DANDO UN PORTAZO

DANDO UN PORTAZO Tito Ortiz.- De éste país hay que irse cuanto antes, y además, dando un portazo, para que la partida de políticos incompetentes que nos desgobiernan, al menos se queden sordos por el ruido. Los aciagos acontecimientos se suceden con tal prontitud, y tal magnitud, que la desesperanza llega a todo el electorado, sea del signo y color que sea, porque ningún votante está contento con los suyos. En esa farsa de moción de censura, vimos al de la coleta – no lo llamo Pablo Iglesias, porque ese nombre me merece un respeto histórico – más sobreactuado, que Jordi Hurtado, presentando “Saber y Ganar”. Estos líderes asamblearios, curtidos como delegados de clase o de curso durante sus estudios, se creen que la política es eso, y cuando los suyos los aplauden, llegan al orgasmo político creyendo que están haciendo historia. Acéfalos en ideología política, se escoran a la izquierda, tanto, que se convierten en dictadorzuelos de poca monta, culpando a los periodistas de sus desatinos. Para ejemplos un par de ellos palmarios: Donald Trump, o los chicos y chicas de Podemos. Espero que no nos culpen a los periodistas también, de haber advertido cierto acercamiento entre el coletas y los nuevos socialistas, esos que hace cuarenta y ocho horas, han vuelto a cerrar un congreso en falso, como viene siendo su costumbre, y que se equivocarán mucho, si le siguen el juego a los líderes formadores de Maduro, que ya preparan una segunda moción de censura a la que esperan acudir en compañía de Pedro Sánchez. Craso error socialista, que lo que necesitan es aprovechar éstos meses hasta la próximas elecciones para rearmar su partido y recuperar los votos que se le han ido a las filas de los errejones y monederos, que gracias a su orgullo y prepotencia, dilapidan buenas ideas e iniciativas, en pro de la foto y la propaganda. Matan por una portada, aunque con ese mismo gesto, estén aniquilando una buena gestión social. Son como las chicas de La Cruz Roja, dan en el clavo al ponerte la banderita, pero te lo hacen cantando, y eso ya, ni Toni Leblanc, lo aguanta. La política es algo más serio de lo que Podemos nos vende, y la situación de España tan lamentable, que cualquier cura que venga de ellos, no pasará de ser una simple tirita, en el cuerpo de un atropellado por el metro. Huy, perdón, que nosotros no tenemos metro. Vuelvo al asunto. Cualquier futuro para éste país pasa por agotar la legislatura, si es que los socialistas quieren llegar con alguna opción a las próximas generales. Todo maridaje con los del coleta, será la muerte de los del puño y la rosa, que deben poner sus cinco sentidos en recuperar a los votantes que se han ido con los que vinieron de la Puerta del Sol. De lo contrario, les dedicaré un gran portazo, más grande aún que el dedicado a Donald Trump, por dejarnos ver a las claras, su alto sentido de la honestidad, la honradez y la ética. El pasado Viernes, en éste mismo periódico, tuvieron ustedes la oportunidad de leer una noticia, que da una visión clara de la catadura moral de éste individuo: Él impresentable del flequillo amarillo, que empuja a los presidentes de gobierno para salir en las fotos mejor que ellos, ha vendido a Catar, treinta y seis aviones de guerra por valor de casi once millones de dólares, olvidando que los ha bloqueado y a la vez, acusado de financiar al terrorismo islámico. ¿Se puede tener menos vergüenza?