domingo, 18 de diciembre de 2022

MANTECADOS Y POLVORONES

 MANTECADOS Y POLVORONES


Tito Ortiz.-


Escribir a estas alturas de la navidad, parece incluso un poco trasnochado, si tenemos en cuenta que, en Vigo encendieron las luces con la festividad de los santos y fieles difuntos, y que en los comercios, los adornos y figuras se pusieron en los escaparates casi con la vuelta al cole. De seguir así, pronto comeremos mantecados y polvorones de vacaciones en la playa. Lo estamos adelantando todo, de tal manera, que los mensajes nos llevan al gasto anticipado, y por lo tanto, duplicado o triplicado.

En mis tiempos no se hablaba de navidad, hasta el ocho de diciembre, día  de La Inmaculada, fecha en la que empezábamos a poner el belén en casa. Bajábamos del Albayzín a Granada, buscando los elementos necesarios para montar el portalico. Mis hermanos y yo nos afanamos en ir haciendo figuras de barro, cogido de la margen izquierda del Dauro. Con nuestras torpes manos dábamos forma a la masa, que dependiendo de la zona del río donde la hubiéramos cogido, tenía un color de barro rojizo amarronado, o también podía salirte de un gris marengo casi negro. No teníamos horno, así que con aquel Sol de Otoño que apenas calentaba, sobre un papel de periódico, las dejábamos secar en la ventana, a la espera de que una vez duras, se dejaran pintar convenientemente. Luego vendrían los colores a la acuarela, los remates, y una vez listas, comprobar con tristeza en el escaparate de Mariscal, que sus figuras no tenían nada que ver con las nuestras, porque las suyas sí que eran figuras de barro en condiciones, para un belén o para lo que fuera. Porque sus bandoleros, gitanas, caballos y jacas eran de un postín de señorío nato. Yo me quedaba embelesado en el escaparate, espachurrando la cara contra el cristal, pensando cuando mis figuras se parecerían a las suyas, y cuando mis casas hechas con planchas de corcho, y pintadas con lo primero que había por casa, se parecerían a las que tenía ante mis ojos. 

A COSTE CERO

Si en casa a duras penas había dinero para comer, si queríamos montar un belén, la premisa de mis padres es que fuera a coste cero,  y eso pasaba porque todo fuera realizado a lo Juan Palomo. La máquina de coser Alfa, a la que se le escondía el cabezal basculante, quedaba convertida desde el ocho de Diciembre al siete de enero, en la mesa repisa necesaria para exponer el misterio. Listas las figuras de barro, algunas con caras, gestos y posturas, más propias de la casa del terror, resuelto el portal, el molino y el castillo de Herodes, más el pozo, con el corcho ya referenciado, había que poner el musgo como base, asunto éste que requería de toda una tarde, en la que en compañía de otros, nos atrevíamos a bajar por el callejón de Santa Ana, a la margen izquierda del Dauro y arrancar de los filos y pegados a las piedras los trozos necesario del musgo que, cuidadosamente transportábamos en un cubo de zinc, hasta colocarlos estratégicamente en el portalico. Para realizar las distintas alturas, veredas y caminos, además de las cuevas, nos íbamos a la estación del ferrocarril, y allí cogíamos de la escombrera, los restos del carbón calcinado, que, junto con la carbonilla, daban un aspecto de realismo al belén, difícil de conseguir en aquellos entonces, de manera gratis. 

Puesto que el nacimiento se ponía en el rincón del comedor donde estorbara menos durante tantos días, para dar el efecto de la noche, comprábamos en Costales, metro y medio de papel de embalar, de color azul azafata, que pegábamos a la pared con una masilla de harina, y sobre el que yo dibujaba con una tiza y poco acierto, la estrella de oriente que guiaba a los reyes, una media luna y un puñado de estrellas menores repartidas por aquella pared empapelada de noche oscura. Con los años fui perfeccionando la técnica, y las estrellas ya las recortaba de papel de aluminio y las pegaba en el papel con Pegamento y Medio. Como no podía comprar el artilugio bomba que me permitiera dotar de agua natural el río, me acercaba hasta Cristamol, en la calle Álvaro de Bazán, y les pedía unos restos de los cristales que iban a tirar, que, colocados con cierto gracejo en el cauce del belén, daban por sus reflejos el aspecto de agua.

BELÉN VIVIENTE

Como no había dinero para comprar luces, yo le pedía al padre Marcelino de los hospitalicos tres cabos de vela, que, colocados a la distancia precisa sobre las figuras y las casas, al apagar la luz del comedor, daban cierta imagen de nocturnidad, durante unos instantes, aunque visto ahora desde la distancia, lo que de verdad daba la impresión era de una escena espeluznante de película de terror, por la fealdad de las figuras y todo lo allí expuesto. Mi belén era tan horroroso, que ganaba mucho con las luces del comedor encendidas, o al menos, daba menos miedo. Si apagabas la luz de la casa y encendías las tres velas, seamos sinceros… era de infarto.

Por aquellos días, ya las calles de Granada se hacían eco del sonido de unos villancicos y de los balidos de ovejas adiestradas para callejear sin miedo a perderlas. Los Hermanos Obreros de María, salían cada tarde de su internado en la calle San Juan de Los Reyes, revestidos los niños de pastorcillos, con zambombas, panderetas y carrañacas, envueltos por un rebaño de ovejas, anunciando con su cantar, la representación del belén viviente más famoso de la comarca: El que ellos representaban en su internado.

domingo, 11 de diciembre de 2022

EL MUNDO AL REVÉS

 EL MUNDO AL REVÉS


Tito Ortiz.-


El asunto es preocupante. Estamos adoptando una serie de actitudes, que nunca hasta ahora se habían evidenciado como opciones de vida y aptitudes relevantes, hasta el punto de hacer necesaria una reflexión, no vayamos a que los árboles nos impidan ver el bosque, y sin quererlo conscientemente, estemos llevando a cabo una regresión hacia unos comportamientos que, con el tiempo nos pueden pasar factura. Sería muy conveniente poner pie en pared, y detenernos  aunque solo sea un poco, para ver a donde vamos con esta manera de vivir.

La estadística es palmaria: En los hogares españoles, ya hay más perros como mascotas, que niños viviendo en el hogar, y eso me parece grave. Que parejas, o familias monoparentales, estén optando por tener un perro, antes que un hijo, me sorprende y preocupa. Nací en el seno de un matrimonio con cinco hermanos, y teníamos perro. El “Kimba” era uno más en nuestro hogar. Un chucho recogido de la calle recién nacido, de raza indefinible, cariñoso como el solo, y que aparece en las fotos de todos nuestros acontecimientos. Él era uno, y nosotros cinco. Hasta ahí todo normal. Pero un reciente estudio publicado, ya dice lo que anuncié al principio. Que la gente está sustituyendo a los hijos por mascotas, y que estas ya suponen un censo mayor, que el de los nacimientos o adopciones. El tema se las trae, si tenemos en cuenta que nuestro país, hace ya tiempo que encendió todas las alarmas, ante la evidencia de un censo de población cada vez mayor, coincidente con una bajada preocupante en la natalidad, y son muchos los que auguran para los próximos años, una catástrofe social, que pone en riesgo –incluso- el futuro de las pensiones y el progreso de la nación.

Tener un perro en casa no es barato. Su mantenimiento en comida y cuidados sanitarios, significa un pellizco importante en la economía familiar. Claro que tiene otras ventajas. Cariño desinteresado, no tener que estar pendiente de su educación, estudios, riesgos sociales y futuro incierto. Por eso es tan desequilibrante, ver largas colas en las clínicas veterinarias, mientras que en las consultas de pediatría, el número de usuarios es cada vez más escaso. Cada curso escolar, se quedan más vacantes en las aulas, por falta de niños. Sin embargo, las calles, plazas y parques, están llenos de mascotas que salen a pasear con sus dueños, algunos tan incívicos, que ni recogen sus defecaciones. Mientras los parques infantiles están cada vez más vacíos, los municipios ponen a disposición de las mascotas, zonas donde jugar y hacer sus necesidades. Las grandes superficies tienen secciones enormes, con toda clase de juguetes, colchones, y alimentación clasificada por tamaños del perro, su raza, y life para los que tienen sobrepeso. Y su medicación no es nada barata, si la comparamos con la de humanos. Unas pastillas para la artrosis del chucho superan los cincuenta euros, lo sabe bien mi bolsillo, y no llegan a tirar todo el mes, pero por lo visto hay quien prefiere esto, y no cargar con la responsabilidad de un ser humano. Yo creo que esto deberíamos hacérnoslo mirar.

…Y ESCRIBIR UN LIBRO

Por lo visto, atrás quedaron los tiempos en que se decía aquello famoso de que, toda criatura debía tener un hijo, plantar un árbol y escribir un libro, y esto parece que también se nos ha ido de las manos. No conozco otra época de la historia en la que, contra todo pronóstico, se publiquen más libros que ahora, paradójicamente coincidiendo con que cada vez leemos menos. Dice mi compadre y sentencia que, dios nos libre de un desocupado con ganas de escribir.

Últimamente, el personal no tiene el menor recato en financiarse sus propios libros, cuando les son rechazados por las editoriales, con tal de tener el volumen en sus manos, y hacerles el compromiso a los amigos para que se lo compren. Parece ser que cada español llevamos dentro, un escritor con ansia de publicar, aunque las ediciones queden enteras en los estantes, pero escrito está. Y además los hay reincidentes, porque no le falta razón al subdirector de Ideal, Quico Chirino, cuando afirma que ya hay quién, ha escrito más libros de los que se ha leído, y eso sí que es un problema  teniendo en cuenta que la pasión de escribir, nace de una abultada lectura que es la que nos forma para después empuñar la pluma. El tema es tan atractivo, que ya hay personajes acreditados de su modus vivendi, echándose cada mañana a la calle con varios ejemplares bajo el brazo, a ver a quien le pueden endosar uno, aunque sea a cómodos plazos. Es tal la profusión de libros en el mercado, que lógicamente el interés de lo editado va en detrimento del contenido. A mayor cantidad, menor calidad, incluso en aquellos profesionales de aparente solvencia, que ante el éxito de una primera edición, no se recata en copiarse a sí mismo, con tal de poner otro volumen en circulación, cuyo interés no ha sido demandado por sus lectores. De hecho, la historia de la literatura está plagada de grandes fracasos al segundo intento, llevados por el entusiasmo de la primera, y la nómina de autores con un solo libro en la calle, trasciende todo lo previsible en materia de interés y calidad para el lector. En mi humilde opinión, deberíamos ser más respetuosos con el papel, porque nos estamos quedando sin árboles.

domingo, 4 de diciembre de 2022

LA PATRONA, MANDA CALLAR

 LA PATRONA, MANDA CALLAR


Tito Ortiz.-


No quisiera yo ser agorero, ni tampoco iniciar aquí una polémica, necesitada de un mayor y exhaustivo estudio antropológico, pero haberlas áhilas, por eso no me resisto a hacer caer mi atención sobre ciertos acontecimientos, que me parecen demasiadas casualidades. Vaya por delante que, todos reconocemos a santa Cecilia como,  una noble romana nacida en Sicilia, que tras convertirse al cristianismo, esta joven fue martirizada entre el año 180 y 230, y que en España es considerada la patrona de los poetas, la música y de los ciegos. Hasta ahí todo está bien, y en honor a la santa, le solemos poner su nombre a conservatorios, auditorios, lugares relacionados con la música y sus enseñanzas, y aprovechamos el 22 de cada mes de noviembre, para llevar a cabo toda clase de actos conmemorativos en su honor, en especial conciertos, como al que tuve el honor de asistir hace unos días, en la plaza de la Constitución de Armilla, donde la Asociación Musical San Isidro de la localidad fronteriza con la capital, dedicó un magno concierto a la música de cine, en el que la interpretación estuvo a gran altura, bajo la dirección  de su director, José Melchor Perelló. Centenares de personas abarrotaron la plaza, escuchando a ésta formación musical ya muy acreditada a lo largo de los años, que además contó con la colaboración de la Coral Polifónica de Armilla.

El caso fue que antes de comenzar, el concierto fue dedicado a uno de sus miembros, el trompeta Pedro Cano, fallecido horas antes a la temprana edad de 52 años. Sé que no existe una edad para morir, y que eso puede suceder a partir de que naces, pero con lo prolongada que está ahora la edad media de los vivos, medio centenar de años se me hacen pocos para despedirse de este mundo. Eso por un lado. Por el otro, es que me parece un sarcasmo de la vida, que un músico muera el día de su Patrona. No sé si es una crueldad, o que Santa Cecilia de Roma, acoge a los suyos el día de su onomástica, para abrigarlos con el manto de su consuelo eterno.

PRECEDENTES

Cierto es que no es la primera vez que ocurre, porque ya de muy antiguo, eso de ser músico y morir el día de La patrona, no es nuevo. Así le ocurrió –por ejemplo-  en el año 1900 al compositor británico, Arthur Seymour Sullivan, que el día de santa Cecilia llevó a los suyos de entierro. Y justo al año siguiente, fue Genaro Codina, músico mexicano, creador de la Marcha de Zacatecas, quién se despidió de este mundo, empezando con ellos una efeméride en la que ser músico y palmar el día de la Patrona ya no es una rareza, y no digo esto para que, en llegando el 22 de noviembre, los músicos tengan que estar con la mosca detrás de la oreja, pero la historia está ahí y está escrita en lápidas de cementerios muy acreditados. A principios del siglo pasado nos dice adiós, el músico francés, Claude Taffanel, y en 1982 lo hace, Max Deutsch, compositor austriaco-francés, y conste que esto es un estudio somero de urgencia. El músico australiano,  Michael Hutchence, se despidió de nosotros el 22 de noviembre de 1997, como también lo hizo, Paul Motian, músico estadounidense de jazz en 2011. No quiero alargar la lista porque, el más reciente me llega al alma.

PABLO MILANÉS

El desgarro de la despedida es más grande, cuando el que muere es uno de tus referentes, y este es mi caso. El pasado día de santa Cecilia,  Mauricio Vicent, dijo desde la Habana que, La belleza de su voz privilegiada y su don para la interpretación, que le permitía llegar a registros donde la mayoría no alcanzaba, unida a su forma poética de decir, de aparente sencillez, pero cargada de una profunda sensibilidad que tocaba el alma con independencia del motivo que lo inspirase, marcaron a generaciones de cubanos y latinoamericanos. Su música tuvo también fuerte arraigo en España, donde era bien conocido, y hasta en el pueblo más recóndito donde se presentara, jóvenes, medios tiempos y mayores se sabían sus letras. Joan Manuel Serrat, Joaquín Sabina, Luis Eduardo Aute, Ana Belén o Víctor Manuel son algunos de los artistas españoles que grabaron sus canciones y colaboraron con él. En su continente, figuras como Chico Buarque, Gal Costa, Armando Manzanero, Mercedes Sosa, Fito Páez, o salseros como Andy Montañez o Gilberto Santa Rosa, entre muchos otros, estaban entre sus devotos e hicieron lo propio. Comienzo y final de una verde mañana, Años, Ya ves, Yo no te pido, Hoy la vi o Para vivir son parte de esa obra de Milanés que trascendió  edades y fronteras y se convirtió en identidad de la mejor música hispanoamericana. También causaron impacto en su momento canciones políticas como, Yo pisaré las calles nuevamente, La vida no vale nada, o Yo me quedo, de las que nunca se desmarcó, aunque sí lo hizo de los dogmas y la deriva de la Revolución cubana, a la que hace tiempo no consideraba revolucionaria. 

No es la primera vez que escribo que, gente como esta no debería morir nunca, o al menos, tener el detalle y la cortesía de hacerlo después que yo. Sé que esto es de un egoísmo inmenso, a nadie le gusta sentir el desgarro en el alma de ver morir a tus referentes y, yo ya llevo muchos, demasiados, aunque sigo aquí con la esperanza de volver a pisar las calles, en compañía de todos ellos.

domingo, 27 de noviembre de 2022

LO QUE SE DICE VENIR… VIENEN

 LO QUE SE DICE VENIR… VIENEN


Tito Ortiz.-


Agoniza –por fin- este mes de los muertos y el asunto no pinta bien, porque se han vuelto a repetir las desgracias que vienen acaeciendo con motivo de la celebración de los que ya se fueron. Empeñados cada año en darle una vuelta de tuerca a las celebraciones de Halloween, los muertos se cuentan por decenas en todo el mundo, de gentes que disfrazadas salen a una supuesta fiesta, cuando en realidad van al encuentro con la muerte. Es como una antología del disparate: Vayamos a divertirnos, que terminaremos en una fría mesa del Instituto de Medicina Legal correspondiente. Y no solo no escarmentamos, sino que las cifras van subiendo cada año. Muertes inesperadas, cuando la idea era pasarlo bien con los amigos, de ahí que se cumpla la premisa de quienes creen que los muertos vienen a este mundo otra vez y se manifiestan. Unos porque no se han dado cuenta de que han fallecido, ante el shock que ha supuesto su muerte inesperada, otros porque les quedaron cosas por hacer en el mundo de los vivos, y algunos, los más traviesos, para molestar a los vivos apareciéndose o moviendo cosas, incluso hablando en psicofonías.

En el año 2014 de nuestra era, el compañero y maestro, Juan José Benítez, publicó un libro titulado: “Estoy Bien”, en el que recoge con naturalidad para unos y, estupor para otros, ciento sesenta casos documentados en los que personas fallecidas, han vuelto a éste mundo para comunicarse y hacer el bien a los vivos. Recuerdo uno de esos casos en los que, en el campo de batalla, un soldado guio a sus compañeros en retirada por un terreno minado, salvándoles a todos la vida. Cuando éstos llegaron sanos y salvos al acuartelamiento, les dieron la noticia de que quién los había puesto a salvo, llevaba muerto una semana tras un bombardeo enemigo. Hablo de memoria pero la historia es cierta y está documentada como el resto de las 159, que componen el volumen y se ha convertido en pieza de coleccionistas.

VIENEN A CUALQUIER HORA Y LUGAR

La literatura tiene mucha culpa de que la aparición de muertos se vea rodeada, de circunstancias que tienden a meter miedo, a sugestionar, o amedrentar a quienes presencian un fenómeno de este tipo. Parece obligado que un fallecido se tiene que aparecer de madrugada, en una habitación oscura, tan solo iluminada por los relámpagos de una tormenta, y una música tenebrosa de fondo. Mi experiencia me dice todo lo contrario.

Yo estaba una tarde de verano en la plaza de Las Pasiegas, disfrutando con mi mujer de un concierto de la Banda Municipal de Granada, bajo la dirección de Miguel Sánchez Ruzafa. En un momento de la interpretación, mi mujer me tocó en el brazo y me dijo, ahí está tu padre. Y allí estaba mi progenitor, atendiendo a los músicos y lo que tocaban, a una distancia de unos cinco metros de nosotros, con su ropa habitual, sus zapatos característicos y sus no menos personales gafas de sol. Me acerqué a él, pero en ese momento se me cruzaron unas personas por delante, y cuando llegué al sitio, mi padre ya no estaba. Hasta aquí todo normal, sino fuera porque  había fallecido un año antes. Esto no me lo ha contado nadie, ni lo he leído en ningún sitio, lo he vivido yo, junto a mi mujer.

LA TITA ÁGUEDA

Era un personaje muy querido en toda la familia, porque por su profesión de matrona, nos había traído al mundo a casi todos. La tita Águeda era en realidad hermana de mi abuela Juana, había desarrollado toda su vida profesional en el hospital Ruiz de Alda, y las vida no la había tratado bien porque, en la guerra incivil, le mataron a su único hijo varón. Un alférez de aviación que al ir a revisar las trincheras, un franco tirador le metió una bala por detrás de la oreja que le salió por un ojo, y regresó a casa en un féretro de zinc. Para colmo, su marido falleció poco después de manera repentina, así que sola en el mundo con su hija María del Carmen, la tita Águeda nos tenía a todos como su familia más cercana, y todos la queríamos.

Una mañana me acerqué al hospital donde convalecía mi abuela de unas hemorragias intestinales, y la vi extrañamente espabilada, para su debilidad patente. Los médicos dicen que es la mejoría de la muerte, y es cierto porque esa misma tarde, falleció. Estuve hablando con ella, nos reímos un rato y le pregunté porque estaba tan contenta, y me contestó: Es que toda la noche ha estado sentada en esa silla a los pies de la cama, mi hermana Águeda. La visita de una hermana a otra que está enferma es algo natural, pero en esta ocasión no lo era, ya que la tita Águeda, había fallecido cuatro años antes.

No quiere el cronista cansarles con asuntos de familia, pero no me resisto a contarles, que el día que mi madre se estaba probando el vestido de novia en el dormitorio familiar de nuestra casa albayzinera, en uno de los momentos que la modista le dijo: ¡Girate! Que quiero ver cómo queda la cintura por detrás. En ese momento miró al fondo del pasillo, y allí estaba su padre, sonriente como no podía ser de otra manera, al ver que su hija ya se casaba con tan solo 18 años. Todo hubiera sido normal, si su padre, mi abuelo Rafael Rubio Carmelino, no hubiera fallecido cuando ella tenía tan solo, ocho años. En fin, que venir vienen.

domingo, 20 de noviembre de 2022

MENUDO DÍA

 MENUDO DÍA


Tito Ortiz.-


Hoy 20 de noviembre, la historia nos recuerda que tenemos muchas asignaturas pendientes y que, a pesar de los siglos transcurridos, a veces la repetimos  sin haber aprendido nada de ella. Tal día como hoy del año 1500, dicen que llegaron a Cádiz, Cristóbal Colón y sus hermanos, encadenados, en calidad de detenidos se diría hoy, por orden del Gobernador de las Indias, Francisco de Bobadilla. Que tendría que ver el gobernador en la conducta del laureado descubridor y sus parientes, para mandarlos a casa de ésta guisa. Luego vemos por ahí las estatuas y los honores, pero si rascamos un poco, aparecen junto a las luces unas sombras como nubarrones, impropias en la conducta de quienes protagonizaron hazañas históricas, y se te caen los mitos como las hojas en otoño. Aunque todo no es negativo. También un día como hoy, pero de 1929, mientras el crack de la bolsa en Estados Unidos llevaba la gente al suicidio, nuestro genio Salvador Dalí exponía por primera vez en París, que en aquellos años, sí que era poner una pica en Flandes. Por eso digo y mantengo que, el veinte de noviembre para nosotros, suele ser un día de contrastes, pero muy contrastados.

¿COINCIDENCIA?

Basta con hacer caer la atención en que José Antonio Primo de Rivera, fue fusilado en la cárcel de Alicante en 1936, y que una pirueta macabra, o tal vez intencionada, fijó para la historia, que este mismo día pero de 1975 expirará el general Franco. Hay a quienes esta extraña coincidencia nos chirría, pero doctores tiene la iglesia. Y hablando de estas dos muertes, recordar que más de un estudioso de la historia, ha dejado escrito, que Franco pudo evitar la muerte de José Antonio, pero que no movió ni un dedo, porque eso le permitió hacerse con las riendas de la Falange “joseantoniana”, volviéndola como un calcetín a su imagen, semejanza y conveniencia. Los que hemos estudiado el caso sabemos, que entre los principios fundamentales de la Falange, José Antonio hacía una defensa a ultranza de la clase trabajadora en la agricultura, por ejemplo, con un decálogo irrenunciable en el que se incluían frases como: “La riqueza tiene como primer destino, mejorar las condiciones de vida de cuantos integran el pueblo. No es tolerable que masas enormes vivan miserablemente, mientras unos cuantos disfrutan de todos los lujos”.

O como ésta otra: ”Todos los españoles tienen derecho al trabajo. Las entidades públicas sostendrán a quienes se hallen en paro”.

Con principios fundamentales como estos en su decálogo, se comprende que Franco no moviera ni una pestaña para salvar a José Antonio, y se advierte como fueron desapareciendo del ideario falangista, en cuanto el general se hizo cargo del partido fundado por el que comenzó siendo su colaborador más fiel. La falange de José Antonio Primo de Rivera era una cosa, y la que Franco mostró al mundo, poco tenía que ver con la anterior. El general supo tapar bocas discordantes afines al fundador, a base de cargos y prebendas en sus gobiernos, y todos tan contentos. También éste día pero de 1982, se disolvió un partido que quiso alcanzar éste espectro político, llamado “Fuerza Nueva”, liderado por el notario, Blas Piñar, erosionado en sus ambiciones por un Manuel Fraga en Alianza Popular, que supo refrescar la imagen de la derecha recalcitrante, y también por la impotencia de ver como el partido socialista había alcanzado la mayoría absoluta, que en número de escaños conseguidos, todavía no ha sido superada.

DERECHOS DEL NIÑO

En 1989, La Asamblea General de Naciones Unidas aprueba la Convención sobre los Derechos del Niño. Haciendo un poco de historia debemos decir que todo empieza  porque las normas de protección de la infancia no existían a comienzos del siglo pasado. La Asamblea General de Naciones Unidas aprueba en 1959 la Declaración de los Derechos del Niño, que es la primera que reconoce el derecho de los niños a la educación, al juego, a la atención de la salud y a tener un entorno que los proteja.


Conmemorando los 20 años de la Declaración, en 1979 se declara el Año Internacional del Niño. Y no es hasta 1989, cuando la Asamblea aprueba la Convención sobre los Derechos del Niño, reconociendo el protagonismo de los niños como sujetos de derechos. Este documento establece unas normas esenciales para garantizar la protección de los derechos de los niños y niñas, que algunos padres se pasan por el forro de sus entretelas, protagonizando en las páginas de sucesos, noticias escalofriantes, que los seres humanos en su mayoría se niegan a admitir. Ese invento que ahora se ha dado en llamar, violencia vicaria, y que no es otra cosa que, hacer sufrir hasta la crueldad más infinita a tu pareja, asesinando lo que más quiere, sus hijos. La maldad en el ser humano, no distingue entre sexos, el sabor de la venganza infinita con tal de causar sufrimiento a la pareja, se antepone a la inocencia y el cariño de unos hijos que no tienen culpa de haber venido al mundo, en casa de un ser humano, que llega a comportarse mucho peor que una alimaña. Porque por mucho que busque en la naturaleza más salvaje, no he encontrado a un animal, que sea capaz de matar a sus crías, con tal de producir sufrimiento a su pareja, esa circunstancia es exclusiva del ser humano, que en llegando a ese límite, debería perder la condición como tal. Estos asesinatos execrables, y la aparición de un recién nacido muerto en un contenedor – otra moda de este mundo apasionante- me hacen dudar de donde termina el hombre y comienza el depredador. En mis tiempos se tenía la decencia de abandonarlos a las puertas de un convento.

domingo, 13 de noviembre de 2022

QUE LO SEPAN

 QUE LO SEPAN


Tito Ortiz.-


Agoniza –por fin- este 2022, y debe dejar el cronista constancia escrita para las generaciones venideras, de todo aquello que nos ocurre, para general conocimiento de los que nos estudien cuando ya no estemos. Sepan aquellos que no estén para entonces al corriente, que este año sin gracia, ha borrado de los titulares en primera y los informativos de radio y televisión, las cifras de una pandemia que no se ha ido, y que por el contrario, sigue mandando a los hospitales y cementerios a diario, a quienes la padecen. Cierto es que las cifras han bajado, pero el bicho muta y persiste en su actitud, sin dejar aflorar las enormes cifras de secuelas en aquellos que ya han padecido la enfermedad, y que desapareciendo de las estadísticas, no han logrado recuperarse del todo. Pero están ahí.

Lo mismo que está este verano prolongado y seco, que empezó en el mes de mayo con temperaturas de 42 grados, y que se resiste a marchar, con sequía y temperaturas impropias de un otoño que nos aboca a un invierno raro, pero Donald Tramp y otros, mantienen que aquí no pasa nada, y que lo del cambio climático es una profecía sin fundamento. Como el hecho de que los coches ahora no lleven rueda de repuesto, sustituida por un kit repara pinchazos que nadie sabe utilizar, y que te obliga en caso de pérdida de aire en una rueda, a llamar a la grúa. Bueno está que, ya no llevemos el famoso correíllo para el ventilador, ni la caja de bombillas de repuesto, ni las fotos de los niños en el salpicadero, ni el perro que mueve el cuello en el cristal trasero, ni el cojín de ganchillo multicolor, ni la identificación del coche colgada del retrovisor, pero lo de la rueda de repuesto, es algo para hacérselo mirar.


EL COSTE DE LA VIDA


Debe el cronista dejar constancia de que, desgraciadamente, ya hemos alcanzado el indeseable privilegio de, contar en la sociedad con pobres excluidos del sistema, que paradójicamente, tienen trabajo fijo, pero que no llegan a final de mes, ni encomendándose a los dioses. Los recibos de luz y gas, impiden poner la calefacción y el aire acondicionado a quienes cuentan con su instalación. Llenar el depósito de carburante, precisa de un crédito personal, y ya que hablamos de bancos y cajas, en plena crisis como estamos, no dejan de repartir dividendos entre los suyos, mientras las hipotecas se ponen al alcance de muy pocos. No han devuelto el dinero que pusimos todos los españoles para su rescate, pero si nos sisan de nuestros ahorros, comisiones por mantenimiento, por el gasto de tarjetas y por los motivos más injustificados, advirtiéndonos, como en el caso de Unicaja, que en breve, la comisión de mantenimiento pasará de 120 euros, a 240. Todo un alarde de “solidaridad”, con los que peor lo están pasando en estos momentos. Esa es la sensibilidad de bancos y cajas, cuando el IPC está disparado, el gasto público desorbitado, y la cesta de la compra con productos básicos, ha triplicado su importe, a las puertas de una navidad en la que los bancos de alimentos y los comedores sociales, no dan abasto, y la gente que duerme en la calle va en aumento.


SERVICIOS BÁSICOS


Jamás en la historia de éste país, hemos tenido a la clase médica tan quemada y desprotegida. Sometida a un estrés y un ritmo de vida, impropios de quienes deben curarnos. Llamas para pedir cita con tu médico de familia y, aunque en ruedas de prensa los responsable políticos te venden la moto de que te ve en dos días, la realidad es que el plazo supera los veinte, o los diez, si es por teléfono, una moda que ha impuesto la pandemia, y que por lo visto ha venido para quedarse. Lo de auscultar por teléfono, me parece un eufemismo trágico, que no deberíamos consentir. Lo mismo que la educación pública está dejada de la mano de sus responsables, con colegios públicos que se caen a pedazos, y ratios superados, mientras que la enseñanza concertada, goza de estupendas instalaciones, a costa de sufragarla en gran medida con el dinero de todos. Algo incomprensible, que debería correr a cargo de quienes eligen esta otra opción, pero corriendo con el gasto íntegro, y no utilizando dinero público. Los desajustes sociales son cada vez mayores, y siempre recaen sobre los más débiles y desprotegidos. Avanza el tercer milenio y los asentamientos chabolistas lejos de desaparecer, van en aumento. La vivienda pública es un sueño muy insuficiente. La gente rebusca en la basura, mientras la sociedad mira hacia otro lado, y otra parte recicla para ser más modernos y ecologistas. Estamos sumergidos en un mundo de contrastes, con unas desigualdades que cada vez son mayores, en detrimento siempre de los más desfavorecidos. Una llamada diaria a los servicios de Cáritas, nos da una bofetada de realidad, de esas que te hacen tambalear en los cimientos de tus convicciones, y preguntarte, a que estamos jugando. Por eso debe el cronista dejar aquí escrito y para siempre, que la realidad de este 2022, no es la que nos están vendiendo, que la gente lo está pasando cada vez peor, hasta el punto de no valorar la amenaza constante de un Putin enloquecido que está masacrando Ucrania, ante la mirada analista y diplomática del resto del mundo “civilizado”, incapaz de poner coto a éste loco que, en cualquier momento, puede apretar el botón y mandarnos a todos a las partículas del éter. Por eso, aquellos que nos estudien dentro de unos años, deben saber esto, y como nos sentimos.

domingo, 6 de noviembre de 2022

GRANADA EN SEPIA

 GRANADA EN SEPIA


Tito Ortiz.-


No sé los meses que llevo sin ver el color azul del cielo de Granada. Si algo ha distinguido históricamente a nuestra ciudad, ha sido el color azul de su cielo, que sin ser un  celeste al uso, o azul intenso, ha proporcionado a nuestro firmamento, una personalidad propia, difícil de captar por pintores muy versados en la materia. Un día, mientras Marino Antequera pintaba del natural en los jardines del Generalife, viendo que una y otra vez pasaba el pincel por el cielo de su cuadro, y disconforme con el resultado, no dejaba de mezclar una y otra vez en la paleta, con matices cromáticos imperceptibles para mí, le pregunté por su insistencia, y me dijo que, el color azul del cielo de Granada, era de las cosas más difíciles de conseguir en un cuadro, debido a la gran variedad de tonalidades, y la variación de estas en cuestión de pocos minutos, de tal forma, que tu empezabas a pintar el cielo a las once de la mañana, y cuando a los diez minutos lo habías conseguido, el cielo ya tenía otro azul que no era el que habías plasmado. La frustración era tan grande, que me dijo cuatro o cinco nombres de pintores muy reconocidos, que le habían confesado su incapacidad para acercarse al auténtico azul de nuestro cielo, conformándose con lo conseguido después de intentarlo durante horas, y que incluso alguno, había tomado la determinación de pintar el mismo paisaje por la noche, convirtiendo la obra en un nocturno, soslayando así la dificultad de reproducir en el lienzo, el auténtico azul del cielo granadino.

Yo hasta entonces pensaba que el azul del cielo, era igual en Granada que en Albacete, y fue con aquella experiencia cuando aprendí que el cielo tiene vida propia, y por lo tanto, su color azul depende de tantas cosas, coordenadas, latitud y luz solar del momento, que aunque lo pintes todos los días a la misma hora en el mismo lugar, el cielo es caprichoso y te pone a prueba ofreciéndote un abanico tan grande de tonalidades diferentes, que puede crearte una frustración de por vida. En una conversación con Soriano Quirós hace muchísimos años, me confesó que él se había liberado chuscamente de tal prueba, cuando le concedieron la plaza de profesor en Bilbao, y el cielo era gris todos los días gracias a los altos hornos y el resto de la industria metalúrgica, pero que también conocía a compañeros que habían sufrido mucho con este asunto.


POLVO EN SUSPENSIÓN


Desde hace meses, los pintores que gozan de hacer su trabajo al natural – que cada vez son menos- lo tienen mucho más fácil en Granada. La nube de polvo en suspensión con que nos obsequia África, unida a la grisácea de la contaminación atmosférica, han hecho desaparecer de nuestro cielo, ese color azul tan único que, ha sido piedra de toque a lo largo de tantos años para algunos pintores. El cielo de Granada muestra una tonalidad sepia, propia de una foto antigua, al estilo de la película, “Los Otros”, o de una postal con “Chorrojumo” recostando su hombro sobre la Puerta del Vino, esperando a los turistas para ser inmortalizado con “el catite”. Antes de este regalo africano, si te subías a Los Alixares y mirabas a Granada, ya se apreciaba una montera producto de la combustión automovilística y de las calefacciones, entre otras emisiones, que incluso obligaban a algunas personas a llevar mascarilla, mucho antes de la pandemia, ante la sorpresa de gente como yo que, por edad, hemos conocido un tiempo en que eso de las alergias era una cosa rara, muy minoritaria, y casi todas eran al huevo o a los frutos secos. Ahora el catálogo de alergias es tan extenso, que descubrimos con sorpresa como existen personas alérgicas al papel de los libros, a la colonia o determinados jabones, por ejemplo.


RIESGO REAL


El asunto es tan grave que, lo de no ver durante meses el azul auténtico del cielo de Granada, es una nimiedad, si lo comparamos con el riesgo para la salud que esto comporta. Ya no se trata del enfado que coges cuando, a las pocas horas de lavar el coche, las cuatro gotas que caen te lo vuelven a dejar embarrado con un aspecto deplorable. Ni tener que repetir la colada, porque ha llovido cuando la tenías recién tendida. El tema es que todo eso que hay en el cielo impidiéndonos ver su color azul, lo estamos respirando, metiéndolo en nuestros pulmones, y haciendo que nuestro organismo, dependiendo de las patologías asociadas que tengas, genere una respuesta de tal calibre, que puedes terminar en una cama de hospital con mascarilla de oxígeno, o lo que es peor, darle sentido a éste mes de los difuntos.

Existen estadísticas que lo atestiguan. Esto de la contaminación atmosférica, no es una cuestión de ecologistas malhumorados, que quieren un planeta limpio, mientras los demás echamos un cante a Cartagena. O nos tomamos en serio lo que estamos haciendo con el aire que respiramos, o comenzaremos a engrosar una triste estadística – que ya existe – de muertos por contaminación. Así de claro. El asunto es tan grave y perentorio, que lo de reclamar aquí y ahora, que vuelva el azul del cielo a Granada, ese que fue materia de prueba para muchos pintores, me parece una frivolidad. Debo solicitar, y solicito a quién corresponda que, se pongan cuanto antes los espartos, para que las criaturas humanas respiremos un aire descontaminado, que nos haga albergar, si acaso, una esperanza de vida razonable. Y a quién dios se la dé, San Pedro se la bendiga.

domingo, 30 de octubre de 2022

LOS FIELES DIFUNTOS

 LOS FIELES DIFUNTOS


Tito Ortiz.-


En un par de días, estaremos celebrando el de todos los santos y los fieles difuntos, pese a que éste mundo globalizado, nos ha introducido en un concepto de celebración, que para los niños de mí época, era una cosa impensable. Llevo varias jornadas recorriendo las tiendas del ramo, para que mis nietos den con el disfraz adecuado, a cada cual más terrorífico, porque incluso en algunos colegios, se les anima a ir de esa guisa el día de las vísperas. Ellos se lo pasan de miedo – nunca mejor dicho – pero no sé hasta qué punto, esta nueva forma de celebración desvirtúa lo que antaño celebrábamos con tanto recogimiento, venerando a los que se había ido al otro mundo.

Es verdad que si recurrimos a la historia de la humanidad, el Samhain era la festividad céltica de origen druídico, que se celebraba entre el crepúsculo del 31 de octubre y el del 1 de noviembre, y que señalaba el inicio del invierno y el año nuevo. Durante este período, los celtas aplazaban su trabajo cotidiano y las leyes de la naturaleza quedaban en suspenso; los humanos podían visitar el mundo de los muertos y los difuntos podían recorrer la tierra, los demonios se manifestaban y las hadas revoloteaban. Dicho esto, con la llegada del cristianismo, la iglesia nos indica que debemos honrar a los santos y los difuntos, de una forma menos pagana, acercándonos más al evangelio, y los rituales propios de nuestra religión mayoritaria.

BONIATOS Y MARIPOSAS

Para los que han tenido la suerte de nacer después que yo, les cuento como era nuestro particular, Halloween.

Mi tío, el pintor granadino, Rafael López Marín, falleció víctima de la tuberculosis, con tan solo 29 años, el día 29 del 9 de 1959, ya la insistencia del nueve era muy mosqueante en casa, porque su padre, mi abuelo Rafael, había fallecido también el 29 del 9 de 1949, así que algunos lo tomaron en la familia como una maldición bíblica, que  nos condenaba a castañetear los dientes, mirándonos los unos a los otros, a ver a quién le tocaba expirar el próximo día de san Miguel. Pero mi abuela Juana, mujer de pocas creencias decidió que aquel día de todos los santos de 1959, debería acercarse más a la tradición religiosa, adoptando las costumbres de la época, para exorcizar aquella jugarreta del destino, para con la familia.

La mañana del día de todos los santos, me cogió de la mano y con varias provisiones en un cesto de mimbre, subimos al cementerio. Antes de entrar, compró unos crisantemos, y nos dirigimos al Patio de San José, el último del cementerio, donde estaba enterrado mi tío. Para llegar hasta su tumba, teníamos que bordear la tapia del patio de los ahorcados, que separaba los cuerpos de aquellos que habían “ofendido a Dios” quitándose la vida, por lo que se les castigaba a ser enterrados en tierra no bendecida.

Colocadas las flores en un jarrón sobre la tumba de mi tío, la abuela sacó del cesto un tazón de loza, lo llenó con aceite y agua, abrió una cajita de mariposas “San Juan Bosco”, puso tres a flotar en el líquido y las encendió, procediendo con el rosario en su mano a rezar desde aquel instante. Llegó la noche, y de un envoltorio de papel de estraza, sacó un boniato para cada uno, que previamente había asado en el brasero de picón que nos calentaba desde caída la tarde. Al sonar el toque de ánimas a las tres de la madrugada en el campanil de la ermita, la abuela dirigió sus rezos a las ánimas benditas del purgatorio, y así hasta el amanecer del día de todos los difuntos.

EL SEÑOR DEL CEMENTERIO

Con los primeros rayos del sol, mi abuela me cogió de la mano, en lo que yo creí que era la despedida del recinto, pero nada más lejos de la realidad. Volvimos al paseo central del campo santo, para seguir rezando ante la imagen del Señor del Cementerio, como decía ella que se llamaba, aunque después supe que, al fallecer el célebre médico y filántropo Manuel Rodríguez Torres, se produjo una espontánea afluencia de personas a su tumba para manifestarle gratitud por la entrega y dedicación que el  difunto había prestado en vida a los más necesitados. Con el paso del tiempo las oraciones que los fieles dedicaban por el alma del difunto terminaron dirigiéndose a la escultura neoclásica del “Cristo despojado de sus vestiduras” que preside el panteón. Poco a poco se fue conformando la creencia popular de que el Cristo hacía milagros, convirtiéndose en un lugar de constante peregrinación. Y cuando yo creí que nos marchábamos, me volví a equivocar, porque volvimos a la tumba de mí tío, donde un señor con una cámara fotográfica colgada al cuello nos estaba esperando. Allí posamos junto a la cruz y la inscripción mortuoria, y de esta forma, días más tarde recibimos en casa varias copias de aquella foto, que era la tradición de la época hacerse en la tumba de nuestros muertos.

Han pasado sesenta y tres años de aquel día de los santos y de los fieles difuntos. A mí no se me ocurriría hacer pasar a mis nietos por lo que yo pasé. Tal vez el término medio sea la virtud, y tengamos que admitir que con este Halloween, los más pequeños se divierten de lo lindo, dejándonos libertad plena a los mayores, para que recordemos a los que se han ido, de la manera más conveniente a nuestras creencias. Tengamos en cuenta que la imposición a la fuerza, no es buena para nadie, porque siempre hay un efecto rebote. ¡Vivan los huesos de santo y los buñuelos rellenos de crema!

domingo, 23 de octubre de 2022

ÁNGEL BARRIOS, Y SU INFLUENCIA EN EL CONCURSO DE 1922

 ÁNGEL BARRIOS, Y SU INFLUENCIA EN EL CONCURSO DE 1922


Tito Ortiz.-


Nacido seis años antes que su amigo Federico, era hijo de Antonio Barrios, “El Polinario”, guitarrista y cantaor de flamenco, quien le inició en la guitarra, y en los conocimientos del arte gitano andaluz por vía de la vivencia práctica, en la taberna alhambreña que regentaba su padre, lugar de cita de la intelectualidad granadina y extranjera.  Además, estudió violín y piano con músicos granadinos, mientras que los estudios de composición los efectuó con Antonio Segura. Tocó el violín en varias orquestas de compañías de teatro y espectáculos y periódicamente se escapaba de casa para ir de gira: así, por ejemplo, entre 1900 y 1910 pasó largas temporadas en París, donde tuvo la oportunidad de conocer a Granados, Arbós, Turina, Zuloaga, Falla y Albéniz, con quienes entabló gran amistad, así como a Ravel, Dukas y André Gédalge, con el que estudió composición.


Fundó el Trío Iberia de instrumentos populares españoles (guitarra, laúd y bandurria) con Bazunarte y Devalque en 1900, ofreciendo conciertos con éxito por gran parte de Europa, incluso ante el rey Eduardo VII de Inglaterra. Su repertorio se componía de transcripciones de música española, especialmente de Albéniz. Tras su boda con Encarnación Pavía Ganivet en 1910, se radicó en Granada y aquel mismo año obtuvo el Premio Centro Artístico y Literario Granada por su obra para piano, “Guajiras”.


ABRIENDO LAS ALAS


Escribió música para obras de teatro, destacando su colaboración con Francisco Villaespesa en “Aben Humeya” (1913). Durante la época de la primera guerra mundial perfeccionó sus estudios de composición con Conrado del Campo, se fraguó una gran amistad entre los dos, fruto de lo cual fue una colaboración que se tradujo en una ópera y dos zarzuelas terminadas y estrenadas (El Avapiés, de 1919, La romería, de 1917, y El hombre más guapo del mundo, de 1920), así como una obra lírica, La máscara, que estaba en preparación en 1917. La relación se enfrió bastante debido a que Barrios mostró sus obras a Manuel de Falla sin que lo supiese su maestro.

Por aquellos años se estrenaron algunas de sus Impresiones sinfónicas, basadas en temas granadinos. Su Zambra en el Albaicín, que pertenece a esta serie, obtuvo un gran éxito en el Teatro Real en 1917, bajo la dirección de Arbós. Con el traslado de Falla a Granada en 1919, animado y ayudado por Barrios, se fomentó el círculo alrededor de la taberna del Polinario, que llevaba Antonio Barrios. Gracias a la personalidad de Ángel, se convirtió en un lugar de visita obligada para pintores, escritores y músicos, tanto españoles como extranjeros (entre estos últimos, Wanda Landowska y Richard Strauss) y lugar de encuentro para las corrientes vanguardistas, especialmente vinculado a la Generación del 27.


EL CONCURSO DE CANTE JONDO


La colaboración que mantuvo con Federico García Lorca se remonta a las veladas de poesía y música que ofrecieron a los Ballets Russes en 1918. Compuso más tarde el ballet Preciosa y el viento sobre un texto de Lorca. Barrios es un eslabón importante para Falla en el contacto con el mundo del flamenco y las posibilidades de la guitarra, incluso le ayudó en su Homenaje a Debussy, además de tocarlo a la guitarra para el maestro mientras lo componía. Años después Falla le confió el arreglo de la parte para dos guitarras de su música para El gran teatro del mundo de Calderón. Asimismo, Falla le aconsejó sobre su obra e intentó conseguir su publicación en el extranjero. La relación se reafirma a través de un vínculo personal: Falla y su hermana fueron padrinos de Ángela Barrios, la hija del compositor. De toda esta actividad surgió el gran acontecimiento que fue el Concurso de Cante Jondo de Granada en 1922, uno de cuyos promotores fue Barrios. Sus esfuerzos en el ámbito cultural granadino se manifestaron en su participación como director de la sección de música del Centro Artístico, Literario y Científico de Granada. Fue director musical de los montajes de teatro clásico de Antonio Gallego Burín, de los cuales destacan la producción de El gran teatro del mundo, de Calderón, en 1927, con arreglos musicales de Falla, y La moza de cántaro, de Lope de Vega, en 1935. Por otra parte, ejerció la labor de director del Conservatorio de Granada, fue profesor de la universidad, y miembro de la Academia de Bellas Artes Nuestra Señora de las Angustias.


SIEMPRE EN FLAMENCO


A partir de 1932 estuvo ocupado en la composición de La Lola se va a los puertos, con texto de Antonio y Manuel Machado. La obra se estrenó en 1951 y se le otorgó el Premio Nacional de Obras Líricas. Durante la guerra civil (1936-1939) estuvo a cargo de la Banda Municipal y de la Orquesta Sinfónica de la Falange de Granada y fue teniente de alcalde del Ayuntamiento de granada en la posguerra, aunque no militó en política. Al poco tiempo se trasladó a Madrid de forma definitiva y con la esperanza de obtener un puesto como docente en el conservatorio, lo que nunca llegaría. Cultivó la zarzuela en esta última etapa creativa y logró estrenar en la capital títulos como Juan Lucero y El nombre del rey.


Gran conocedor de formas flamencas, su obra está llena de bulerías, peteneras, farrucas, soleás y otros palos, cosa lógica si advertimos su vocación desde la infancia y la influencia de los escuchando en casa. Zambra en el Albaicín es, quizá, su obra sinfónica más lograda. El populismo de las posteriores zarzuelas, género predominante dentro de su obra, salvo el tardío intento de calidad en La Lola se va a los puertos, dio lugar a una música cada vez más casticista. La obra vocal es secundaria en comparación con la producción lírica, mientras que las obras para piano están basadas en su mayoría en danzas andaluzas, intentando imitar los efectos guitarrísticos. Sin su aportación, el concurso de cante de 1922, hubiera sido otro.

domingo, 16 de octubre de 2022

NUESTRA ORQUESTA

 




NUESTRA ORQUESTA


Tito Ortiz.-


Fue José Antonio Campos Borrego, por entonces alto cargo de la Comisaría de Música del Ministerio de Cultura, quién me presentó a un jovencísimo director de orquesta español, llamado, Juan de Udaeta. Tomábamos un café en el patio del Parador Nacional en La Alhambra, y yo lo entrevistaba en el marco del Festival Internacional de Música y Danza para el diario Patria. Campos me aseguró que, en poco tiempo veríamos a Udaeta dirigiendo en nuestro Festival, y aquello sonó a profecía, porque nada más iniciar los años noventa, éste se convertiría en el primer director de la Orquesta Ciudad de Granada.

En aquella conversación post entrevista, con el segundo café en la taza, hablábamos los tres de lo raro que parecía, que una ciudad como Granada, con un conservatorio de música con multitud de vocaciones, y teniendo el festival de música y danza más longevo del país –junto con el de Santander- era del todo incomprensible que, la ciudad de La Alhambra, no tuviera aún una orquesta propia, con la que enriquecer el propio festival.

Fueron años en los que también se pensaba que, una orquesta debería tener una sede propia para llevar a cabo su trabajo, y por aquellos tiempos, lo del Auditorio Manuel de Falla, era un sueño con pocos visos de realidad, pero sin prisa y tampoco con pausa, nuestro auditorio llegó. Ya solo faltaba la orquesta que lo llenara de contenido y sentido. Por fin, el 10 de junio de 1978, la obra de García de Paredes se inauguró con la Orquesta Nacional de España, bajo la dirección de Antoni Ros Marbá. Los primeros espartos ya estaban puestos.


CRÉDITO Y PRESTIGIO INTERNACIONALES


Inauguramos la década de los noventa con una orquesta que, pronto se granjeó la simpatía y el reconocimiento de público y profesionales, y  contó con la complicidad de los más grandes para su amplio repertorio:  Fazıl Say, Mi'sa Yang, Narciso Yepes, Montserrat Caballé, Plácido Domingo, Carlos Álvarez, Yehudi Menuhin, Pablo Martos, Alberto Martos, George Benjamin, Enrique Morente, Victoria de los Ángeles, Christophe Coin y Christian Zacharias, entre otros, han puesto su arte sin dudar, al servicio de nuestros músicos, y batutas de prestigio se han colocado frente a ellos, como  Krzysztof Penderecki, Rinaldo Alessandrini, Eduardo López Banzo, Manuel Hernández Silva, Christopher Hogwood, Fabio Biondi, Antoni Ros-Marbà, David Atherton, Pablo Heras-Casado, Frans Brüggen, Joaquín Achúcarro y Elisabeth Leonskaja, a los que hay que añadir el propio Juan de Udaeta y Josep Pons, que la revitalizó extraordinariamente. Su presencia ha sido requerida en acreditados certámenes como, el Festival Internacional de Música y Danza de Granada, el Festival Internacional de Música "Castell de Peralada", el Festival Internacional de Música de Segovia, el Festival Grec de Barcelona, el Festival Internacional de Santander, el Festival de Otoño de Madrid o el Música-Musika de Bilbao. Lo que demuestra su excepcional valía y profesionalidad.


ILUSIONES RENOVADAS


Inaugurada ya felizmente la nueva temporada y en compañía de Los Amigos de la Orquesta, que apoyan la formación desde 1994, Granada debe respaldar la realidad de nuestra orquesta, con el futuro tranquilo del próximo lustro, gracias a La Junta, el Ayuntamiento y la Diputación. 

Sensible a las efemérides patrias, la OCG ha inaugurado temporada, rindiendo homenaje al centenario del Concurso de Cante Jondo, con un programa íntegro de música española, que en el decir de mi admirado, Emilio Lacárcel, ha estado a la altura exigida. Comenzó el concierto con la partitura "En la Alhambra", de un músico enamorado de Granada como fue, Tomás Bretón, que incluso llegó a componer un himno a nuestra patrona La Virgen de Las Angustias. Le siguieron las, "Canciones y Danzas para Dulcinea" del tristemente desaparecido, Antón García Abril, muy ligado a nuetra provincia, através del Concurso Internacional de Música de Cámara que se celebra en Baza, y como no podía ser de otra manera, en la segunda parte se interpretó "El Amor Brujo " de Manuel de Falla, que para mi gusto ha sido el compositor que más  ha acercado el flamenco a una partitura de orquesta, con la acertada voz de Clara Montes. Todos bajo la batuta de Lucas Macías, protagonizaron un memorrable concierto. Del programa previsto bien  merece dstacar, el del viernes 28,  en el que flota nuestro Federico, con  la partitura de, Tomás MARCO, y  su Llanto por Ignacio Sánchez Mejías, ballet, con La cogida y la muerte, La sangre derramada, Cuerpo presente y Alma ausente, se completa con la suite, Las criaturas de Prometeo, de Ludwig van BEETHOVEN, todo bajo la dirección de  José Luís Temes, es un programa a la altura de cualquier formación que se precie. Larga vida a nuestra Orquesta Ciudad de Granada.



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Primer ensayo de la Orquesta Ciudad de Granada. (Foto ORFER)











domingo, 9 de octubre de 2022

LA FUNDACIÓN

 LA FUNDACIÓN



Tito Ortiz.-


A caballo entre tres siglos, sin contamos desde el nacimiento de su fundador, La Fundación Rodríguez Acosta, forma parte de la historia y el paisaje de Granada, involucrada en mayor o menor medida con todas las bellas artes, aunque predominen entre todas, las plásticas y la música. Su labor de mecenazgo y colaboración con instituciones públicas y privadas, así lo acredita.

En su génesis está la visión moderna y de futuro del pintor, José María Rodríguez Acosta, cuya obra está más que acreditada y reconocida a nivel internacional, que a principios del siglo pasado, se encargó personalmente, no solo de su construcción física, sino de poner los cimientos para la trascendencia en el tiempo, como templo de la cultura y su divulgación, de ahí que sea larga y prestigiosa, la lista de personalidades y estamentos, reconocidos por su medalla, que alcanza la más alta valoración y prestigio internacionales.

Desde sus becados intramuros para la creatividad libre de su arte, a la organización de magnas exposiciones, pasando por la atención a la poesía y sus creadores, el acreditado y trascendente taller de grabado, o su relación con la música, entre la que destaca su legendaria colaboración con el Festival Internacional de Música y Danza, “La Fundación”,  como así se le llama en Granada de manera cariñosa, se aproxima a su centenario con la satisfacción del deber cumplido, y la certeza de haber continuado el camino marcado por su fundador, constatado por hechos trascendentales, como albergar el, Instituto Gómez Moreno, que de no haber sido por su iniciativa, hubiera tenido un futuro incierto, asunto este resuelto en su día por La Fundación, de manera brillante y acertada.

El pintor, Miguel Rodríguez Acosta y Carlström, ha sabido en todo momento manejar el timón de esta nave varada en La Alhambra, y desde la que se proyecta al mundo, lo mejor de las artes y las ciencias.

JOSÉ MARÍA

“Nacido en el seno de una familia dedicada a los negocios bancarios, el pintor José María Rodríguez-Acosta (Granada, 1878-1941) gozó toda su vida de una desahogada posición económica, lo que le permitió dedicarse a la pintura con autonomía, produciendo en los primeros años del siglo XX unas obras que, a caballo entre el modernismo y el simbolismo, obtuvieron importantes premios en exposiciones nacionales e internacionales. Entre 1915 y 1930 abandonó prácticamente los pinceles para dedicarse a la planificación, construcción y decoración de su carmen granadino, que concibió como plasmación de unos ideales estéticos plenos de modernidad. En él albergó su biblioteca y diversas colecciones de objetos artísticos. En la década de los treinta retomó lentamente la pintura a través de géneros considerados académicos, transidos no obstante de un refinado simbolismo que evoluciona en los últimos años sobre el oscuro telón de fondo de la Guerra Civil española. A los dos años de finalizada la contienda, el Carmen se convirtió en sede de su Fundación.”

La valoración artística y académica de su obra, está reconocida a nivel internacional, así como su aportación a una dicción plástica consecuente con el momento de su creación, en la que sin existir rompimiento con lo académico, se proyecta un halo de modernidad y futuro imperecedero.

RAFAEL ALBERTI


En tiempos aún comprometidos, entre 1974 y 75, por iniciativa del Presidente de la Fundación Rodríguez-Acosta, y por su amistad con Rafael Alberti, se realizó en Roma una carpeta de serigrafías, con poemas de conocidos poetas como Antonio Machado, Jorge Guillén,  y Luis Cernuda, entre otros, en homenaje a Federico García Lorca. Todavía no corrían buenos tiempos para la lírica, pero el proyecto, no solo se llevó a cabo, sino que aún hoy, guardado en los archivos de La Fundación, constituye una joya valiente e histórica, de un momento en el que alzar la voz pronunciando a Lorca, podía traer consecuencias no deseadas.

En las seis “liricografías”, el texto de los poemas forma parte del propio dibujo, entremezclándose con las letras y con los trazos de las siluetas como un criptograma. Esta carpeta fue la protagonista de una exposición con el mismo título en el año 1975, en la sede de la Fundación, y prácticamente desde entonces no han vuelto a salir al público.

De esta manera y gracias a La Fundación, Rafael Alberti, el que llamaba “primo” a Federico, se iba aproximando a Granada - aunque “Nunca Fui a Granada” – visita que cumpliría en los años ochenta. Alberti había prometido a García Lorca que vendría a Granada. Tras la muerte del amigo, la promesa quedó en el aire. El 25 de febrero de 1980, al pie de la Puerta de Elvira, el alcalde de la ciudad, Antonio Jara, recibía al ‘primo’ de Federico con una bandera blanca y verde. El gaditano, con la emoción de la promesa cumplida, recibió las llaves de la ciudad. Luego subió a la Alhambra donde se sintió como un niño jugando en el país de las maravillas. «¡Qué cosa loca, qué maravilla!» decía mientras acariciaba, con un amor entrañable, los arabescos de la Alhambra. Bajó a Bibarrambla, y el mitin del PCE comenzó con un beso en la mejilla a la niña, que en nombre de la ciudad, le entregó un ramo de claveles rojos. Allí recordó, con voz grave y mirada al infinito, su amistad con García Lorca y recitó la ‘Balada del que nunca fue a Granada’ ante el silencio expectante de los más de diez mil asistentes. Y volvió a Granada en varias ocasiones. En aquellas visitas se encontró con un grupo de jóvenes poetas, de la llamada Otra Sentimentalidad (Benjamín Prado, Luis García Montero, Álvaro Salvador, Joaquín Sabina, Javier Egea o Luis Muñoz) que leyeron poemas con Rafael en La Tertulia.




PIE DE FOTO

Rafael Alberti, en la terraza del hotel Alhambra Palace, junto a su director, Gervasio Elorza. (Foto ORFER)



jueves, 6 de octubre de 2022

IDEAL EN EL CORAZÓN DE GRANADA

 IDEAL EN EL CORAZÓN DE GRANADA


Tito Ortiz.-


Han bastado tan solo noventa años, para que la palabra Ideal, se asocie indefectiblemente a nuestro periódico. Hasta la década de los años treinta del siglo pasado, cuando se decía,  Ideal, la gente podía estar hablando de otras cosas, por ejemplo, de un coche español. Ideal, era la marca española de automóviles, fabricados en Barcelona  entre 1915 y 1922. En realidad, se trataba de autociclos construidos por Talleres Hereter. El proyecto de los coches Ideal se debió a la colaboración de los hermanos Baradat, y la fabricación recibió el apoyo de Joaquín Cusíais y, posteriormente, de Sebastián Nadal. Precisamente, los dos últimos pilotaron automóviles Ideal en diversas competiciones españolas de la época. 

Fue en su momento frecuente, asociar la palabra Ideal, a salones donde se proyectaban películas desde que en 1917 se inauguró el Cine Ideal,  en uno  de los barrios más importantes de Barcelona, y no fueron pocas las ciudades que se apuntaron a ese nombre, incluida nuestra Granada. En este espacio, se podían ver programaciones de reestreno que por norma general iban acompañadas de espectáculos de varietés entre proyección y proyección. También se utilizó la palabra Ideal, para denominar un salón donde se lustraba el calzado en Granada, con más de una docena de limpiabotas, y un esmerado servicio, que incluía la prensa del día, café, tabaco y licores para su selecta clientela, además de la venta en participaciones de lotería nacional.

Los que hemos tenido la suerte de trabajar y vivir en Madrid, asociábamos enseguida con nuestra tierra y nuestro periódico, el bar donde se comen los mejores bocadillos de calamares del mundo, casa castiza donde las haya, en la calle Botoneros número 4,  “La Ideal”, y a pocos pasos, en la puerta del Sol, comprábamos nuestro periódico Ideal, para no perder el contacto con nuestra tierra.


- La portada del 11 de junio de 1932, recoje el sentir de la Granada pregonera, con el carrito de los helados, ofrecidos a la chiquillería a golpe de pregón, y todo un clásico, el burro con el agua del avellano esperando a los sedientos.


Ideal nace con sus orígenes en el diario católico y conservador La Gaceta del Sur, que había desaparecido en 1931. Son tiempos convulsos, donde un sector del republicanismo español, pone en centro de su mira, todo lo que huela a iglesia católica y clero, pero aún así,  la jerarquía católica granadina decidió lanzar un nuevo periódico, contando con la colaboración de periodistas como Ángel Herrera Oria y  Pedro Gómez Aparicio.​ Ideal salió a las calles por primera vez el 8 de mayo de 1932,  editado por la Editorial Católica, En estos primeros años de existencia fue un diario claramente confesional y conservador, y su principal rival periodístico era el liberal, El Defensor de Granada.​ En el contexto de la década de 1930, el Ideal era el diario de mejor manufactura en Granada,​ y pronto superó a otras cabeceras.​ 

En una tierra de pregones como la nuestra, Ideal pasó a engrosar las llamadas de atención al oído de los granadinos. En una ciudad donde se pregonaba el agua fresquita del avellano, los higos chumbos, las chufas, las almencinas y las acerolas, entre otras cosas, las calles se inundaron de la palabra Ideal, porque no eran pocos los kiosqueros que lo pregonaban al paso de los viandantes, a los que se sumaban, una legión de vendedores a pie o en bicicleta, voceando la cabecera de Ideal y la principal noticia de la portada. De esta forma, Ideal pasó a formar parte de nuestra vida diaria, engrosando las opciones de compra de puestos colocados estratégicamente, al paso de los viandantes.

He dicho antes que en aquellos años no corrían buenos tiempos para la lírica, como lo demuestra que el 10 de marzo de 1936 un grupo de exaltados​ prendió fuego a la sede del Ideal, cuya máquina fue destrozada y el local reducido hasta los cimientos.​ Como consecuencia, el diario no salió durante algunos meses. A comienzos de julio volvió a circular por Granada, poco antes del estallido de la Guerra Civil Española. 


-El 21 de julio de 1936, la portada de Ideal no deja lugar a dudas: La guerra ha comenzado.


Tras el final de la contienda, el Ideal fue de los pocos diarios granadinos que sobrevivió a la legislación franquista y pudo seguir publicándose. Durante estos años su rival en Granada fue el diario falangista Patria, órgano provincial de FET y de las JONS. Con el tiempo el periódico - como así hemos llegado a llamarle por su hegemonía en los kioscos y suscriptores - estableció varias delegaciones fuera de Granada, como fue el caso de las provincias de Almería y Jaén, y se consolidó como uno de los principales diarios de Andalucía Oriental,​ llegando a establecer una edición especial para la provincia de Málaga. 


-El 27 de septiembre de 1946, Ideal anuncia en su portada, los alimentos que se van a racionar durante el mes de octubre, la restauración de la fuente de los leones alhambreña y el cambio de hora que todavía tiene partidarios de que desaparezca. En Junio nos había visitado Eva Perón, a la que Granada rindió un caluroso recibimiento.

El reventón del Darro, con imágenes estremecedoras de Torres Molina, llega a la primera página en septiembre de 1951, con una información completa de los daños por el temporal en la provincia, la muerte de dos niños en la Lancha de Cenes, y el corte de las carreteras de Murcia y Sierra Nevada.

Grabada en la memoria de muchos de nuestros mayores, esta la portada del 20 de abril de 1956, con el famoso terremoto de Albolote, que dejó un reguero de víctimas por la provincia, y grandes destrozos que tardarían años en repararse.


En la década de 1960 su difusión logró superar los 20.000 ejemplares, y para 1975 se había convertido en el segundo diario con mayor tirada de Andalucía. 


-La esperanza y el desarrollo nos va llegando a Granada en la década de los sesenta, de tal forma que ya podemos homenajear al gran compositor mexicano, Agustín Lara, que nos ofreció su inmortal Granada, elevada hoy a himno de la ciudad, y divulgada por los más grandes artista por todo el mundo. El 16 de junio de 1964, ideal muestra como el alcalde Manuel Sola, en nombre de todos los granadinos, rinde la ciudad a los piés del compositor, con toda clase de regalos, en un homenaje sin precedentes. Agustín Lara, llora emocionado.

En 1969 la foto que comanda la primera de Ideal, es la llegada del hombre a la Luna


Los granadinos ya tenían como referente de su vida cotidiana y de información a nuestro periódico. No hay más que comprobar sus anuncios, para ver que resolvía todas las necesidades de los ciudadanos. En Ideal encontrabas, junto al horario de misas y rosarios por parroquias, donde se celebraba el jubileo de las cuarenta horas o la adoración nocturna. Pero también, donde estaban los mejores bocadillos de Granada, o sea, en el bar Aliatar, la cartelera completa de nuestras salas de cine, con especial referencia al Coliseo Olympia, el Regio o el Capitol. Las motocarros Iso, en Baquero Motor, los juguetes en Almacenes el 95 de Bibarrambla, los abrigos En Moises Linares de Puerta Real, las mejores tortitas con nata del Café Suizo, o su famosa ensaladilla rusa de medio día. Para maletas Los Madrileños y para Bolsos Pastor. Si no es fresca, no es Puleva. El menú extraordinario del Restaurante Los leones. En Febrerillo El Loco, compre en Lirola por poco, de la calle Príncipe. Grandes ofertas en Almacenes El Aguila de Gran Vía o en Los Vázques de la calle Hileras, los trajes de comunión en Almacenes los Muñecos y las camisas de popelín con cuello de repuesto y doble puño para los gemelos, en la camisería El Sol. Solo faltaba una cosa por saber cada mañana, y eso también lo traía Ideal: Cuando la ONCE tenía su sorteo cada noche en cada provincia, con números de solo tres cifras, Los Almacenes La Santa Cruz de don Paulino Vico, que además era concejal del ayuntamiento, patrocinaba cada día el número premiado del sorteo de los ciegos. Todas las necesidades cubiertas con nuestro Ideal.


-En 1973, la trágica tormenta que arrasó La Rabita con decenas de muertos y desapàrecidos, pone de luto a la provincia. Ideal realiza un despliegue informativo que duraría semanas, encabezando las ayudas para su recuperación.

El cinco de diciembre de 1978, Ideal informa del Pacto de Antequera por la Autonomía, con el que se pone la primera piedra para convertirnos en Comunidad.

El primero de marzo de 1980, informa del resultado del referendum.


Coincidiendo con los años de la Transición, bajo la dirección de Melchor Saiz-Pardo el Ideal sufrió una transformación informativa y técnica. Durante la década de 1980 continuó siendo el diario hegemónico de Granada y Andalucía oriental, a pesar de la aparición de nuevas publicaciones en Granada. 

Y pese a su irrenunciable vocación de periódico de información local, las secciones de nacional e internacional nos tenían al tanto de todo lo que pasaba en el mundo, y si no era suficiente, se hacía una nueva tirada del periódico por la tarde, si la magnitud de la noticia lo requería. Yo recuerdo ediciones vespertinas de Ideal, con motivo por ejempo, de la muerte del Papa Juan XXIII, o del magnicidio de John F. Kennedy en 1963. Cuatro años más tarde, recuerdo otra edición dedicada a la Guerra de los seis días, con la aplastante victoria del ejército israelí, a las órdenes de un militar con un parche en su ojo izquierdo llamado Moshé Dayán, el segundo que veía así en mi vida, después de Millán Astray, o el tercero si cuento a la princesa de Éboli, doña Ana Hurtado de Mendoza.


-El 5 de junio de 1987, tiene lugar la reinauguración del auditorio Manuel de Falla, trás el incendio provocado por un ex empleado descontento con su despido, hecho que se produce con la inestimable colaboración de su arquitecto, Garcia de Paredes, Maribel Falla, Marivel Calvín y Miguel Ángel Gómez Martínez, entre otros, con un concierto íntegro de obras de don Manuel.


La hegemonía de Ideal en la provincia, como bastión imprescindible de la información, llega incluso a incidir de manera importante en la radio granadina. Cuando solo se podían sintonizar las emisoras Radio Granada, La Voz de Granada y Radio Popular, a las que no se les permitía tener informativos propios, pero si la obligación de conectar con el Diario Hablado de Radio Nacional de España, más conocido popularmente como, El Parte, las tres emisoras se nutrían de la información publicada por Ideal, para mantener informados a sus oyentes, una deuda histórica de las ondas  granadinas con nuestro periódico, que aún no ha sido reconocida ni saldada. Ocurre lo mismo con su labor solidaria, en favor de los más necesitados, y de solidaridad en cuantas catástrofes nos han ocurrido, liderando las acciones precisas para restañar heridas.


-El 11 de febrero de 1996, por fín inauguramos nuestro campeonato de esquí alpino. Ideal nos sirve toda la información en sus páginas, de aquella inolvidable ceremonia de apertura.


Existen más motivos para sentirse orgullosos de que Granada tenga un periódico como Ideal. Desde mediados de los años setenta del siglo pasado, en una labor que inició su director entonces, Melchor Saiz Pardo, y que ha sido brillantemente continuada por Eduardo Peralta de Ana. Ideal cuenta en sus páginas de opinión, con firmas acreditadas de todas las tendencias políticas, sociales y religiosas, de tal manera, que no existe corriente de pensamiento que se sienta excluída de sus páginas, ofreciendo así a la sociedad granadina, el abanico más amplio de opinión, que jamás se ha dado en un periódico hasta nuestros días, poniendo así de manifiesto la pluralidad que se da en nuestra sociedad, reflejándola fielmente en sus páginas día a día, en una clara vocación de servicio a la comunidad lectora, en aras de la libertad de expresión total.


- En julio del 97 Bill Clinton, aparece en la portada, junto a los reyes de España y el entonces principe Felipe, en el Patio de los leones. Inaugurando el nuevo milenio, el dolor llega a las páginas del periódico, con el asesinato de Luís Portero. Ideal hace un despliegue informativo que está a la altura del lector más exigente. El atentado de las torres gemelas, el ascenso del Granada, de nuevo a la primera división, que esperamos recuperar pronto, y la pandemia, dibujan un abanico de periódico actual, cercano y expansivo.


Está claro que Ideal forma parte ya del escudo de Granada, que es uno de sus emblemas, que quién quiera conocer esta ciudad, está obligado a pasar por sus páginas. La utilidad de Ideal es amplia como su vocación de servicio, incluso para los que no saben leer. Mís ojos de niño recuerdan como en la pescadería del Albayzín, el kilo de boquerones te lo daban envuelto en las páginas de Ideal. Y Encarna, la huevera, te vendía una docena de huevos blancos, de esos que ya han desaparecido del mapa, depositándolos en un cartucho extraordinariamente plegado con las páginas de Ideal. De camino y mientras esperaba la cola, en todo un ardil de papiroflexia me confeccionaba conn sus manos un bicornio, con el que yo jugaba al llegar a casa, con la espada de madera que me había hecho mi tio Ñoño, tallista y dorador albaicinero. Ideal, como puede comprobarse, es todo un lujo de Granada.



domingo, 2 de octubre de 2022

OLIMPIADAS DE INVIERNO

 OLIMPIADAS DE INVIERNO


Tito Ortiz.-



Con esto del cambio climático, vete a saber si en algún momento, volveremos a tener una competición mundial en Sierra Nevada. La nieve cae cada vez en menor medida, y hasta nos llueve barro africano, que hace perder a la estación su clásico color blanco, por ese beige amarronado, que todo lo entristece y ensucia. Pero no hay que ser pesimistas, porque en esto de los factores climáticos, errar en su pronóstico es ya un clásico. Pertenezco a la generación que vio como el meteorólogo de la única televisión de España, Eugenio Martín Rubio, tuvo que cortarse el bigote apostado el día anterior, si su pronóstico del tiempo era fallido, como así fue. Vivimos tiempos de cambios rápidos de hoy para mañana, y lo que es peor, la historia se repite cuando menos te lo esperas, y cuando todos sacábamos pecho a la vida, muy ufanos, por haber vencido para siempre, catástrofes y epidemias, la covid-19 pone patas arriba a todo un mundo de científicos modernos, y el volcán de La Palma, nos devuelve de una bofetada al paleolítico. Vamos de chulitos suficientes por la vida, y la vida nos da, cada vez que quiere una bofetada, para que esa confianza autosuficiente, la enterremos para siempre.


Granada en esto de la nieve, tuvo su esperanza. Nuestras cumbres con su oro blanco sirvieron desde siempre para calmar la sed, conservar los alimentos y hacer más llevadera la vida en los hospitales. El trabajo de los neveros durante siglos, transportando ese sólido que se deshace a líquido en tan poco tiempo, no ha sido suficientemente reconocido por la sociedad en su conjunto, ni cantado por los poetas, ni contado por los cronistas. Estamos hablando de cinco siglos de transporte y conservación de la nieve, a cargo de unos hombres y unos animales, cuyo reconocimiento a su trabajo está pendiente en la historia. Pero hubo un tiempo en el que nuestras gentes pusieron el objetivo en una alta competición para nuestros montes nevados, y eso – afortunadamente – se logró en 1995, con nuestro Campeonato de Esquí Alpino, aunque el cambio climático del que nadie hablaba entonces, por miedo, ya nos dio un aviso por falta de nieve, y un aplazamiento mundial de la competición hasta un año más tarde, pero aquella profecía nadie se la tomó en serio, incluso hoy en día hay quién habla de ampliar la estación. 


OLIMPIADAS DE INVIERNO


El sueño granadino no fueron los campeonatos, aunque estos vinieron gracias a nuestra insistencia de años antes, donde lo que de verdad Granada solicitaba, era la celebración de una Olimpiadas de Invierno. El mismo año en que el hombre llega a la Luna y Hermida nos lo cuenta, Granada ya solicita la celebración de este evento, gracias a la iniciativa – entre otras personas – del Alcalde, José Luís Pérez Serrabona, que recoge el testigo de su antecesor, Manuel Sola,  primero en reclamar en el Palacio de El Pardo una Olimpiada para Granada. Por entonces la carretera de acceso invitaba más al suicidio, que ha disfrutar de la nieve, pues el trazado era el mismo del Duque de San Pedro de Galatino, y lo del telecabina a Borreguiles, un sueño.

En 1976, es el propio Ministro De Información y Turismo, Manuel Fraga, quién está por la candidatura de Granada, con la anuencia del responsable olímpico, José Antonio Samaranch, pero el asunto no llega a mayores por una evidente falta de presupuesto para las infraestructuras necesarias. Pero Granada lo sigue intentando. Ya en democracia, el ayuntamiento presidido por Antonio Jara, es el que se toma en serio la candidatura de Granada a unas Olimpiadas de Invierno, y en compañía de, José Sánchez Faba, Antonio Pipó Jaldo, Jorge Manrique y Manuel Peregrina, montan una candidatura de nuestra ciudad, que por primera vez tiene visos de realidad. El propio José Antonio Samaranch, presidente del Comité Olímpico, viene a Granada para ratificar la recepción de nuestra candidatura, para cuya promoción, el concejal de relaciones institucionales, José Miguel Castillo Higueras, encarga al taller de los hermanos Moreno, unos juegos de pisa corbatas, gemelos y pin de solapa, en plata de ley, que llevan una granada insertada entre los aros olímpicos, una pieza de alta joyería que hoy es objeto de coleccionistas.


MALAFOLLÁS HAY EN TOS LAOS


Como no podía ser de otra manera en esta ciudad de mis entretelas, ante la fuerza de una candidatura en serio, que podría ser victoriosa – como así fue – la eterna Granada, casposa, ególatra y elitista, pone el grito en el cielo cuando comprueba que el proyecto va en serio. Pero no lo hace por razones ecologistas y de respeto al medio ambiente, al ver que se va a ampliar la carretera, se van a instalar nuevos remontes, construir aparcamientos, y un centro de alto rendimiento, lo hace, como ya quedó patente en la tertulia de la Peña de Los Monteros, porque eso facilitaría el acceso masificado de personas a “nuestra” estación, y dejaría de ser el paraíso hasta entonces para unos pocos granadinos de alto standing. Lo de esta ciudad no tiene arreglo.

Aunque un año después, Granada celebró no una Olimpiada como era su añejo deseo, pero si, unos campeonatos mundiales de esquí alpino, que nos pusieron en el mapa mundial de éste deporte por primera vez en la historia, y del éxito de la competición, su organización y desarrollo, nos habla la intención que años más tarde tuvo la ciudad, de ser candidata de nuevo a un evento de estas características para 2010, aunque esta vez la candidatura encabezada por el alcalde, José Moratalla, no alcanzó cumbre, que se dice en el argot.



PIE DE FOTO

José Antonio Samaranch, presidente del Comité Olímpico Español, firma en el libro de la ciudad, en el despacho de Antonio Jara, su alcalde, ante la presencia del Concejal Castillo Higueras. Foto ORFER.




domingo, 25 de septiembre de 2022

HONOR Y GLORIA A LOS NUESTROS

 HONOR Y GLORIA A LOS NUESTROS


Tito Ortiz.-


Me cuentan que a la entrada de la gloria, estaba Manuel Benítez Carrasco, esperando a Manolete, por admiración y vecindad. El gran Ramón Montoya, nada más ver entrar al bailaor sacromontano, templó la guitarra, abordando el toque por farrucas, y una vez más, la Juerga en el Cielo, ha durado varios días, y lo que te rondaré morena. Cuando los genios se encuentran en el paraíso de los dioses, la conjunción astral es tan fuerte y poderosa que, la creatividad artística va saliendo a borbotones, dando paso a la sinfonía de “quejios” jondos que han marcado su vida en la tierra. Manuel Santiago Maya, “Manolete”, tenía tan solo ocho años, cuando el mítico, Antonio el Bailarín, recogiendo los posos flamencos de “El Estampío”, abrió su academia, Amor de Dios en Madrid, para que estas nuevas promociones de artistas destinados a la cumbre de las artes, pudieran pasar por ella a instruirse durante su adolescencia, como fue el caso. Cierto es que, Manolete, Gades, El Güito y Mario Maya, pasan por las exigencias clásicas que requiere una formación completa, bajo la docencia de doña Pilar López, hermana de La Argentinita, que no solo les enseña flamenco, sino que, los introduce en la danza española, la escuela bolera y los bailes regionales. Yo he visto a Antonio Gades bailar una jora aragonesa, antes de abordar los palos flamencos en grandes compañías de renombre. Y ese es el secreto de estos artistas que traspasan las fronteras del convencionalismo. Manolete era el último alumno aventajado de una formación académica completa, con la que enriqueció su arte flamenco. Por eso se equivocan los jóvenes que actualmente, se centran exclusivamente en el flamenco, y no abren el abanico a otras músicas de las que se aprende tanto. Su gran aportación al baile gitano andaluz personalizado en la Farruca, no fue lo único de su creatividad artística, pero en su coreografía personal, se aprecian los gestos y movimientos de Pilar Lópes y de Antonio Soler, perfumados con el aroma del Sacromonte que desprende nuestro Manolete que, con una vara de mimbre, está bailando en la gloria.

ESTANISLAO PEINADO

El apellido Peinado está unido de por vida al Albayzín, y a obras en favor de los más necesitados. Miguel y Antonio llegan al barrio para hacerse cargo de la Parroquia de El Salvador, destruida por los trágicos sucesos de nuestra guerra incivil, comienzan su restauración y fundan las escuelas parroquiales para albergar a la chavalería. Le encargan a Estanislao que de clases de música a los niños, y este termina fundando una escolanía de prestigio. Son los años cincuenta, continuamos en la depresión que arrastramos de la guerra, pero en el Albayzín se aprende música y se canta, gracias a los Peinado y muy especialmente, a Estanislao que brega con los más jóvenes.

El éxito de la empresa anima a nuevos y más grandes proyectos y fundan el Coro de El Salvador, una formación de acreditado prestigio con eco temprano fuera de Granada.  El coro de Estanislao, ha tenido desde su fundación una colaboración y presencia continuada con nuestro Festival Internacional de Música y Danza. Otras  han sido las realizadas en TVE, en el Círculo Medina Elvira de Madrid, en la Cátedra Manuel Manuel de Falla de la Universidad de Granada o en numerosas actividades organizadas por el ayuntamiento de Granada. Las propias palabras de Estanislao Peinado, definen el rigor y la altura de su obra: 

“He hecho todo lo posible para que en cada concierto se respeten cada palabra, cada tilde y cada coma. Siempre he seguido a rajatabla la máxima de San Agustín que dice que, si la música no está de acuerdo con el espíritu de la letra, que se calle la música. Y desde luego nunca he caído en la tentación de cantar cosas baratas en el mundo de la música religiosa. No podemos cargarnos lo que hace tantos siglos un monje compuso tras pasar mucho tiempo encerrado en su celda.

Siempre se consideró discípulo de Ruiz Aznar , en lo que respecta a la música y del Padre Manjón en lo pedagógico. Ha sido un lujo de Granada.


AL VOLANTE DE LA VIDA

Aquella niña que tenía que hacer todos los días kilómetros para asistir a la escuela, tenía madera de mujer valiente y pionera. A los niños se les ve venir desde chicos. Por eso ahora el reconocimiento recibido es justo y gratificante. Elena Morón se formó, al mismo tiempo que colaboraba en casa al cuidado del ganado. A la edad adulta, también sufrió los sinsabores de la emigración forzosa junto a su marido. El trabajo en Alemania durante nueve años fue duro, pero tuvo la recompensa del regreso, con la posibilidad de adquirir licencia para un taxi, que la convirtió en la primera mujer taxista, claro que eran años en los que ver a una mujer al volante, despertaba toda clase de recelos, y tuvo que completar su labor dedicándose a la costura, de lo que se deduce, que a Elena nada la retrae, y con su testimonio de trabajo, deja claro que cuando una mujer se lo propone, por muy machista y retrógrada que sea la sociedad, su voluntad va por delante. Su vida es un ejemplo para las mujeres jóvenes que se amedrantan a las primeras de cambio, necesitamos muchas Elenas para romper los techos transparentes. Enhorabuena.





domingo, 18 de septiembre de 2022

LIBERTAD Y TOLERANCIA

 LIBERTAD Y TOLERANCIA


Tito Ortiz.-


Hace dos viernes – te llamaré viernes – el salón de plenos del ayuntamiento de Granada, se abarrotó de libertad y tolerancia para que la ciudad y sus representantes, reconocieran la trayectoria valiente y libertaria de una mujer que nació hombre. La medalla del Ministerio de Igualdad a Kin Pérez, vino a refrendar iniciativas anteriores del ayuntamiento y la diputación, en forma de reconocimientos a su persona. Y el asunto tiene su miga, porque no olvidemos – para que nunca se repita – que por los alrededores de la casa consistorial, el 18 de agosto de 1936, Juan Luís Trescastro Medina, pregonaba a los cuatro vientos, para general conocimiento de la ciudadanía y escarmiento, que había participado en la detención de Federico García Lorca en casa de los Rosales, había prestado su coche para el traslado del poeta, formaba parte del pelotón de fusilamiento que lo asesinó, y que él, particularmente, una vez muerto Federico, le había dado dos tiros en el culo, por maricón. Y eso, de alguna manera, se exorcizó hace dos viernes, cuando en la casa consistorial, el Ministerio de Igualdad y la ciudad de Granada, rindieron público homenaje a Kin Pérez, para poner a la ciudad, en el sitio que algunos desalmados le arrebataron hace ochenta y seis años.

Una ciudad en la que han convivido, judíos, árabes, cristianos y gitanos, no podía seguir soportando esa losa infernal, llevada a cabo por bárbaros asesinos, sin alma y sin conciencia, homófobos desde la cuna, que imponían sus ideas, no con la fuerza de la palabra, sino, con la de las armas. Dos meses después de asesinar a Federico, le hicieron lo mismo a Agustina González López, “La zapatera”, apodada así porque tenía una tienda de calzados en la calle Mesones, en cuyos escaparates, vendía sus propios libros en los que hablaba libremente a cerca de la sexualidad y apariencia de hombres y mujeres, y además, vestía con ropa de hombre, de ahí que, en Octubre del 36, los golpistas fueran a por ella y la fusilaron – según ellos – por ser lesbiana, ya que entre otras cosas, entraba sola a cafeterías y restaurantes, cosa que “no debía hacer” una mujer. Por eso y por tantos casos más, es tan importante lo ocurrido hace dos viernes en el antiguo convento del Carmen, donde Granada se posicionó en aras de la libertad y tolerancia, junto al colectivo LGTBI, en defensa de sus derechos, que con demasiada frecuencia se ven amenazados por algunas individualidades de la población, incluso por algún partido político, que utilizando la democracia, hace gala de un involucionismo atroz, arremetiendo contra colectivos de hombres y mujeres que solo quieren vivir su sexualidad, de acuerdo con su mente y no con el cuerpo que les dotó la naturaleza, que fue tan cruel con ellos/as.

GRANADA ES LIBERTAD

Que algunos semáforos luzcan la bandera arco iris, no es una cuestión baladí. Es el compromiso de una sociedad que apuesta mayoritariamente por vivir en paz, en libertad y tolerar todas las opciones. No quiero ni imaginarme, lo que tuvo que significar en aquella Granada pacata del inicio de los cuarenta del siglo pasado, nacer en una familia bien, de apellidos dobles, y darse cuenta a los doce años, que su cuerpo no respondía a lo que dictaba su mente. En esa conferencia –como ella la llamó- que Kin Pérez nos dio en el salón de plenos, nos habló de cosas que obviamos sin querer. Como que todos y todas nacemos con dos tetitas y pene, y que luego, el capricho de ciertas hormonas, hacen que estos órganos se desarrollen más o menos, en función de si vas a tener apariencia de mujer u hombre, pero la mente va por otro lado y es más poderosa. En esa lección magistral que nos dio a los presentes a cerca de la transexualidad, con la pedagogía más exquisita, fue muy fácil comprenderla y admirarla, sobre todo cuando relató que al cumplir los cincuenta años, decidió dar el paso definitivo, y un día se marchó de clase siendo el profesor de, ética y filosofía, apareciendo al siguiente, siendo la profesora de las mismas asignaturas. A pesar del impacto de su transformación, mantiene que sus alumnos/as no fueron precisamente los que mayor rechazo le mostraron, dando un ejemplo de tolerancia, que para estar al comienzo de los años noventa, fue muy positivo.

MILITANCIA Y TESTIMONIO

A partir de ese momento, Kin Pérez ha estado en la vanguardia de la lucha internacional. ​ Ha sido cofundadora y presidenta de la Asociación de Identidad de Género en Andalucía​ y del colectivo Conjuntos Difusos-Autonomía Trans. A punto de cambiar el milenio, siendo presidenta de la Asociación de Identidad de Género en Andalucía,  consiguió que nuestra Comunidad, se convirtiera en la primera autónoma de España, en incluir en su catálogo de prestaciones sanitarias, el tratamiento y las cirugías de reasignación de sexo, lo que significó un gran avance para el colectivo. En 2013, se encadenó a las puertas del Parlamento Andaluz e inició una huelga de hambre en protesta por el retraso en la aprobación de la ley Integral de Transexualidad en Andalucía. Antes en 2007, ocupó puesto en la lista electoral de Izquierda Unida en las elecciones municipales para el Ayuntamiento de Granada, convirtiéndose en la primera mujer transexual que formó parte de una candidatura electoral en España. Y en las últimas Generales, fue la número dos al Senado por la coalición Recortes Cero, siendo un honor para mí, encabezar esa lista con ella. Kin, te queremos, y lo que es mejor…Granada te quiere.