martes, 31 de diciembre de 2019

LOS FELICES 20

LOS FELICES 20

Tito Ortiz.-

Esta noche a las doce cambia la vida de los granadinos, porque entramos en la década de los felices años veinte, y ya se sabe, que eso es signo de prosperidad y optimismo para todos. En los diez años que tenemos por delante, veremos con seguridad como Luís Salvador, gobierna este país desde la Moncloa, mientras se marca un charlestón con Inés Arrimadas, concediendo a Granada, la tercera circunvalación, el AVE soterrado con paradas en Loja, El Salar, Huétor Tájar y Santa Fe. Las Canalizaciones de Rules, el acelerador de partículas, el telesilla desde Puerta Real al Veleta. La autovía a Sierra Nevada, el gran espacio escénico, el tren a Motril y Guadix.  Sebastián será por fin alcalde de Granada, al ritmo de un foxtrot, porque a fin de cuentas, él, es un poco más antigüico. Del brazo de su compañera, Marifrán Carazo, inaugurará la ampliación del metro a más de cuarenta pueblos del cinturón, siendo él un convencido de este medio de transporte, desde el primer día. Conseguirá la capitalidad cultural para Granada a perpetuidad – como los nichos en el cementerio – “desembovedará” el Darro haciéndolo navegable desde el Rey Chico hasta los Sánchez, hablará con su colega, Francisco de La Torre, para ver cómo ha transformado Málaga, mientras Torres Hurtado hundía Granada, otorgará la Casa Ágreda a la Federación de Cofradías, para instalar en ella el gran Museo de las Hermandades y Cofradías de Granada. Hará peatonal el eje, Recogidas, Reyes Católicos, Gran Vía, siguiendo el ejemplo de la calle Larios, poniendo bancos para sentarse a en todo el recorrido y, quitará los cables y antenas del Albayzín y el Sacromonte. Con Sebastián, Granada volverá a ser el epicentro de aquel reino que, un día abarcaba desde el levante español hasta Algeciras. El ayuntamiento tendrá superávit, La Tarasca desfilará en la Pasarela Cibeles, y el sorteo del gordo descargará de nuevo millones en la calle Príncipe.
Llegan los felices 20, no habrá listas de espera en la sanidad, según los estudios europeos, los andaluces saldremos del furgón de cola en materia de formación de nuestra juventud, los pensionistas dormirán tranquilos porque sus ingresos estarán blindados en la Constitución. Nadie ganará menos de mil euros al mes, ni más de diez mil. Los bancos y cajas de ahorro, devolverán los ochenta mil millones que nos costó su rescate, desaparecerá el paro, Cataluña llevará a cabo por fin su referéndum, el cambio climático será abordado contundentemente, por parte de los países más contaminantes, y Greta será ingresada en un convento de clausura para ser tratada de sus alucinaciones. Con los felices 20, nuestros hijos se emanciparán al cumplir la mayoría de edad con sus propios recursos, en la hostelería se respetarán los turnos de ocho horas, los sueldos dignos, el alta en la seguridad social y los descansos semanales con sus vacaciones correspondientes. Bendodo habrá levantado todas las alfombras del pesoe andaluz y los martes, sus ruedas de prensa ya no serán de infarto. Ésta década de los veinte nos traerá, paz y felicidad a todos, desaparecerán los comedores sociales, los bancos de alimentos y los sin techo durmiendo en nuestras calles. 
Aunque debemos ser cautos, no olvidemos que los felices años veinte del siglo pasado, terminaron en 1929 con el crack. Sin ir más lejos, en menos de 48 horas, en nuestra Plaza del Carmen, asistiremos un año más al triste espectáculo de ver cómo se enfrentan las dos Españas, con voces e insultos, mientras el pendón de Castilla es tremolado desde el balcón de un convento. La única inocente será la cabra.

martes, 24 de diciembre de 2019

HOY ES NOCHE ¿QUÉ?

HOY ES NOCHE ¿QUÉ?

Tito Ortiz.-

En noches como ésta, llevo decenas de años cumpliendo la enseñanza evangélica de sentar un pobre a mi mesa. Es más, siento a varios y, algunos me temo que lo serán de por vida. Hablo de mis nietos, que ahora tienen entre cuatro y siete años, de los que estoy convencido que al paso que va este país, serán pobres toda su  vida, pobres de solemnidad. No hay más que comprobar, que mis hijos –sus padres – ya lo son pese a tener trabajo y nómina. Raro es el mes que no tenemos que echarles una mano, no solo a conciliar para que puedan trabajar, sino a implementar el pírrico sueldo que cobran, para que puedan llegar a fin de mes. El ayudar al inicio de curso o, con los regalos de reyes, hace tiempo que quedó en una lejana anécdota. La ayuda ahora es diaria, constante, y va desde lo básico de comida y vestido, a libros, recibos de luz o completar para la hipoteca mensual.
Esta sociedad está creando familias acomplejadas, traumatizadas para siempre, al comprobar que ellos no pueden hacer lo que hicimos sus padres, emanciparnos y formar una familia con nuestros propios ingresos. Estamos creando unos discapacitados sociales, sumidos en la depresión frustrante, de que a pesar de tener un trabajo, y algunos hasta dos, no son autosuficientes para tirar de una familia adelante como lo hicimos sus progenitores, y siguen dependiendo de nosotros como cuando eran niños. Eso genera una inmadurez en estos padres jóvenes, que les impide evolucionar hacia ese estatus que todos hemos soñado de, independencia familiar con la que se refuerza el yo y, hace alcanzar ciertas cotas de felicidad por objetivos cumplidos, cortar el cordón umbilical paterno, y presentarte ante él como un igual que ha seguido sus pasos.

Las estadísticas son espeluznantes. Algunos hijos con cerca de cincuenta años siguen viviendo con sus padres, lo que quiere decir, que dentro de un decenio, nuestros vástagos, se jubilarán de su trabajo – si es que lo tienen – sin haber abandonado la casa paterna. Esto si es un drama antropológico digno de estudio, y no lo de las familias monoparentales. Estamos ante la mayor mutación social desde la edad media, y el mundo civilizado asiste como mero espectador, a este drama de consecuencias imprevisibles y nada halagüeñas. Nacemos, crecemos y morimos, con un patrón de comportamiento asumido desde siglos, que ahora no nos sirve para nada. Todo ha saltado por los aires, gracias al prohibitivo precio de los alquileres, la cesta de la compra, los combustibles, los impuestos, y los sueldos más bajos que se recuerdan en tiempo de paz y democracia. La pérdida del poder adquisitivo, desgraciadamente, ya no es un eslogan de los pensionistas, es la realidad de los trabajadores con contrato. Los franceses lo han visto antes que nosotros. Debe ser porque están al otro lado de los Pirineos. Llevan meses en la calle con chalecos amarillos, o no, rebelándose contra las decisiones políticas que, hacen recaer sobre las espaldas de los de siempre, los errores de nuestros políticos, que ni negocian ni gestionan, porque carecen de la formación adecuada, y de la vocación exigible a un servidor público. Mientras sigamos permitiendo que entren en política, aquellos que gustan de salir en los medios a diario, con buen sueldo y sin ganas de trabajar por quienes los votamos, el sistema nos obligará de por vida, a sentar en noches como ésta, a un pobre a la mesa, seguido de todo su árbol genealógico. Hoy es noche, ¿qué?

martes, 17 de diciembre de 2019

ES CURIOSO

ES CURIOSO

Tito Ortiz.-

Desde hace años me llama la atención, que haya quienes incluso, se disputan la alcaldía de un ayuntamiento como el de la capital de Granada, viejo por fuera y por dentro, de flor caduca, anquilosado en el tiempo, sin futuro y en quiebra económica, hasta el punto de que es un auténtico milagro que haya dinero para pagar a su personal todos los meses. Claro que, como a ningún político le preocupa ir engrosando la deuda de préstamos e intereses, contra las arcas municipales, pues no hay más que renovar la deuda, atrasar los pagos a proveedores, y a la ciudad que le vayan dando. Ellos lo primero que hacen cuando toman posesión es, subirse los sueldos por si acaso luego, no hay para pagarse los suyos millonarios. Solo es cuestión de subir el IBI y otros impuestos y a seguir despilfarrando en ágapes, viajes y fotos, al más puro estilo patronal granadina, que no hacen más que acaparar cargos, pero la provincia no sale del hoyo. Fotos a diario, convenios hasta con la inquisición si hace falta, con tal de salir en Ideal, pero las cifras del paro están ahí, la precariedad laboral, los contratos de risa y la hostelería por los suelos, con ilustres representantes sancionados.
Es curioso que ahora, la zanahoria, sean el acelerador de partículas y la capitalidad cultural para 2031. Cualquier nadería es buena para, dar a entender que se está trabajando en algo, y así justificar unas dietas y unas ruedas de prensa. Se fue la patronal y el ayuntamiento hasta Nueva York a reivindicar la figura imborrable de Federico, y a rogar su nombramiento para la Quinta Avenida, dejando en un callejón oscuro el nombre del poeta, sobre un cartón de embalaje pintado con tiza. Aquí cuando no son pitos, son flautas. Todo con tal de fardar de poeta universal sin advertir las consecuencias de sacar pecho a destiempo. Ahora resulta que hacemos el ridículo internacional jamás sospechado, publicando una convocatoria oficialmente, cuando ésta ya está prescrita, para un premio cuestionado por su repercusión mediática, salvo a nivel local, que tiene una dotación económica prohibitiva para esta ciudad, y que para otorgarlo, habrá que pedir otro préstamo con lo que la deuda  es un suma y sigue de terror.
Es curioso que se mantenga una deuda millonaria con la empresa del transporte urbano, y que ésta nos obsequie con, la flota de autobuses más vieja de la península ibérica, a sabiendas de que eso pone en riesgo la vida de los usuarios, los peatones y los propios conductores, pero para qué se van a preocupar nuestros concejales de esas cosas, cuando ya tenemos que ir gastando un pellizco fuerte en, la elaboración de un proyecto de capitalidad cultural para 2031, que nos permitirá salir de gira y cuchipanda para ir presentándolo hasta en Villa Oreja del Sordete. ¡Por favor! No le quitemos la ilusión a nuestros munícipes, que juegan con un dinero que no es suyo, porque lo pagamos todos nosotros. Viva la vida alegre y divertida con acta de concejal en el bolsillo. Se reducen los servicios básicos y mínimos para los ciudadanos, pero la pompa y el oropel, que no falten. Son tan buenos gestores nuestros chicos de la plaza del Carmen, que hasta dejan de gestionar los millones que nos llegan de Europa. Vamos, lumbreras donde los haya. Como los encargados de derribar el bloque de santa Adela, cuyos trabajos se prolongan en el tiempo, hasta el punto de que si cobran por horas, ahí ya tenemos otro pufo.

martes, 10 de diciembre de 2019

GRETA SIN GARBO

GRETA SIN GARBO

Tito Ortiz.-

No me gustan los mesías. Es más, he comprobado a lo largo de la historia, que quién sigue a un mesías, luego se pasa dos mil años persiguiéndolo, huérfano de su conducta y dictámenes. Para mí solo hubo un mesías, y acabamos crucificándolo, así que el asunto pinta mal, porque luego hay que pagar las herencias interpretadas que nos dejan. Ahí está – sin ir más lejos- la iglesia instituida, que nos deja una casta vaticana a la que hay que mantener a lo largo de los siglos, y en muchas ocasiones, disentir de ella, incluso avergonzarte. No me gustan los mesías, ya lo he dicho al principio, sobre todo porque, muchos son falsos profetas ávidos de publicidad y vanagloria, que amparados en la masa se ven reflejados en la primera página de Ideal, y con ello alcanzan el orgasmo de su egolatría, pero no resuelven los problemas que abanderan. Espiriman en un buen ejemplo al que, cientos de incautos y afligidos razonablemente  por el mal funcionamiento de la sanidad en Granada, siguieron enarbolando incluso la bandera del insulto a sus compañeros y a los que imparten justicia. Pero no todo vale, ni siquiera ser el rey de las redes sociales. La justicia  va salpicando con su lentitud, una tras otra, sentencias en contra de una conducta inapropiada y delictiva, y lo que es peor, la sanidad ahora, ya que el doctor de urgencias y agitador social, vive sus horas más bajas, pagando sus desmanes, la sanidad, repito,  en Granada, está mucho peor que cuando él empezó sus movilizaciones. Ahora hay más motivos para echarse a la calle que cuando empezó su mesiánica cruzada que de nada nos ha valido a nosotros, y a él lo ha estigmatizado de por vida. Por eso no creo en los mesías. 
Lo de Jesús Aguirre al frente de la sanidad andaluza, es un cisma de proporciones tan incalculables, que la sociedad abominará cuando tenga conocimiento de sus mentiras y falsedades. Otros vendrán que bueno te harán. Hemos salido de Herodes para meternos en Pilatos. La máxima preocupación de los dirigentes autonómicos, es llamar al nuevo hospital de PTS “Clínico” y enterrar su verdadero nombre, que es, Alejandro Otero. De nuevo la España de camisa azul quiere reescribir la historia. Es como una venganza perpetua, contra aquellos que dieron su vida por la libertad y los que les representamos, o no queremos que su gran labor se olvide, como es el caso del doctor Otero. Por eso no me gustan los mesías, porque tras ellos sufriremos de por vida, queriendo emular sus ideas y actitudes. 
Vaya por delante que comulgo y propago antes que ella, todo lo que dice Greta Thunberg, pero estas actitudes mesiánicas a esas edades, pocas veces no causan alguna decepción. La observo en los discursos, no con el desparpajo de una adolescente convencida de su verdad, que también, pero hay una gesticulación histriónica en ella que me llevan a la confusión. Recelo de su familia – por lo que leo – dada al papel cuché al oropel y la fama en redes sociales y medios de comunicación. La fanfarria de su traslado a Europa por medio no contaminante, su retraso premeditado en incorporarse a la cumbre madrileña, corresponden a una puesta en escena muy orquestada. Echo de menos la naturalidad exigida, ante tema tan importante para el futuro de la humanidad. Deseo vehementemente equivocarme, para poder seguir confiando en ella, y ser uno más de los suyos, porque llegado ya a este momento de mi vida, y visto lo visto, yo ya no sé si soy uno de los nuestros.

martes, 3 de diciembre de 2019

HOY ES EL DÍA

HOY ES EL DÍA

Tito Ortiz.-

Desde los años cuarenta, Naciones Unidas lleva luchando por defender los derechos de las personas con discapacidad, cuyo día se celebra hoy, a modo de aldabonazo en las conciencias de nuestros políticos y de la sociedad en general, que en estos días está más pendiente de hacer las maletas para disfrutar del puente que se nos avecina, que de la realidad que nos rodea y sufrimos, sin que nadie  - al parecer – pierda el sueño. Al día de hoy, más de mil millones de personas,  aproximadamente el 15 por ciento de la población mundial, viven con algún tipo de discapacidad y el 80 por ciento es de países en desarrollo. Puede parecer una macro cifra más, pero es espeluznante – si lo piensas – la cantidad de seres humanos que viven o sobre viven con una discapacidad o varias. La discapacidad es una condición que afecta el nivel de vida de un individuo o de un grupo. El término se usa para definir una deficiencia física o mental, como la discapacidad sensorial, cognitiva o intelectual, la enfermedad mental o varios tipos de enfermedades crónicas.

Las personas con discapacidad, la "minoría más amplia del mundo", suelen tener menos oportunidades económicas, peor acceso a la educación y tasas de pobreza más altas. Eso se debe principalmente a, la falta de servicios que les puedan facilitar la vida como acceso a la información o al transporte y, porque tienen menos recursos para defender sus derechos. A estos obstáculos cotidianos se suman la discriminación social y la falta de legislación adecuada para proteger a los discapacitados, gracias a la inoperancia de esos señores y señoras a los que votamos, y que lejos de solucionar estos problemas, se acantonan y atrincheran en la defensa de sus intereses particulares, partidistas o territoriales, importándoles un comino la vida de aquellos que los hemos votado.

Las personas con discapacidad corren más peligro de ser víctimas de la violencia. Los niños  tienen cuatro veces más posibilidades de sufrir actos violentos. Los adultos 1,5 veces más posibilidades de sufrir violencia. Y los  que tienen problemas mentales, cuatro veces más posibilidades de ser víctimas de la violencia. La ignorancia es, en gran parte, responsable de la estigmatización y la discriminación que padecen las personas discapacitadas. Según Naciones Unidas, está ampliamente demostrado que, una vez eliminados los obstáculos a la integración de las personas discapacitadas, estas pueden participar activa y productivamente a la vida social y económica de sus comunidades. Por ello es necesario eliminar las barreras de la asimilación de los discapacitados a la sociedad. La accesibilidad y la inclusión de las personas con discapacidad son derechos fundamentales reconocidos por la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidades. Son las condiciones sin las cuales no pueden disfrutar de sus otros derechos. La Convención pide que las personas con discapacidad, puedan llevar una vida independiente y participar de forma activa en el desarrollo de la sociedad. Solicita a los Estados que tomen las medidas apropiadas para darles pleno acceso a la actividad cotidiana y eliminar todos los obstáculos a su integración. Si esto se proclamó a mediados de los años cuarenta del siglo pasado, y nuestro país mostró su conformidad, incluso abanderó campañas a favor de la integración de los discapacitados, ¿cómo es posible que estemos a la cola de los países desarrollados en materia de integración? Dándole vueltas he llegado a la conclusión de que, es muy posible que estemos confundidos, y que en realidad, lo que hoy se celebra es el día de nuestros políticos. ¿Tú como lo ves?

martes, 26 de noviembre de 2019

AL RASO

AL RASO

Tito Ortiz.-

La otra noche, cuando más frío hacía y agua caía, decidí hacer un experimento para poder escribir este artículo con conocimiento de causa y, no “tocar” de oído. Me abrigué hasta parecer un embozado “velazqueño”, cogí mi paraguas de doble varilla familiar, y me hice a las calles del centro, cuán antropólogo en prácticas o becario incentivado. Lo observado no me sorprendió. Portales, soportales, cajeros, bancos de parques o paradas de autobús, en cada rincón donde poder guarecerse, bajo cartones y mantas ennegrecidas por el uso y la carroña, había vida. Quiero decir, que bajo esos bultos había criaturas humanas de todas las edades y condiciones sociales, que por una razón u otra, han terminado viviendo al raso en las calles, entre otras cosas, porque no hay plazas en los albergues que la administración pone para estos casos. Y héteme aquí, que me impaciento, me arrebato y me enfurezco, porque un año más, la llegada del frío, de la lluvia y hasta de la nieve, les ha cogido por sorpresa, a esa caterva de incompetentes a los que pagamos sueldos millonarios, para que solucionen nuestros problemas, sobre todo, los de los más desfavorecidos. ¿Cómo es posible que a estos incompetentes, cada año les coja esta situación por sorpresa y como nueva? Desde que el mundo es mundo, sabemos que hay gente que no tiene un techo bajo el que cobijarse, que vive en la calle, y que los albergues no tienen plazas para todos. ¿Tan difícil es, prever la ampliación de estas instalaciones, para evitar el bochorno anual de tener seres humanos durmiendo a la intemperie?

La lista de espera para dormir en un camastro, he comprobado que llega incluso a los seis meses. Pasado ese plazo ya será verano, con lo cual podrá dormir “cómodo” en un banco de cualquier  parque, habrá muerto de frío o de hambre, o habrá sido presa de esos hijos de su madre, que les dan palizas durante la noche, les invitan a comida envenenada o para perros, o les echan gasolina por el cuerpo y les meten fuego, porque esa es la juventud que hoy estamos criando. Pero nuestros políticos de sueldos millonarios no pueden solucionar esto, porque cada año, les coge por sorpresa el hecho de ver indigentes durmiendo bajo cartones. ¡Oh! Albricias, hay un ser humano bajo el embalaje de un frigorífico. ¿Cómo es posible? Y tras su sorpresa y asombro, el político llegará a su despacho, encargará un informe, nombrará una comisión que investigue las circunstancias, y cuando los años pasen y ya tenga toda la información, él ya no estará en el cargo, el mendigo habrá muerto y el cambio climático habrá suprimido el frío y la lluvia, con lo cual, ya no hará falta que nadie haga nada, por los miles de seres humanos que cada noche duermen al raso, mientras los millonarios con actas de parlamentario o concejal, duermen a pierna suelta cada noche con calefacción en sus casas. Yo no quiero quitarles esos privilegios a los ineptos que nos desgobiernan. Lo que pido a gritos es que ni un día más haya un ser humano durmiendo al raso. Si esto se repite desde hace dos mil años, ¿hasta cuándo va a ser una sorpresa para nuestros representantes políticos? Con este panorama, no debe extrañarnos que la otra noche uno de los sin techo, agarrara un adoquín y destrozara los cristales de un par de coches, para poder dormir calentito en los calabozos de la policía. Si esto no es suficiente para hacer reaccionar a nuestros “sorprendidos” dirigentes, deberían dimitir en masa.

martes, 19 de noviembre de 2019

ILUSO

ILUSO

Tito Ortiz.-

Lo reconozco, soy fácil de ilusionar, es como si estuviera eternamente propenso a pensar que un mundo mejor es posible. Dicen – los que me conocen – que enseguida se nota cuando estoy pensando algo positivo para ésta ciudad y provincia, porque se me dibuja una sonrisa de bobalicón, y la mirada se me pierde en el horizonte, como si contemplara un espejismo en mitad del desierto. Con la belleza monumental y paisajística de Granada, si para bien de sus gentes y visitantes le añadiéramos un tren de cercanías, que con una frecuencia de minutos, enlazara la capital con los principales pueblos de la provincia, cabecera de comarcas por ejemplo, esto se parecería mucho a un paraíso en el que el crecimiento económico y turístico, haría adelgazar la abultada lista del paro que históricamente jalona los blasones provinciales granatensis. Soy consciente de  que soñar es gratis, pero hay cosas que además de dinamizar nuestra economía, se hacen imprescindibles para la explotación turística de la que tanto nos jactamos. Hablo del turismo de nieve y nuestra inigualable estación de esquí, envidia del mundo entero por su enclave privilegiado, y que lejos de ser una preocupación para el gobierno andaluz de los conservadores, solo la ven con los ojos lujuriosos de la expansión, hablando sin recato de ampliación de pistas con sus “construcciones anexas”, pero nada hablan de proyectar unos accesos en condiciones, para mejorar los que hace dos siglos ideó el Duque de san Pedro de Galatino y que, hace ya muchos años  se quedaron obsoletos. Pero hay algo más sangrante aún, y que un día nos puede dar un disgusto serio ante la comunidad internacional, sin que se pueda descartar el coste de vidas humanas. Estamos a punto de inaugurar una próxima temporada de esquí, y la estación carece –desde su fundación – de un Parque de Bomberos propio. Y los incendios se producen, afortunadamente hasta ahora, sin víctimas, solo daños materiales y de vez en cuando, pero puede que la suerte un día nos dé la espalda, y tengamos que lamentar una tragedia en Sierra Nevada, mientras suben los bomberos de la capital, por una carretera infernal y lógicamente nevada. Pero yo cierro los ojos, veo a las autoridades cortando la cinta de ese parque de bomberos a la entrada de Prado Llano, y sonrío como el niño Jesús de un portal de Belén. Llámame iluso, pero no pierdo la esperanza de que un buen día, los turistas que nos visitan, no sean asaltados  en los alrededores de las Catedral, por personas que les ofrecen un ramito de romero, les leen la “guenaventura” en la mano, o intentan limpiarle los zapatos, aunque el guiri vaya en sandalias o deportivas. Yo, como David Vincent… los he visto.
Y hablando de ver, lo que me gustaría que desapareciera de mi vista y del resto de la humanidad, es esa inadmisible cantidad de cables, ya sean de telefonía, electricidad, señal de televisión y las correspondientes antenas, que en barrios tan emblemáticos como el Sacromonte y el Albayzín, no solo afean la visión de un paisaje natural y artístico único en el mundo, sino que constituyen un peligro máximo para las criaturas humanas y los animalillos del cielo y la tierra. Me consta que hay más de un proyecto muy adecuado, para que estos cables desaparezcan de nuestra visión, y nos protejan de posibles accidentes, lo que no hay, de una vez por todas, es voluntad política para llevar a cabo estos proyectos, ni fuerza moral para obligar a las empresas, que cobran suministros, sin dar servicios. Yo… ahí lo dejo.

martes, 12 de noviembre de 2019

LA ZANAHORIA

LA ZANAHORIA

Tito Ortiz.-

Una provincia desencantada, indolente, resignada y depresiva – como esta – es lógico que habiéndose dejado llevar por la incompetencia de sus políticos, no espere nada de un porvenir incierto, plagado de dudas y de farsantes. Nuestra clase política es tan previsible, que de vez en cuando, para que no caigamos en el suicidio colectivo, a modo de la zanahoria que se le pone al burro delante para que camine, a nosotros nos hablan de grandes proyectos con los que seremos más ricos y felices, aunque nuestro poder adquisitivo sea cada vez menor, y la vida de mis nietos, mucho peor que la mía, con diferencia. Votes al que votes, aquí da lo mismo. A final de mes las penurias son las mismas, las estrecheces cada vez más alargadas, las hambres más enquistadas y la pobreza más infinita. En solo cuarenta años han hecho de nosotros, un pueblo sin alegría, sin futuro y, con un presente penoso, que nos aboca a la indigencia física, moral y social. Somos  damnificados de una clase dirigente, nacida para enriquecerse con nuestra pobreza. Es una perversión del sistema, que nos ha llevado hasta aquí, para abandonarnos a nuestra suerte, esa que ya está echada.
Pero viendo nuestros próceres el estado tan lamentable en el que nos encontramos, y temiéndose que no lleguemos vivos a unas próximas elecciones para votarlos – que es lo único que les interesa – nos hablan de grandes proyectos ilusionantes como dicen ellos, y vuelven a desempolvar ideas necesarias pero que nadie acomete cuando está en el gobierno. Todo lo más, lo demandan cuando están en la oposición, por ejemplo: Siglos llevan hablando del tren a Motril, un asunto que como el papel, todo lo aguanta, y que por más años que pasen, resulta atractivo y beneficioso. Si se llevara a cabo, claro. Resulta desternillante, que quienes vaticinaron el fracaso estrepitoso del metro de Granada, viendo su craso error, ahora apuesten por su ampliación urgente, vendiéndonos quincenalmente tan loable iniciativa. El asunto de los teleféricos siempre es muy recurrente. Los proyectan con gran facilidad, ya sea del Sacromonte a la Alhambra, o desde el Parque de Las Ciencias a Sierra Nevada, el caso es engatusarnos con lo que sea. Somos tan inocentes, que hasta los creemos cuando desde hace decenios nos hablan de construirnos un gran espacio escénico, en el que representar Aída de Verdi con ejércitos y cuadrigas sobre el descomunal escenario, el más grande de todas las Españas. Nos prometen desde hace tiempo, una bellísima escalera mecánica que desde la calle de Elvira nos suba al Albayzín, y nosotros nos lo creemos. Igual que cuando nos prometen una circunvalación completa, de anillo cerrado como en el resto del mundo, menos aquí, claro. El taxi metropolitano de tarifa y servicio unificado, sin cambiarla cuando llegan a Carrefour, lo prometió en el siglo pasado un político que ha muerto de viejo. Lo mismo que el AVE de doble vía y soterrado. Prometer es tan barato, y como luego nadie pide responsabilidades de lo prometido y no cumplido, mentirle al ciudadano sale gratis. En esta provincia en la que el paro no desciende nunca, sino que aumenta cada mes, en la que existen negocios de restauración con decenas de empleados sin dar de alta en la seguridad social, que trabajan catorce horas diarias y las cobran a euro, o sea, que están de esclavos en un país civilizado y democrático que cree en los derechos de los trabajadores, ponemos el grito en el cielo cuando en países del tercer mundo, niños y mujeres trabajan por una comida al día y duermen en el suelo. Yo lo que quiero es que Pitres sea puerto de mar. 

martes, 5 de noviembre de 2019

AMAZONÍA, ORA PRO NOBIS

AMAZONÍA, ORA PRO NOBIS

Tito Ortiz.-

Se han reunido los que de esto saben, y por fin se han dado cuenta de que, lo de la crisis de vocaciones en la iglesia católica, apostólica y romana va en serio, como la vida. Yo que viví el Concilio Vaticano segundo, y la luz que salió de aquellas reflexiones, sufrí tras la muerte de Juan XXIII, el apagón paulatino de aquella luz de liberación y puesta al día de la iglesia instituida, que los que le sucedieron en la silla gestatoria y sus allegados, se encargaron en dejar en agua de borrajas, llevando a cabo una regresión a las cavernas de la iglesia más añeja y casposa que se recuerde, desde los Borgia hasta nuestros días. Juan Pablo I, que iba en la línea de la puesta al día, murió convenientemente, y Francisco se deja el pellejo para actualizar a una clase dirigente del Vaticano, que no quiere perder prebendas, y sobre todo, desea que los cristianos de a pie, seamos dóciles, maleables y manejables, cuán indígenas conversos. De nada sirve que a las puertas de la basílica de san Pedro, se agolpen cristianos pregonando a los cuatro vientos, que la institución necesita una actualización y puesta al día, pero sobre todo, es de suma urgencia, llevarla a sus inicios, cuando Jesucristo eligió a sus apóstoles y, emprendió la tarea de evangelizar otras tierras y otros universos, desde la normalidad de personas de su época y extracción social, acorde con la sociedad de la época.
Lo del celibato, es un invento posterior, que nada tiene que ver con la doctrina de Cristo, ni con lo que él predicó. Y ahí radica la mayor parte del retraso de su iglesia, que se ha dejado ganar la batalla por otras religiones, que en el aspecto social y familiar  de sus representantes, están mucho más actualizadas sus figuras, restando importancia al hecho de que un ministro de la iglesia esté casado, viva con sus padres, o comparta piso con su loro frasquito. Lo que importa de ese representante de la iglesia, es que sea un buen ejemplo para sus feligreses, un hombre de Dios que haga el bien y trabaje por sus parroquianos. ¿Con quién se acueste, a cuantos niños mantenga, o cuantos gatos tenga en casa? No debe importarle a nadie, y menos a los componentes del Sínodo. El celibato debe ser elegido libremente por el representante de la iglesia, pero no impuesto por razones que hoy día no se sustentan, si no abordamos la cerrazón de unos postulados, a los que nadie en su sano juicio puede recurrir, para justificar una vida equivocada. Asunto distinto es que el eclesiástico elija libremente el celibato. De ser así, debe ser admirado por su sacrificio añadido, a una vocación que no es nada fácil llevar a la práctica con dignidad y coherencia.

Ser sacerdote no es una cuestión baladí. Por eso se debe dejar en libertad de elección, a quienes deseen entregar su vida a los demás. Según las últimas noticias, parece que la necesidad de sacerdotes es tan acuciante, que la iglesia de Roma va a permitir curas casados en El Amazonas. Quiero recordar aquí, que la mayoría de los apóstoles elegidos por Jesús, eran hombres casados con mujer e hijos, y que eso no les impidió llevar a cabo su labor evangelizadora por todo el mundo. Pero los señores mitrados deberían ser valientes de una vez, y permitir a la mujer ser ordenada sacerdote. A lo mejor así ya no tenían tanta escasez de vocaciones. La iglesia de Jesús, no puede ser machista de por vida. Él no lo era.

martes, 29 de octubre de 2019

UNA PESADILLA

UNA PESADILLA

Tito Ortiz.-

Hace meses que no duermo bien. Me despierto a media noche empapado en sudor, temblando, y rogándole a mi sargento que no me arreste por llegar tarde al toque de diana. Si tenemos en cuenta que me licencié del servicio militar obligatorio, el 3 de julio de 1973, comprobarán que el asunto es grave. Tengo lo que mi psiquiatra interpreta como, sueños recurrentes. O sea, que se repiten todas las noches, impidiéndome el descanso, por lo que mi familia ya no da por mí ni diez reales. En mis sueños veo a Pedro Piqueras,  diciendo en su informativo de noche, que el presidente de la Generalidad de Cataluña, arenga a sus huestes para que aprieten las tuercas a los españoles, y estos le hacen caso. Incendian todo tipo de mobiliario urbano, dejando el centro de Barcelona como si de una ciudad en guerra se tratara. Asaltan comercios robando televisores que yo no podré comprarme nunca. Patinetes eléctricos, Tablet, y teléfonos de última generación, ropa cara y complementos, dejando a las claras, las firmes convicciones de su pensamiento político y la idea de su independencia, de un país que lleva siglos permitiéndoles a los catalanes, prebendas y privilegios, que históricamente se nos han negado a los andaluces, hasta el punto de que cientos de miles tuvimos que emigrar allí para poder vivir y mantener a los nuestros.
Me despierto a las tres de la madrugada dando gritos de terror, creyéndome que faltan solo un par de días para que comience otra campaña electoral, que sembrará el odio y la desesperanza en una sociedad hastiada de sus representantes políticos, a no ser que seas votante de Vox, a los que se les permiten discursos y actitudes que van contra los derechos humanos, las libertades que tanto nos han costado conseguir, y que tienen su caldo de cultivo en el desengaño de un pueblo asqueado, que observa con horror, como los niños van a estudiar la caza de animales en las escuelas, mientras la derechita cobarde los mima con tal de gobernar una comunidad, que cada vez se hunde más en la desesperanza. Andalucía no se merece esta involución que lleva tintes de correajes, botas acharoladas y paso de la oca. Esta es una tierra milenaria, jalonada por Séneca, Maimónides, Yehudá Ibn Tibón, Machado o Lorca, cuya historia y cultura, no merecen patanes analfabetos al mando.
 Jadeo, me falta la respiración, la pesadilla no cesa. Hasta qué punto estaré mal de la cabeza, que sueño con un helicóptero sacando a Franco del Valle de Los Caídos, y que el golpista Tejero asiste al traslado, mientras su hijo cura y el prior de la basílica, desobedecen al mismísimo Papa de Roma, que ya ha dejado clara – como el caldo de un asilo – la postura de la iglesia en éste caso. Tengo la sensación de estar  viviendo un acto humorístico, un entremés de la época, tal vez un vodevil, o una zarzuela costumbrista. La España del tópico y la pandereta, han estado 44 años escondida en la basílica, y el próximo 10 de noviembre es posible que  a eso de las diez de la noche, acabemos todos llorando por un país que pudo ser, pero que no llegó a serlo. Necesitamos un gobierno, que asuma cuanto antes la crisis económica a la que estamos abocados, como toda Europa, gracias a China y EE.UU. Me despierto arañándome la cara, muerto de miedo, porque mi país se va a la mier..., mientras el asesino de Federico García Lorca, descansa en paz a los pies de La Macarena.

martes, 22 de octubre de 2019

DE OFICIO

DE OFICIO

Tito Ortiz.-

Que a estas horas del día, la fiscalía de violencia de género no haya encarcelado aún a Kiko Matamoros y Rafa Mora por, misóginos, violentos verbales, gesticulación gorilesca, y abuso de apariencia física superior, para acallar, amedrentar, humillar y ofender a las mujeres, no hace más que poner en evidencia, que lo de la justicia en este país, no es solo que, sea lenta, sino que en efecto, es muy posible que sea ciega, y lo que es peor, hasta sorda. De todas formas, yo recuerdo que en España,  nada impide a un fiscal actuar de oficio, es más, somos muchos los ciudadanos que echamos de menos esa práctica legal y tan necesaria, por la que la justicia no tiene que esperar a que nadie denuncie, cuando se trata de algo público y flagrante. Si lo hacen porque no tienen pruebas, les recuerdo a sus señorías que, desde  hace años existe una cosa llamada, “televisión a la carta”, donde encontrarán razones más que suficientes para atajar esta ignominia pública contra las mujeres, que llevan a cabo en la televisión individuos como los arriba mencionados, todos los días de lunes a viernes en horario protegido, sin que nadie mueva un dedo, para proteger a la población de personajes tan nocivos como estos, que además con su ejemplo, están dictando patrones de conducta asociales e incívicos,  a una juventud que al verlos tantas horas al día en la tele, los toman por un ejemplo a seguir.
El daño que programas como Gran Hermano, en todas sus versiones, o Supervivientes, están haciendo en la juventud de instituto y universidad, mostrando que abandonando estudios, siendo analfabeto y procaz, ganas miles de euros a la semana, con el solo hecho de sentarte en un plató y contar tu vida amorosa, ya estamos empezando a pagarlo, con la aparición de muñecos rotos, que en su momento pasaron por estos programas, y al no estar preparados, quedaron deslumbrados por los focos, la popularidad y la cuantía económica de sus colaboraciones, y hoy viven de los bancos de alimentos, pidiendo ayuda a Stop Desahucios. Si es estando preparados y con toda una carrera brillante a sus espaldas, y la vida te lo pone difícil,  si no que, se lo pregunten a las Campos. Cuanto más difícil será aguantar el chaparrón, cuando por toda formación y bagaje profesional, solo aportas tus ligues y borracheras. La caída en el pozo del ostracismo es la crónica de una muerte anunciada.
Mujeres maltratadas, mujeres engañadas y mujeres difamadas, se sientan cada tarde como colaboradoras de élite, a contar sus penas y las de los demás, con el solo aval de su amarga experiencia y nula formación, enviando un mensaje a la sociedad permeable, que no se ajusta a la realidad de lo que se vive fuera de la pequeña pantalla, con sueldos de locura y chófer en la puerta. Cualquier analfabeto de estos que vemos dogmatizar desde el púlpito de la ignorancia cada tarde, cobra más que el ingeniero jefe de la NASA, o que nuestro Presidente del Gobierno, y eso es una perversión de la sociedad de nuestro tiempo, que envía un mensaje directo a nuestra juventud, cada tarde, noche y madrugada, en el que se le está diciendo, que no estudie, que no se prepare, que no trabaje, que se convierta en un mal ejemplo promiscuo, y tendrá asegurado un sueldo durante años, que no obtendría si estudiara tres licenciaturas y trabajara doce horas diarias. ¡Juventud de todas las Españas! No estudiéis, no trabajéis, poneos ligeritos de ropa y cascos, a las puertas de Sálvame. Triunfaréis.

martes, 15 de octubre de 2019

MORDERSE LA LENGUA

MORDERSE LA LENGUA

Tito Ortiz.-

Que nadie te engañe. La única ventaja que tiene estar más cerca de los setenta que, de los sesenta, son los viajes del IMSERSO, los descuentos de la agencia del Corte Inglés, y que algún adolescente de los pocos que quedan educados, te ceda el asiento en el bus o en el metro. Lo demás todo son desventajas y deterioros varios. Sirva como ejemplo algo tan pueril como morderse la lengua. Y no hablo de callar ante una felonía más de nuestros políticos, sino de ese momento inesperado y sorpresivo,  en el que los dientes aprisionan la lengua por sorpresa y, soltamos un ramillete de blasfemias, mientras por unos minutos, somos incapaces de articular una palabra medianamente  entendible, como si la lengua se convirtiera en una alpargata de paño viejo dentro de la boca. Durante nuestra juventud o adolescencia, cuando te mordías la lengua, en décimas de segundos una reacomo cción de tu cerebro se ponía en marcha, de tal forma que los dientes no llegaban a aprisionarla del todo, y como un resorte, el maxilar se soltaba para no dañar al órgano responsable de tantas cosas entre otras, la palabra. Ahora cuando te la muerdes, los reflejos son tan lentos, que te das cuenta cuando notas el sabor de la sangre en la boca, y el dolor insoportable invade todo tu cuerpo, hasta el punto de, hacerte temblar las piernas y buscar algo para sentarte. Un disparate si tenemos en cuenta que, lo que te duele a rabiar es la lengua y no el culete. ¿Por qué a los viejos, cada vez que nos pasa algo, siempre hay un buen samaritano con la puñetera manía de sentarnos donde sea, si a lo mejor lo que nos ha pasado es que se nos ha quedado encajada una ceja, a lo Carlos Sobera? Morderse la lengua sin querer al masticar un chicle o un pistacho, no es un accidente. Es un castigo divino por algo malo que has hecho en esta vida, y que - según mi abuela – tienes que pagar antes de irte de ella, porque lo del purgatorio y el infierno no se ajusta a la realidad, vamos que no existen. De aquí se va uno limpio como la patena.

Siempre me ha llamado la atención la habilidad de la lengua para zafarse de las acometidas de los dientes, ya sea durante la masticación o la oralidad, y librarse así de los mordiscos. Esa perfecta capacidad de retracción, para mantenerse a salvo y así no sufrir las acometidas de los incisivos y los caninos, es propia de un órgano inteligente y perfectamente engranado para salir indemne de dos acciones que, el cerebro lleva a cabo con rapidez inusitada y de la que en pocas ocasiones somos conscientes. De esta manera es fácil comprender, como políticos de tres al cuarto, que son la mayoría de los que nos representan, cada vez dan peor imagen de la correcta utilización de la lengua. Para empezar, la mayor parte no saben valorar la importancia de un silencio a tiempo, que sin duda es una victoria. Un buen porcentaje de sus señorías, no tienen la formación mínima exigida para ejercer sus funciones, de ahí que sea fácil descubrir sus carencias, porque por la boca muere el pez. Castos oídos y ciudadanos juiciosos, valoraríamos mucho si gran parte de nuestros políticos se mordieran la lengua, antes de hacer el ridículo nacional, ya sea en un telediario o en el hemiciclo. Estamos de nuevo en campaña, y estoy seguro que a lo largo de las próximas semanas, nuestros políticos nos darán, razones más que suficientes para que se hubieran mordido la lengua. Que pena de nivel.

miércoles, 9 de octubre de 2019

AMAR ES PARA SIEMPRE

AMAR ES PARA SIEMPRE

Tito Ortiz.-

Los tiempos cambian, las gentes también, y cada día se nos exige más, a los que pretendemos ejercer en cualquier actividad. Antes a un médico le bastaba con ser licenciado en medicina y cirugía para, tener una carrera brillante y un reconocido prestigio. Hoy, salir de la Facultad con la carrera terminada, no significa más que a partir de ese momento, empieza tu formación continuada, tu especialización, y que te faltan otros cuatro años para que te hagan caso, si es que no te piden tres o cuatro másteres, para comenzar a andar por el mundo como un profesional. La gente está más preparada, pero algunos comienzan a saborear las miles del triunfo laboral, cuando ya comienzan los primeros achaques de salud, o cuando los años cotizados no serán suficientes para jubilarte, a no ser que te reenganches otros diez más. El futuro no es que sea negro, es que es negro oscuro.
Y todo esto ocurre, si has tenido suerte y no te has quedado en la cuneta, como ese cuarenta por ciento de jóvenes españoles que, más tarde o más temprano, han sucumbido engrosando las listas del fracaso escolar, que nuestro país lidera en el viejo continente. La verdadera asignatura pendiente de nuestra cuarentona democracia, es que los cambios de planes de estudio en este tiempo, han sido tan frecuentes y disparatados, que el reguero de fracasos cosechados en cualquiera de sus ciclos, bastarían para poner en las filas del paro, a tantos políticos incompetentes de todo signo, que han hecho de nuestros planes de estudios, experimentos con criaturas humanas en edad de formación, que les han llevado a aborrecer el normal aprendizaje en edades tan tempranas, con un sistema necio e incapaz de recuperarlos para la educación y la formación, con la anuencia de algunas individualidades del profesorado, sobre todo en la enseñanza secundaria, donde algunos frustrados que no llegaron a ser profesores de universidad, se quedaron en los institutos para hacer pagar en la piel de algunos alumnos, la ignominia de su fracaso como docentes. La formación profesional, ni es la salida a un error del sistema, ni puede ocultar la falta de vocación, cuando el futuro que se les promete desde la infancia, es el de la igualdad de oportunidades y la llegada a la universidad con matrícula gratuita. El cementerio de fracasos es enorme y, sigue creciendo como una maldición bíblica. 
Por eso me fascina que personas adultas a las que el sistema educativo, profesional o económico, no les permitió en su día la entrada  a la universidad, o lo que es lo mismo, a la formación en las aulas del saber eterno educativo, mantengan la vocación y la pasión del saber, aprender, mejorar y refrescar sus conocimientos, desde la serenidad de los trienios, y el ansia del querer saber, intacta. Mientras la mente esté despierta, y la curiosidad se asome diariamente a la ventana del conocimiento, la fe en el ser humano y su capacidad de formación, serán eternas. Ahora que tanto se echa de menos en los planes de estudios, las humanidades que han ido desapareciendo de la formación reglada, es el momento de reconocer que, en este otro ateneo, la ciencia y las artes se dan la cita con el calor humano que, impregna la propia filosofía de la actividad, para hacer de la divulgación del conocimiento en todos sus ámbitos, un ágora de libertad y formación, cuyo emblema condecorado, son las canas en sus sabias cabezas de eternos estudiantes.

martes, 8 de octubre de 2019

PASA LA CABRA

PASA LA CABRA

Tito Ortiz.-

Que los responsables de Tele cinco hayan dado lugar a que, los tribunales les paralicen su programa estrella de la cultura, es como para garantizarle una larga estancia en las colas del paro, a la cabeza responsable de tal desaguisado. Porque no solo es grave que, de la noche a la mañana y sin previo aviso, los espectadores nos quedemos sin nuestro programa estrella Pasa Palabra. Lo que de verdad es grave, catastrófico y denigrante, es que por este error de algún sesudo directivo, el espacio de la ordinariez, la bazofia y el machismo insultante, se prolongue una hora más, como si no tuviéramos bastante con cuatro diarias soportando a Rafa, del que me parece inexplicable que la fiscalía de violencia de género, no haya actuado ya de oficio contra semejante semoviente. O la pescadera Esteban, que al carecer de argumentos para intervenir, lanza su opinión a gritos sobre los demás, en una demostración flagrante de su exquisita educación victoriana. Todavía estoy esperando que alguien me explique con argumentos, en que se diferencia la mayoría de las tardes, el paso de Sálvame Limón a Sálvame Naranja, y cuál es el papel que juega tanto advenedizo, que descarriado de la vida, ha hecho de ella, un escaparate para vivir de contar sus miserias ante la pequeña pantalla. 

En la lucha por las audiencias, señores de Mediaset, no todo vale, y lo peor del caso es que programas como éste sobreviven, en la época en la que más estamentos defensores del espectador existen, con sueldos opíparos para sus componentes, pero de nula incidencia en la sociedad que les paga, y como muestra pongo el Consejo Audiovisual de Andalucía. La verdulería lingüística y argumental de Sálvame, la soportábamos porque después teníamos la oportunidad de presenciar un programa concurso, cuyos valores y méritos nos hacían olvidar la indecencia cultural y educativa de las cuatro horas anteriores, pero ahora, ¿Qué va a ser de nosotros, si además de quitar Pasa Palabra, nos martirizan alargando el bodrio de Sálvame hasta la hora de ver a Piqueras? La telebasura a la que me refiero, está teniendo su continuación los sábados y domingos, puesto que el programa Viva La Vida, que comenzó Toñi Moreno con acierto, desde hace unos meses se ha convertido en, “Sálvame 2”, donde un tal José Antonio, más femenino que la Esteban, y con voz de pescadera en la romanilla, posiciona sus argumentos sobre todos los contertulios, con los modales, la educación y la excelencia, con los que un perro rabioso, acomete a un aizkolari en plena faena de talar. Una compañera de mandíbula desencajada, bracea dogmatizando, desde sus referencias políticas conservadoras, y un paparazzi venido a menos, pretende convertirse en el personaje de, Risto Mejide, pero sin llegarle a la altura de los zapatos, de ahí tal vez lo que le deberían decir a este calvo de gafitas de colores, zapatero… a tus zapatos.

No soporto la ausencia de Pasa Palabra, que habitualmente veo con mi madre de ochenta y cinco años y mi nieto de seis, y con cuyas aportaciones y preguntas me enriquezco todas las tardes. Pido que el responsable de la cadena que nos ha metido en este lío, sea azotado en plaza pública, y corra de su bolsillo y responsabilidad, la vuelta inmediata a la parrilla de Pasa La Cabra, como familiarmente se le llama al programa en mi casa. Pese a la sentencia de los tribunales, sospecho que se trata de un tema económico, así que acoquinando cuanto antes, y por favor, lo suplico, nada de alargar el programa anterior. Ya está bien de sufrimiento.

martes, 1 de octubre de 2019

ESTO ES “PA” MORIRSE

ESTO ES “PA” MORIRSE

Tito Ortiz.-

Que las nuevas elecciones generales sean en el mes de los santos, de todos los santos, diría un presbítero granatensis de los años sesenta, no es por casualidad. El asunto arrastra su marramo desde hace tiempo. Llevamos sin gobierno estable, el mismo que los socialistas intentan sacar al dictador del valle de los caídos. Y cuando los asuntos domésticos arrastran un muerto de esta prestancia, paréceme que dios mira para otro lado, con cierta sorna, como esperando que se líe entre partidarios y detractores. Es tiempo de contradicciones, de efectos pendulares, de mantener la verdad y lo contrario en el mismo discurso, tratando como lerdos a los ciudadanos, que asistimos al gran teatro de la mentira política, asombrados, desengañados, deprimidos y cabreados. Haced lo que yo diga, pero no lo que yo haga, es un viejo adagio, que en política hispana se ha hecho viral – como dicen los modernos – permitiendo que la desvergüenza campe por sus respetos, sin ruborizarse. Pero la derecha” facistoide”, es así. Cuando de niño veía en el NODO entrar a Franco bajo palio en los templos siendo recibido a las puertas sagradas, por obispos y cardenales mitrados, me preguntaba como un genocida, podía abrazar la religión de mi Cristo, cuya misión en la tierra fue luchar contra todo lo que aquel general bajito de El Ferrol representaba. Y menos aún comprendía, que la máxima autoridad de esa religión, recibiera con todos los honores e inciensos en la casa de dios, a quién nunca le tembló el pulso para firmar fusilamientos. Que los fachas hayan tenido abrazada la fe católica, y que la iglesia instituida los haya protegido y ensalzado, es algo que estoy deseando poder preguntarle a Pío XII, en cuanto me lo eche a la cara. El año que él fue elegido Papa, Franco logró la victoria de su golpe de estado. La divina providencia le puso en la mano a su santidad, la oportunidad de posicionarse junto a los débiles y vencidos, pero no lo hizo. Con Hítler y Mussolini le pasó igual. El santo padre se puso de perfil, pero no dudó en cuanto acabó la segunda guerra mundial en posicionarse claramente. El Santo Oficio condenó el comunismo marxista (1 de julio de 1949) y amenazó de excomunión a sus seguidores. En la misma línea acorde con los tiempos (aún lejano el Concilio Vaticano II), Pío XII insistió en el deber de los cristianos de dar su voto a personas de segura fe católica (discurso del 10 de marzo de 1950). Con precedentes como estos, no debe extrañarnos que un viejo abad del Valle de los Caídos, haya plasmado en un informe, que los que construyeron la fortaleza victoriosa, lo hicieron voluntariamente y cobrando un buen sueldo. Después de este argumento, sorprende que nadie le pusiera una camisa de fuerza, pero esta democracia es así. A veces es tonta, pero deja resquicios para los que no siendo demócratas, la puedan utilizar en su favor. Clama al cielo que el abogado de los Franco, ante el fallo por unanimidad de la justicia, y representando a quienes nunca han creído en la democracia, ni mucho menos en la Constitución, afirme a cámara sin pestañear que va a recurrir el traslado de los restos, al Tribunal Constitucional. Es para desternillarse. Pero además, el lince, con rostro de cemento armado, mantiene que si el Constitucional no les da la razón, recurrirán al alto tribunal europeo de los Derechos Humanos, como si Franco y toda su familia, fueran defensores a ultranza de esos derechos que, el dictador masacró con botas y espuelas. Una mano negra, está reescribiendo la historia.

martes, 24 de septiembre de 2019

SI ME HICIERAIS CASO…

SI ME HICIERAIS CASO…

Tito Ortiz.-

Consciente de que vivo – siendo muy optimista – el último tercio de mi vida, y antes de comenzar a barbear las tablas, presa del Alzheimer, quiero dejar constancia escrita de ciertas verdades, ya avaladas por una apreciable experiencia, que me permite reconocer desde lejos, quién es un político vocacional con el propósito de servir a los ciudadanos, y quién con el rostro de cemento armado, se ha metido a esto para trincar lo que pueda, sin importarle ideología, deontología, honradez, formación o valía para desempeñar cargo público. Yo lo aviso: De los primeros quedan pocos, cada vez menos. Un político a la democracia española, es como el dedo pequeño del pie al cuerpo humano. Tengo la certeza refrendada por mis canas, que el sumo hacedor puso el dedo pequeño del pie, con la sola misión en la vida, de que éste tropezara eternamente con las patas de todo tipo de muebles, especialmente mesas bajas de salón, armarios esquineros, butacas irreflexivas y comodines de pecho paloma, de tal forma, que con tan sencillo gesto, tendría en sus manos la oportunidad de por vida, de castigarnos de manera inmisericorde, porque a nadie se le escapan las loas y alabanzas al altísimo que, todo ser humano suele soltar en cuanto tropieza con el dedo pequeño, sobre todo en verano cuando llevas chanclas. 
Heme aquí, que no tengo mejor ejemplo para explicar lo que es un político de esta nueva hornada de incompetentes, que luciendo acta de diputado en la solapa, llevan cinco meses comiendo del erario público, a costa de nuestros bolsillos. Y además han tenido los santos bemoles de irse de vacaciones pagadas, para volver sin propósito de enmienda. O sea, anteponiendo sus intereses personales y partidistas, a los de todos los españoles. ¿Cabe mayor desvergüenza? Me pregunto hasta cuando debemos seguir permitiendo a esta panda de indocumentados, que sigan comiendo de lujo a nuestra costa, llamándonos a las urnas cuando les parece, con un coste de 180 millones de euros cada vez que a sus señorías, no les cuadra ponerse de acuerdo para gobernar. Sobran las diputaciones, sobra el senado, sobran asesores y puestos de confianza a dedo, sobran dietas injustificables, también sobran las asignaciones a los partidos con representación parlamentaria, sobran las subvenciones a los sindicatos, y los liberados sindicales. Si alguien quiere representar a los compañeros, que lo haga desde su puesto de trabajo. Hay tanto desaprensivo chupando de la teta, que alguno se va a quedar con la ubre en la mano. La vaca no da para más y, el descontento de la población con millones de parados sigue en aumento. La ineptitud de la clase política y su desfachatez trincona, están propiciando la incubación de un mesías, que tarde o temprano aparecerá, y entonces nos echaremos las manos a la cabeza, al comprobar lo que hemos permitido en nombre de la democracia y sus resquicios sin honor. El sistema democrático necesita de ciudadanos que, velen y vigilen la trazabilidad de los comportamientos, para salvaguardar la protección y servicio a la ciudadanía. En los últimos cuarenta años, hemos sido muy ingenuos, permitiendo entrar en el juego político, a quienes solo vienen a servirse del sistema, y no tienen otra Patria ni otro dios que no sea su cuenta bancaria, en Andorra o Suiza, me da igual. En el mes de los santos volvemos a las urnas, como si fuéramos los ciudadanos los que hemos suspendido el curso. Que nadie nos engañe. Están metiendo la mano en el cajón con un nuevo gasto electoral. Luego pondrán el grito en el cielo cuando escuchen… ¡A las barricadas, a las…. 

martes, 17 de septiembre de 2019

“CANINOTANATOSALA”

“CANINOTANATOSALA”

Tito Ortiz.-

Esto de cuidar a las mascotas se nos ha ido de las manos. Cuando yo era niño, los perros comían las sobras de casa y algún mendrugo. Ayer en una gran superficie, buscando un abrelatas – porque cada vez que me voy de excursión, me acuerdo de todo el árbol genealógico del que, inventó el “abrefácil” en todas sus facetas y vertientes – dieron mis ojos con metros y metros de estanterías, repartidas en varios pasillos, donde se exponía la colección más variada de comida para perros. Desde piensos para distintas edades, a latitas de multitud de sabores, sin sal, light, total que echando un vistazo por encima, calculé que había más variedad de comida para perros, que para celiacos en tiendas especializadas, lo que me pareció una aberración, porque no es normal que haya humanos que tratan mejor a sus perros que a sus congéneres. 
He visto reportajes en la tele de, pasarelas de moda con vestidos de alta costura para perros, con collares de piedras preciosas. Hoteles para canes con suites de lujo, en las que se incluyen masajes por especialistas perrunos, preparación al hecho amatorio, noviazgo en sus dos variedades de lento tradicional, o flechazo. Y boda por todo lo alto, con dos opciones: Ordinaria estilo Belén Esteban, en la que se incluyen interrupciones a voces, pregonando el pescado, y la aristocrática, más en la línea de Sergio Ramos, que lleva de serie modelos horteras para ellos, que evidencien la escasez de educación, cultura y reglas de urbanidad en los contrayentes, familiares y amigos. 
Que hay humanos que quieren más a sus perros que a los de su raza, lo demuestran personas como, Pasquale Rizzo, que falleció en 2014, dejándole una fortuna a su perro Tor, de más de siete millones de euros. Había que ver la cara del chucho, sentado frente al notario cuando leyeron el testamento. Carlotta Liebenstein era una condesa alemana. La mujer,  decidió dejar toda su herencia de 80 millones de dólares a su perro Gunther. Quizás guiada por la experiencia de, Thomas Martínez  que vivía en la calle, en Santa Cruz (Bolivia). Un día, la policía decidió acercarse a Thomas mientras dormía en un banco, para decirle que su antigua esposa (de la cual se divorció unos años antes) le había dejado 6 millones de dólares. Thomas pensó que la policía le quería detener y huyó. Los periódicos se hicieron eco de la noticia y trataron de encontrar a Thomas. Pero lo más curioso es que el paradero del millonario sigue siendo aún desconocido. 
Ante humanos que huyen de las fortunas que les son concedidas, es lógico que la gente ahora opte por enriquecer a sus perros, porque entre otras cosas, no tienen oportunidad de huir. Y esto es un nicho de negocio que las funerarias perrunas han descubierto como agua de mayo. Ayer palmó el perro de mi compadre, y cuando avisó a los servicios del ayuntamiento, al instante se personaron en la casa, dos individuos embutidos en sendos trajes negros y chistera en mano, que le ofrecieron la oportunidad de tanatosala velatorio, maquillaje, caja de roble, o de cartón para incinerar – según gustos -  más la posibilidad de taxidermia, para inmortalizarlo en el salón junto a la chimenea. Panteón perruno en el cementerio canino, o bien incineración, con la posibilidad de convertir parte de sus cenizas, en un diamante para colgar del cuello o ensortijar. Nicho o columbario, con lápida de mármol labrada por los hermanos Romero, a lo que mi compadre ha dicho que, prefiere que lo envuelvan en plástico y, envasándolo al vació, se lo envíen  a su exmujer. Afín de cuentas, ella siempre dijo que quería más al perro.

martes, 10 de septiembre de 2019

NO ESTUVE SOLO

Patio de la redacción del Diario Patria en la Calle Oficios. Final de la década de los años setenta del siglo pasado. José Luís Navajas, actual capataz de La Virgen de La Aurora, es entrevistado por Tito Ortiz.-

NO ESTUVE SOLO

Tito Ortiz.-

Este sábado pasado, a la caída de la tarde, se echó La Aurora a la calle, porque sabido es que, como reina y señora del Albayzín, La virgen de La Aurora puede salir cuando quiera y, a contramano.  Salió de san Miguel y no encaró para san José, así que muchos dijeron: ¿pero dónde va?, ignorando que la reina y señora albaycinera, deseaba mirar su Granada, desde el pretil del Carmen de Fermín Garrido, el médico que se nos fue tan joven, y que además, quería darle la oportunidad al gran Pepe Cañas, el mejor pintor realista de la casa de La Lona, de que le hiciera un retrato de perfil, con el fondo del atardecer de Granada. Carril de la Lona abajo la llevaba Navajas, cuando antes de llegar a la Puerta de Monaita, esa de los aguerridos arqueros africanos, defensores de la medina a ultranza, las jarras del frontal se hicieron presentes, y hubo tiempo de echar una mirada al horizonte, incluso una parrafada, pues se me acercó Antonio Berbel Linares, aquel que en su casa de la curva de El Violón me invitaba a vino costa y alcaparras, para decirme emocionado que se sentía muy orgulloso de las manos en que había dejado su legado. El que en los años de las hambres había comenzado, porque el párroco de san José, Manuel Fernández Padial, haciendo reformas en su despacho tirara un tabique, y descubriera a la primera Aurora, oculta a los horrores de la guerra y sus desastres. Y mientras la Aurora ascendía a los cielos por la cuesta de la Alhacaba, Tamayo, el grande, el de la voz recia curtida en cuadrillas de profesionales, se me acercó al oído y me dijo: ¡Ya hubiera yo querido en mis tiempos, trabajar con estos chicos!

Llegó la virgen a Plaza Larga, y el mundo entero se concentró bajo su mirada. Gentes venidas de tierras lejanas, no daban crédito a lo que veían. Como trabajaban esos costaleros, como sonaba esa banda, la de San Isidro de Armilla, tras el manto acompasada, de tal forma que ya es impensable ver a La Aurora en la calle, sin los de Melchor Perelló acompañada. La noche caía sobre Granada cuando la virgen llegó a la iglesia del Salvador, ya con la Alhambra iluminada, y el comandante Marín, sentado en el aljibe de la esquina de la Placeta del Salvador, junto al balcón de las acacias de Benítez Carrasco, oró una vez más ante su Señora, sin dar crédito a lo que pasaba. Su Aurora por el barrio a contramano, por calles que hasta el sábado no había sido suyas, pero ya se sabe que cuando una es reina y madre del Albayzín, nadie cierra calles a tal dama, que la veteranía es un grado, y su parroquia una abierta Granada. En el Peso de La Harina y tras un relevo costalero, se unió al cortejo la zambra, para entrar en el Paseo de Los Tristes, donde a los pies de La Alcazaba, el Dauro pidió la venia para parar sus aguas, y desde La Casa de Las Chirmiás, se encendió candela y lumbre de fragua, cuando el bronce de Mario Maya cobró vida, bailando el Polo y La Caña a los pies de la Señora, que en esos momentos lo era del Albayzín y La Alhambra. Fue todo el pasado sábado, cuando tras la tormenta, la Andalucía cofrade se dio cita en Granada, para celebrar 75 años de La Señora de blanco del Albayzín coronada. Largo el cortejo, calles atiborradas, cuando llegaba el cortejo a San Pedro, se me acercó Talavera, auroro de la cantera, para decirme contento: Todo mereció la pena por Ella.

viernes, 6 de septiembre de 2019

SEGISMUNDO

SEGISMUNDO

Tito Ortiz.-

¡Ay mísero de mí! ¡Ay infelice! Apurar, cielos, pretendo ya que me tratáis así, ¿qué delito cometí contra vosotros, naciendo? Por qué tengo que aguantar la sinrazón de quienes, escondiéndose tras las siglas de sus partidos, ganan opíparos sueldos -algunos hasta "rebañan"- por no hacer nada, por no estar preparados para desempeñar las funciones innatas a, la defensa de los intereses de los ciudadanos, por carecer de la titulación exigida, incluso para manejar una escoba y un recogedor, por eso, el delito mayor del hombre es haber nacido. De lo contrario, Granada no nadaría en basura como al mundo es bien notorio. Más si en vuestro alcázar mortuorio, me aprestáis venganza fiera, mirad bien que aquí os espera, otra vez... don Juan Tenorio. Próximos los cementerios hermanos están, y pone el vello de punta comprobar el estado en que se encuentra su carretera de acceso, la que corona El Llano de La Perdiz. Pulmón natural de Granada, de vistas privilegiadas y deportistas sin techo. El estado de la pista es tan peligroso, que corren peligro quienes la toman para correr, o transitan en coche o moto. Su conservación es denunciable a las autoridades competentes, que en semejante situación de alto riesgo, añaden la falta de limpieza en un paraje donde la basura y el matorral, campan a sus anchas, como si no pretenecieran al municipio.Sólo quisiera saber para apurar mis desvelos (dejando a una parte, cielos, el delito de nacer), qué más os pude ofender para castigarme más. ¿Por qué tengo que soportar? que desde el Puente Verde a la Fuente de La Bicha, la basura y los matojos campen por sus respetos, hiriendo la vista al pueblo, con olores nauseabundos y riesgo de males, típicos de enfermos. Aunque si nací, ya entiendo qué delito he cometido. Bastante causa ha tenido vuestra justicia y rigor; pues el delito mayor del hombre es haber nacido. Y haberlo hecho en Granada, donde su belleza clama y reclama, mejores cuidos de sus políticos. En otra ciudad más fea, la basura y los ramajos, llaman menos la atención, pero en esta joya de Al-Andalus, donde civilizaciones varias dejaron su legado, se exige a los demandados, exquisito trato en conservación y cuidado, pues como elegidos por el pueblo, deben prestar el servicio demandado. No es posible a éstas alturas, que El Lavadero de La Puerta del Sol, sirva de recipiente para escombros y cascajo, la basura del día y los restos de botellones a destajo, que a la luz de la luna, se celebran en lo alto de ese barrio de Los Alamillos, frontera de judios y cristianos. Ahora que ya por fin, Torres Bermejas ha dejado de ser, la letrina del barrio alto, no debemos consentir que la degradación vaya bajando. Se que alguno de los Caballeros 24, ni siquieran han pisado estos lugares sacrosantos, por eso recomiendo su visita y desde el conocimiento de tan triste realidad, la urgente reparación de tanto quebranto, en lugares tan entrañables, por la plebe visitados. Lloro con duelo ante la Puerta de Monaita, lugar por las ordas masacrado, sufro por la Fuente del Avellano y sus contornos, abandonados a su suerte tanto por dios como los humanos, y mi lamento es eterno, cuando camino del Dauro, bajo desde El Llano de La Perdiz a Jesús del Valle, es que se me caen los palos del sombrajo. Es del vulgo bien sabido, que un registrador de la propiedad, mientras se rasca las pelotas, gana un dineral. Pues mucho más grave es lo de, un político elegido por el pueblo, ahí si que no hay salvación.

martes, 3 de septiembre de 2019

NATALICIO Y ATENOR

NATALICIO Y ATENOR

Tito Ortiz.-

Lo que yo me ahorro en psicólogos, eso no lo sabe usted muy bien. Calculo que una verdadera fortuna, con la que podré reforzar la pensión, que al paso que va la caja común de todas las Españas, no vamos a tener ni para pipas. Esto viene a cuento de que no sé si se han dado cuenta, pero septiembre se nos ha echado encima. Así, como lo oyen, que hace horas este país estaba de vacaciones en Benidorm, junto con otras naciones, y que en menos que tarda en persignarse un cura loco, estamos en el mes noveno del calendario, con la vuelta al trabajo, el regreso al cole, los políticos insultándose para justificar la nómina, y los problemas de los ciudadanos cronificándose en fase aguda, a pique de que nos de algo. Que de seguir así. Nos va a dar. De eso que a nadie le quepa la menor duda. La situación es tan triste y desesperada, que el personal ha decidido bajar la guardia, resignarse y esperar lo que tenga que pasar, porque de lo contrario, si de verdad eres consciente de lo que están haciendo estos maleantes, te echas a la calle con una servilleta a cuadros atada con cuatro nudos a la cabeza, y el cuchillo del pan, que tiene dientes de sierra y hace más daño, y no dejas títere con cabeza.

Que nadie en el viejo continente haya sido capaz de parar, al inglesito ese que parece el doble de  Donald Trump, que se está pasando por el forro de las entretelas a toda la Unión Europea, poniendo en peligro el mayor proyecto internacional desde la segunda guerra mundial, es una tragedia para la que no estamos preparados. Que Pablo Iglesias, Casado y Rivera -que dicho así parecen un trío cómico de los setenta- lleven a esta nación a unas nuevas elecciones, es para llorar en el Partenón, hasta que se inunde. Que la triste estadística de las mujeres asesinadas no pare de crecer, no hace más que dejar a las claras, el gran fracaso de esta sociedad tan moderna, que tiene como asignatura pendiente, algo que viene ocurriendo desde que vivíamos en las cuevas de Cromañón, y que un partido de extrema idiotez y mala leche, tilda eufemísticamente de, simple violencia doméstica. Se necesita tener estómago para eso. El mismo para comprobar, que no se ha iniciado – prácticamente- la legislatura en el convento de la Plaza del Carmen, y ya hay quién reclama la alcaldía para dentro de dos años. Pero, ¿Estaremos vivos entonces? A qué viene tanto revuelo por un supuesto pacto entre caballeros, cuando una de las partes sostiene que no solo, ni hablaron de ello, sino que ni siquiera se apretaron las manos, después de haberse escupido en las palmas, que es como se sella un pacto entre caballeros en el Albayzín, de toda la vida… Vamos hombre. Se necesita ser un niño mal criado, para reclamar eso a estas alturas, cuando nada sabemos de un presupuesto que dé continuidad a este acuerdo a tres bandas que, ha dejado al partido más votado en Reyes Católicos, esperando el semáforo para echar la primitiva donde siempre. Es por ello y por lo que está por venir, que desde el pasado domingo, barruntándome yo como se iniciaba septiembre, a traición y con el enemigo en casa, planté el tocadiscos en la mesa de camilla, y desde entonces no paro de escuchar a “Los Indios Tabajaras”, aquellos dos sabios brasileños, que son los únicos que sin tener que darle patadas a un balón, han hecho de la vida un paraíso. Gracias a los hermanos Natalicio y Atenor, he tirado los ansiolíticos por la ventana. Y ahora que venga Paco Cuenca y me lo cuente.

sábado, 31 de agosto de 2019

LA TORTAJADA

LA TORTAJADA

Esta santaferina de fama internacional en su época, coincidió con La Bella Otero en el París del cancán, que inmortalizó Toulouse-Lautrec

Tito Ortiz.-

Lo mismo que un siglo antes, la motrileña, María Antonia “La Caramba”, había conquistado Madrid, Consuelo Tamayo Hernández, “La Tortajada”, sentó plaza y cátedra en un París que a finales del XIX, disfrutaba de unas noches históricas en acreditados locales de variedades arrevistadas. Cantaba con gracia y donaire, bailaba con movimientos personales en acompasadas coreografías, y su desparpajo a la hora de hablar y desenvolverse en todos los ambientes, causaron sensación en aquella Francia de la Belle Époque. En 1864, nace en un castillo francés el gran pintor y cartelista, Toulouse Lautrec, quién mejor retrató aquella época parisina de juerga y diversión. Pese a que no sería descartable, lo cierto es que, no hay evidencia que nos haga sospechar relación alguna entre ambos, pero no sería descartable que la granadina, apareciera en algún cuadro, o sobre todo, cartel del genial artista, porque coincidir en el tiempo, coincidieron. Lo mismo que podemos asegurar que, por los años y locales de sus actuaciones, también estuvo cerca de otra leyenda de aquel tiempo como, La Bella Otero. Claro que al coincidir en actividad artística y mismos teatros, no sería descabellado sospechar cierta tirantez en el trato, o distanciamiento prudente, porque no hay constancia de amistad entre ellas, o de riñas y escándalos por asuntos de competencia, muy al uso entonces.

RAMÓN TORTAJADA

Encarnación recoge el nombre artístico de, “La Tortajada”, del apellido de su marido, que la desposó cuando ella apenas tenía quince años. La granadina se encontraba educándose en un colegio de Barcelona, cuando el director del coro en el que cantaba, vislumbró en la niña actitudes y aptitudes dignas de promoción y deleite. Se casó con ella, la amoldó artísticamente a los gustos de la época, y erigiéndose en su marido y representante, no dudó en presentarla en los mejores teatros de Madrid y Barcelona. Viendo el éxito obtenido, lo tuvo claro y dio el salto a París, donde La Tortajada se convirtió en la reina de teatros y salas del momento. Agoniza el siglo XIX, comienza el XX, y la artista santaferina recorre Europa, América y África. Cosechando los triunfos más importantes de su carrera. Con el paso de los años, regresan a la capital instalándose en una casa de la Plaza de Mariana Pineda, lo que hace que Ramón frecuente la tertulia “El Rinconcillo” del café Alameda, donde coincide con los intelectuales capitaneados por Lorca, y donde alguna tarde se le vio sentado al piano. Pero Ramón protagonizaría un hecho del que la prensa se hizo eco en toda España. Aprovechando una salida a misa en Las Angustias de su esposa, huye con la cocinera y todo el dinero que puede arramblar, pero es detenido en una casa de huéspedes de Barcelona, donde se comprueba que había vaciado las cuentas de La Tortajada en Berlín, y se le encuentran ciento cincuenta mil pesetas de la época, producto de haber dejado a cero, otra en una entidad mercantil.

GLORIA Y DECLIVE

En 1906, cuando La Tortajada está en pleno apogeo, viene al Teatro Cervantes de la capital, y actúa desinteresadamente con la condición de que la mitad de lo recaudado sea para los necesitados de Santa Fe, y la otra para los granadinos. Fue siempre una mujer muy religiosa y generosa, como lo demuestra que fuera recibida en audiencia privada por el Papa, Pío X, un asunto que entonces no estaba al alcance de cualquiera, y menos de una artista de fama mundial, especializada en tan peculiar y moderna actividad. Cuentan sus muchos biógrafos que, también fue condecorada por el Zar Nicolás II, y por el Káiser alemán, Guillermo II, que sobre ella se publicaron noticias falsas como que había sido raptada, asesinada o comida por caníbales, asuntos estos que denotaban la celebridad de nuestra paisana, y su fama internacional. Cuando en 1911 viene al lecho de muerte de su madre para despedirse, esta le pide que abandone los escenarios, y Encarnación la satisface dos años más tarde, al cumplir con los compromisos contraídos con anterioridad. Consuelo vivió en Granada hasta 1955, frecuentando la basílica de La Patrona, con una vida social constreñida,  y la asistencia a los festejos taurinos, que eran muy de su agrado. Decide entonces volver a la casa paterna de Santa Fe, donde están sus raíces, frecuentando la Iglesia de La Encarnación. Allí, donde los reyes católicos instalaron su campamento, durante el asedio a La Alhambra, falleció La Tortajada en 1957. Una mujer que lo fue todo en el music-hall, cuya vida es digna de ser llevada a la pantalla.

viernes, 30 de agosto de 2019

EL SARGENTO PATRICIO

EL SARGENTO PATRICIO

Con la corneta de llave, no hubo quién le superara. La semana santa de los años sesenta y setenta en Granada, tras su Cristo del Perdón, gozó del mejor sonido procesional.

Tito Ortiz.-

La Banda de Cornetas y Tambores del Batallón Mixto de Ingenieros, a las órdenes del Sargento Patricio, sonó siempre mucho mejor que la del Córdoba 10. Eso me lo reconoció hasta el propio, Julio Marabotto Brocco, por entonces Capitán Director de la Banda de La Novena región Militar de Granada, y Julio era un músico de carrera, que llegó a dirigir el Real Conservatorio de esta tierra. La banda de ingenieros era otra cosa, con respecto a las demás, distribuidas en cada acuartelamiento de entonces. Entre otras cosas, porque el Sargento Patricio nos ponía a ensayar todos los días, varias horas, en aquel segundo patio, que nosotros llamábamos el de las antenas, porque allí estaban las de las emisoras de los compañeros de Transmisiones, ingenieros como nosotros, y si no, que se lo pregunten a Jerónimo González del Pino, mi entrañable y admirado amigo, que ha entregado su vida profesional a este menester, y con el que de vez en cuando bebo, porque los amigos que no beben juntos, no son de fiar, pero no es nuestro caso. Pero volvamos a las cornetas y tambores de Patricio. Como jefe de la banda era incansable, y además perfeccionista, con lo cual, si la marcha que estábamos ensayando no salía perfecta, la repetíamos hasta conseguirlo, sin mirar el reloj. No importaba si era la hora de la salida a paseo, o sonábamos como los ángeles, o de allí no se movía nadie.

LLORAN LOS LEGIONARIOS

Aquella semana santa de 1972, a los componentes de la banda nos llamaba la atención, porque llevábamos desde enero ensayando el himno de La Legión, una marcha que no habíamos tocado nunca, pero que el sargento Patricio había incluido en el repertorio de las procesionales, sin decirnos por qué, como era su costumbre. Le gustaba sorprendernos y ya lo creo que lo hizo. Como cada año, la banda desfilaba en Alcaudete, (Jaén) en una procesión mañanera, alrededor de un monte, y que posteriormente representaba en la plaza del pueblo, una escena de la pasión en la que Judas es perseguido por haber delatado a Cristo, un asunto de mucha tradición y atractivo por las máscaras que usaban. Pero también desfilábamos  un día en Archidona y otro en Antequera, donde coincidíamos con la Legión. Allí era la costumbre antes de salir en el cortejo, que los mayordomos reunieran a las dos bandas en el patio trasero de un bar, donde se nos ofrecían unas viandas para acometer las horas siguientes con buen ánimo, y donde a los postres, en una especie de pique o competición, los legionarios tocaban una marcha de semana santa, nosotros le contestábamos con otra, y así se establecía una especie de reto sonoro-cofradiero, para ver cuál de las dos bandas tocaba mejor. El jurado era popular, o sea todos los vecinos que entraban en aquel patio y los que escuchaban desde la calle. Comenzó la Legión con una marcha saetera de brío,  y cuando era nuestro turno, el sargento Patricio nos hizo una señal pactada, y rápidos como centellas iniciamos el toque de  himno legionario. Como accionados por un resorte, los caballeros legionarios como mandan sus ordenanzas, adoptaron la posición de firmes con la mirada al infinito, y a nuestros sones cantaron con la voz entrecortada por la sorpresa, el novio de la muerte. Muchos de ellos llorando de emoción ante la sorpresa. Una vez más, el sargento Patricio había triunfado.

VIRGEN DE LA AURORA

Como cada martes santo, la banda de Ingenieros acompañábamos a la hermandad de la Aurora, no sin antes cumplimentar nuestro trabajo por la mañana, que consistía en instalar unas rampas para que los costaleros salvaran los escalones de la iglesia de san Miguel y los de la placeta de san Gregorio. Las mismas rampas que instalábamos en el viejo Los Cármenes, para cuando venían el Madrid o el Barcelona, y se abría la tapia para que pudiera entra la gente con mayor holgura. Marchábamos dentro del cortejo y estando a punto de entrar en la tribuna de la plaza del Carmen, Patricio mando tocar una marcha que entre el principio y el final, permitía un solo de corneta a elegir por el solista que era él, y que habitualmente no ensayaba con nosotros para causar mayor sorpresa, y ya lo creo que nos la dio. Cuando desfilábamos por mitad de la plaza del Carmen, las cornetas terminamos la introducción y los tambores redujeron el volumen del redoble esperando el solo del sargento, este se despachó a gusto con la mejor interpretación, por primera vez en la semana santa de Granada, ya que después sería muy imitado, del Himno a La Alegría, que por entonces promocionaba Miguel Ríos. Cuando Patricio terminó el solo, la plaza se vino abajo, y para rematarlo, cuando giramos a Reyes Católicos, abordó el, Silencio de Roy Etzel, que en la época estaba de moda. Cada vez que hablo con él, escucho aquella Granada cofrade sorprendida y entusiasmada. Que grande eres Patricio, esta ciudad te debe un homenaje.

jueves, 29 de agosto de 2019


A MEDIA NOCHE

Pioneros en la divulgación del más allá, de otras dimensiones, Antonio José Alés y el profesor, Jiménez del Oso, coparon la radio y la tele de una época, con audiencias millonarias.

Tito Ortiz.-

Comenzaré diciendo que, no fui un niño normal. Mientras mis amigos leían al Capitán Trueno, yo me enfrascaba con los libros de mi tío Rafael, dejándome la vista por la noche en la cama, gracias a una linterna de petaca, leyendo a Edgar Allan Poe y a Gustavo Adolfo Bécquer, en su obra más fantasmal y tenebrosa. Así crecí hasta mi época de estudiante, en la que en lugar de irme a la biblioteca, escogía el silencio y las tumbas del cementerio más apartadas y lúgubres, para empollar y sacar buenas notas. El llamado, “más allá” me apasionó siempre y lejos de asustarme, me ha preparado para el momento final, con una tranquilidad que los más cercanos a mi tachan de extraña, y mis enemigos de extravagante. Yo era de los que a las tres de la madrugada, en el silencio de la alcoba, escuchaba la radio con los ojos abiertos como platos, para no perderme un solo detalle de una buena psicofonía, con la voz de alguien que nos dejó hace años, y que pretende comunicarse con nosotros. O la buena narración de un cuento de terror, representado por un buen cuadro de actores, con la música adecuada y los efectos especiales imprescindibles para sentir miedo hasta gritar o sobresaltarse. El “posprograma”, era lo mejor. Sobre todo cuando crujía el armario, o cuando sentía que la presencia de alguien era patente, pese a no ver nada.

ANTONIO JOSÉ ALÉS

Aunque en los años sesenta yo escuchaba en la radio el famoso programa nacional, “El Criminal Nunca Gana”, con historias sobrecogedoras, ya en los setenta, fui un incondicional de Antonio José Alés, y su “Media Noche”. Madrugadas en vela para oír su voz recia y tenebrosa, relatando historias de fantasmas y aparecidos, con grabaciones realizadas en lugares donde se manifestaban. Empezó su andadura radiofónica en la Cadena SER con el programa Agosto Noche luego se llamaría Verano Noche para convertirse en el conocidísimo “Medianoche”. Corría el año 1977. El 14 de Septiembre de 1987 y tras 10 años de éxito en la SER, Medianoche pasó a emitirse en Radio España de Madrid, Radio Miramar de Barcelona y Cadena Ibérica en toda España. Así estuvo hasta el 30 de Junio de 1993.  El 1 de julio de ese año, Antonio José Alés y su programa "Medianoche" pasaron esta vez a Onda Cero Radio, donde permaneció hasta el año 1995. Después de abandonar Onda Cero se "pierde" la pista de Alés, parece ser que viaja a Argentina, a Miami y no volvería a España hasta el año 1999 y lo hace --según me pudo confirmar uno de sus hijos-- como director de una pequeña emisora ubicada en una población situada a 38 Km. al suroeste de la comunidad de Madrid. Así lo recuerda su admirador y discípulo, Ramón Álvarez. El 14 de agosto de 1979, Alex convocó por las ondas la primera Alerta Ovni en España, que tuvo doce millones de oyentes. Un fenómeno que no se ha repetido con esa magnitud.

JIMÉNEZ DEL OSO

Por supuesto no me perdí ni una sola, “Historias para no dormir” de Ibáñez Serrador en la tele, y fue años después cuando supe, que ya en 1967, cuando se grababan estas historias de terror en TVE, Chicho contaba con un asesor, psiquiatra y periodista que se llamaba, Fernando Jiménez del Oso, que años más tarde veríamos presentando los primeros programas de misterio en la televisión pública, como, el profesor Jiménez del Oso. A partir de 1974 comenzaría su popularidad, al ser fichado para llevar una pequeña sección dentro del programa, “Todo es posible en domingo”, dirigida por Pedro Amalio López, hablando de enigmas y misterios. Dos años más tarde, se le ofrece la oportunidad de dirigir y presentar “Más Allá”, su propio espacio en la única televisión entonces, que estuvo en antena hasta 1981, con altas cuotas de audiencia. Entre 1982 y 1984 su espacio pasó a denominarse “ La Puerta del Misterio”, dentro del cual, aparte de los programas grabados en estudio, albergó dos series de documentales realizados y presentados por él: “El otro Perú” y “Ellos” (1984) -dedicado al fenómeno OVNI, con testimonios de testigos de toda condición social, incluyendo pilotos y militares. La voz aterciopelada de Jiménez del Oso, su semblante sereno y mirada penetrante, daban a sus historias, el marchamo de veracidad que todos buscábamos en el mundo de lo oculto y del misterio. En los años ochenta, y en compañía de otro de mis admirados, Juan José Benítez, grabó otra serie, titulada “En Busca del Misterio “, en la que recorrieron parte de América y la Isla de Pascua, y tampoco olvido de sus últimos programas, la serie de, “Viaje a Lo Desconocido”. El profesor Jiménez del Oso, fue el primero en tratar estos temas en la televisión, con gran rigor y permitiendo que el espectador tuviera siempre la última palabra. A ver qué pasa esta noche, cuando esté solo en la cama, ¿vendrán a verme?




miércoles, 28 de agosto de 2019

SEÑORITA, MI CONFERENCIA CON…

SEÑORITA, MI CONFERENCIA CON…

Hubo un tiempo en el que, hablar por teléfono de un pueblo a otro requería paciencia y templanza. Centralitas de cables manuales, con señoritas que hacían posible el milagro, nos conectaban, pero siempre con demora.

Tito Ortiz.-

Ahora que Telefónica está arrancando de nuestras aceras y parques las últimas cabinas telefónicas, dos grandes mitos se me vienen abajo. El inmortal Miguel Gila, con su inolvidable teléfono de baquelita negra, preguntando cuanta demora tienen su conferencia y Mercero con López Vázquez, ganando premios internacionales en un momento de la España gris, al dejar al actor encerrado en una cabina que dio la vuelta al mundo. Sé que a los más jóvenes, que nacen ya con un móvil en la mano, esto les sonara a batallita del abuelo, pero como abuelo que soy, no me resisto a contarles cómo era eso de hablar por teléfono en mis tiempos, y conste que yo nací después del Cuaternario, y de los dolores, claro. Porque ahora con el celular – que dicen los hispano hablantes – pulsas un botón y hablas con alguien en  la otra parte del mundo al instante, pero en mis años tiernos, que yo también los tuve, hablar de una provincia a otra podía llevar incluso un par de días.

LOCUTORIOS

Nací cuando en Granada había pocos teléfonos y los números eran de tan solo cuatro cifras. Por ejemplo, el de María “La del Teniente” como la llamábamos, porque su marido era militar, era el 2224, y la familia era tan estupenda, que nos permitía a los vecinos dar su número a los familiares lejanos, para que en caso de desgracia o alumbramiento, nos dieran tres voces por el balcón para acudir al teléfono y ser informados del evento por nuestro familiar. Para conectar con la familia lejana sin urgencia, o sea, porque el Pepe estaba haciendo la mili en Melilla, o para comprobar cómo iba el embarazo de Purita que se casó y marchó a vivir a Las Palmas, para eso se utilizaba el locutorio de Reyes Católicos, frente a la Sastrería Ruiz, esquina a calle Abenamar. El local tenía un amplio mostrador atendido por pacientes señoritas, que tomaban nota de tu llamada a donde fuera, calculaban la demora, quedándose siempre cortas, y te invitaban a sentarte a esperar ser llamado, para asignarte una cabina donde poder hablar con tu interlocutor, que pese a ser de madera y con puertas para cerrar, la privacidad era imposible, porque la calidad del sonido era tan mala, que te obligaba a desgañitarte para que, el que había al otro lado te entendiera. Unas veces la comunicación se cortaba sin más, otras tú lo oías a él pero él no te oía a ti, y ya el colmo del esperpento era cuando se entrecruzaban otras conversaciones, y no solo te impedían escuchar a tu familiar, sino, que te enterabas de la vida y milagros de gentes lejanas, a veces incluso en otro idioma, lo que hacía del hecho de hablar por teléfono con tu familia, una serie de historias interminables, a cada cual más absurda o desternillante.

PRIVACIDAD

Que tu llamada fuera privada y que solo la escucharais los protagonistas, era solo cuestión de buena voluntad de la señorita que la hacía posible, ya que al tratarse de conexiones manuales, si ella quería escuchar lo que hablabais, la centralita se lo permitía técnicamente sin ningún problema. El resto dependía de la operadora y la medida de su curiosidad y discreción. Algunas tenían que dormir al lado del aparato, sobre todo en los pueblos, por si por la noche ocurriera alguna desgracia o emergencia. Cuando por fin terminabas de hablar y colgabas, te acercabas al mostrador, decías el número de tu cabina, y la señorita miraba el contador correspondiente, contaba los pasos gastados, el importe por cada paso, y te cobraba la llamada. Años después llegaron los números de seis cifras. El mío fue el 228084, y después los prefijos para diferenciarnos de cada provincia y poder conferenciar sin necesidad de poner una operadora de por medio. Se acabó el llamar al 09 para solicitar una conferencia terminando diciendo aquello famoso de: ¿Señorita tiene mucha demora? Llegaron las primeras cabinas en las calles y los teléfonos públicos en bares y restaurantes. Se accionaban con unas fichas de cobre con ranuras, que comprabas al precio de tres pesetas, y te permitían hablar durante tres minutos. Después las fichas dieron paso a las monedas de curso legal y a las tarjetas de prepago. Ahora nos toca decir adiós a las cabinas, en un tiempo tan moderno, que incluso, ya puedes hablar por teléfono desde tu reloj, y viéndole la cara a tu interlocutor. Cuando me veo bajando desde el Albayzín, de la mano de mi madre, hasta el locutorio de Telefónica, para hablar con mi padre que se encontraba en Alcaudete, barnizando el ayuntamiento, tras el aviso llegado al domicilio, y hoy con sus ochenta y cinco años,  la veo hablando con mis hermanos por su móvil, me parece ciencia ficción. Y es que los de la década de los cincuenta, hemos vivido cosas para llenar tres vidas. Esto va que vuela y la suerte es poder contarlo.