para desempeñar las funciones innatas a, la defensa de los intereses de los ciudadanos, por carecer de la titulación exigida, incluso para manejar una escoba y un recogedor, por eso, el delito mayor del hombre es haber nacido. De lo contrario, Granada no nadaría en basura como al mundo es bien notorio. Más si en vuestro alcázar mortuorio, me aprestáis venganza fiera, mirad bien que aquí os espera, otra vez... don Juan Tenorio. Próximos los cementerios hermanos están, y pone el vello de punta comprobar el estado en que se encuentra su carretera de acceso, la que corona El Llano de La Perdiz. Pulmón natural de Granada, de vistas privilegiadas y deportistas sin techo. El estado de la pista es tan peligroso, que corren peligro quienes la toman para correr, o transitan en coche o moto. Su conservación es denunciable a las autoridades competentes, que en semejante situación de alto riesgo, añaden la falta de limpieza en un paraje donde la basura y el matorral, campan a sus anchas, como si no pretenecieran al municipio.Sólo quisiera saber para apurar mis desvelos (dejando a una parte, cielos, el delito de nacer), qué más os pude ofender para castigarme más. ¿Por qué tengo que soportar? que desde el Puente Verde a la Fuente de La Bicha, la basura y los matojos campen por sus respetos, hiriendo la vista al pueblo, con olores nauseabundos y riesgo de males, típicos de enfermos. Aunque si nací, ya entiendo qué delito he cometido. Bastante causa ha tenido vuestra justicia y rigor; pues el delito mayor del hombre es haber nacido. Y haberlo hecho en Granada, donde su belleza clama y reclama, mejores cuidos de sus políticos. En otra ciudad más fea, la basura y los ramajos, llaman menos la atención, pero en esta joya de Al-Andalus, donde civilizaciones varias dejaron su legado, se exige a los demandados, exquisito trato en conservación y cuidado, pues como elegidos por el pueblo, deben prestar el servicio demandado. No es posible a éstas alturas, que El Lavadero de La Puerta del Sol, sirva de recipiente para escombros y cascajo, la basura del día y los restos de botellones a destajo, que a la luz de la luna, se celebran en lo alto de ese barrio de Los Alamillos, frontera de judios y cristianos. Ahora que ya por fin, Torres Bermejas ha dejado de ser, la letrina del barrio alto, no debemos consentir que la degradación vaya bajando. Se que alguno de los Caballeros 24, ni siquieran han pisado estos lugares sacrosantos, por eso recomiendo su visita y desde el conocimiento de tan triste realidad, la urgente reparación de tanto quebranto, en lugares tan entrañables, por la plebe visitados. Lloro con duelo ante la Puerta de Monaita, lugar por las ordas masacrado, sufro por la Fuente del Avellano y sus contornos, abandonados a su suerte tanto por dios como los humanos, y mi lamento es eterno, cuando camino del Dauro, bajo desde El Llano de La Perdiz a Jesús del Valle, es que se me caen los palos del sombrajo. Es del vulgo bien sabido, que un registrador de la propiedad, mientras se rasca las pelotas, gana un dineral. Pues mucho más grave es lo de, un político elegido por el pueblo, ahí si que no hay salvación.

martes, 3 de septiembre de 2019

NATALICIO Y ATENOR

NATALICIO Y ATENOR

Tito Ortiz.-

Lo que yo me ahorro en psicólogos, eso no lo sabe usted muy bien. Calculo que una verdadera fortuna, con la que podré reforzar la pensión, que al paso que va la caja común de todas las Españas, no vamos a tener ni para pipas. Esto viene a cuento de que no sé si se han dado cuenta, pero septiembre se nos ha echado encima. Así, como lo oyen, que hace horas este país estaba de vacaciones en Benidorm, junto con otras naciones, y que en menos que tarda en persignarse un cura loco, estamos en el mes noveno del calendario, con la vuelta al trabajo, el regreso al cole, los políticos insultándose para justificar la nómina, y los problemas de los ciudadanos cronificándose en fase aguda, a pique de que nos de algo. Que de seguir así. Nos va a dar. De eso que a nadie le quepa la menor duda. La situación es tan triste y desesperada, que el personal ha decidido bajar la guardia, resignarse y esperar lo que tenga que pasar, porque de lo contrario, si de verdad eres consciente de lo que están haciendo estos maleantes, te echas a la calle con una servilleta a cuadros atada con cuatro nudos a la cabeza, y el cuchillo del pan, que tiene dientes de sierra y hace más daño, y no dejas títere con cabeza.

Que nadie en el viejo continente haya sido capaz de parar, al inglesito ese que parece el doble de  Donald Trump, que se está pasando por el forro de las entretelas a toda la Unión Europea, poniendo en peligro el mayor proyecto internacional desde la segunda guerra mundial, es una tragedia para la que no estamos preparados. Que Pablo Iglesias, Casado y Rivera -que dicho así parecen un trío cómico de los setenta- lleven a esta nación a unas nuevas elecciones, es para llorar en el Partenón, hasta que se inunde. Que la triste estadística de las mujeres asesinadas no pare de crecer, no hace más que dejar a las claras, el gran fracaso de esta sociedad tan moderna, que tiene como asignatura pendiente, algo que viene ocurriendo desde que vivíamos en las cuevas de Cromañón, y que un partido de extrema idiotez y mala leche, tilda eufemísticamente de, simple violencia doméstica. Se necesita tener estómago para eso. El mismo para comprobar, que no se ha iniciado – prácticamente- la legislatura en el convento de la Plaza del Carmen, y ya hay quién reclama la alcaldía para dentro de dos años. Pero, ¿Estaremos vivos entonces? A qué viene tanto revuelo por un supuesto pacto entre caballeros, cuando una de las partes sostiene que no solo, ni hablaron de ello, sino que ni siquiera se apretaron las manos, después de haberse escupido en las palmas, que es como se sella un pacto entre caballeros en el Albayzín, de toda la vida… Vamos hombre. Se necesita ser un niño mal criado, para reclamar eso a estas alturas, cuando nada sabemos de un presupuesto que dé continuidad a este acuerdo a tres bandas que, ha dejado al partido más votado en Reyes Católicos, esperando el semáforo para echar la primitiva donde siempre. Es por ello y por lo que está por venir, que desde el pasado domingo, barruntándome yo como se iniciaba septiembre, a traición y con el enemigo en casa, planté el tocadiscos en la mesa de camilla, y desde entonces no paro de escuchar a “Los Indios Tabajaras”, aquellos dos sabios brasileños, que son los únicos que sin tener que darle patadas a un balón, han hecho de la vida un paraíso. Gracias a los hermanos Natalicio y Atenor, he tirado los ansiolíticos por la ventana. Y ahora que venga Paco Cuenca y me lo cuente.